° LA CUESTION DE LA PRUEBA EN PSICOANALISts slic, alasolucion de un acer Cel sueio es un acertio, nuestros redecesores han cometido la fala de querer interpretarlo como di- bj, de ahi que les haya parecido absurdo y sin valor").” Freud nun- Ca puso en dla que, porinaccesible que pudiee se el inconsciente, participa de calguier manera de ls misma estructuraspsiquicas fue a concen, Esta et utara com permite “nsertar” actos ine Conscicntesen el texto de los actos conscientes Este rasgo pertinente det meet de investgaion se armoniza muy bien con fos criterion aque se han reconocdo alos "hechos" en psicoanilisis, en particular on los riterios de decbiliad y de sustuibitdad (crterios uno y 1s Se procedmiende invention puede ser apiadoalaver 2 los iniomasneur tory Tos sues, es porgue Ts Torti del ‘ico Trewmbidung)yTa formacion del sntoma (Symptomdildn won homogeneos y susuibies.® Eve estrecho parents tacho arenes entre divers cone de cnromiso nas erie hl 5 noGin ampliamente inchasva de texto no abar P32 (ca de la eich tz por R, ld, pp. 24 ys). Com e ensayo ssn ad “Uncncen a inconaent) (epee on epoca Sor tp, 120 15 Foil 4p.) Peed aoe con ao coe gue rnin concen “sto una wanlormaci "inp de alguna ner conscience) © a traduesibn (Chee okt} uaa ya de lao ito" f_~ —) olol$oGsESEGsSGoO6O$6OGL<_ la unidad profunda entre suefio y sintoma, sino entre esas dos rmaciones tomadas en conjunto de los fensmenos tales come suefios diurnos, mitos leyendas, proverbios, juegos de palabras, chistes y ex presiones ingeniosas. La extensidn progresiva de este método de in vestigacién resulta asegurada por el parentesco especial que se revela entre, por un lado, el grupo de los fantasmas designados arriba como tescenas infantiles (situadas en La interpreacion de los sues ence los suetios tipicos: suefio de desnude7, suerio de muerte de una persona ‘queria, etc) y, por otto lado, las estructuras miticas mas altame te organizadas y mas permanentes, Con este mismo procedimiento de investigacion concuerda, de manera completamente privlegiada, fa estructura textual comin al complejo de Edipo, descubierto por Freud en su autoaniliss,y ala tragedia griega de Edipo, transmitida hhasta nosotros por las obras maestras de la literatura. Asi pues, ay ¢O- rrespondencia entre la extensin del procedimiento de investigacion ¥ lo que podria lamarse el espacio de lo fantastico en general, en el ‘cual llegan a tener lugar producciones psiquicas tan diversas como ta ensonacin, el suetio despierto, los juegos infants, las novelas pucologicasy otra ereaciones potticas. De la misma manera, los con- Flctospsiguicosinscritos en la piedra por el Moises de Miguel Angel fe preva ala interpretacion en virwd de Ia naturaleza figurable, Sustuible de todos os sistemas de siguos que dependen det mismo procedimiento de investigacion, ero, si nos limitaramos a desprender las implicaciones de los con- ceptos de texto de interpretacion, llegariamos a una concepcin ompletamente errnea de psicoandliss Elpsicoandiss podria exar uray simplemente sitado bajo la éyida de Tas ciencs historco. Torntacuipcar paralelamente ala hologiay ala exegesis Estariamos ‘ntonces omiiondo Fasgos especficos de Te iterpretacion que slo pueden ser captados en el método de investgacion que va junto con 1 método de tratamiento. Por qué, en efecto. fa siguificaion det Sintoma y el del suefio son tan dificiles de desciia, sino porque. en: tre Ia significacion manifiesta ya signihicacier poner, Freer er te deforinacion de ditorion (Entrliang) soe sme el titulo de “wabajo el seo™ ‘Mecanismos que Freud enumera bajo el ttl nian de lx ris? (Las diversas formas de (abajo $08 “en La int Fa er camden, desplramient, 1: m0 iv, sino deh relacio sme aqui de Ta teoria del dn y método de tratamiento.)La CUESTION DE LA PRUEBA EN PSICOANALASI5 # tsa “dionsin”exen verdad una especie extrafia de fendsmeno,s \oatodo ipo de metaforasrayanas en lo isco para enc de esta deformacion, de la que dice que “no piensa, nj saan ni en genera juga sino que se limita a emodelar pensamicn. sar ateaosy cos", Ya hemos mencionado la condensacién y el dlsplaraniento que son nietiforas Gast Picas para oT abajo deT sue Severo Ta tifa ceiral de Tarepresion organiza todas las ovay, Fait e punto de tansformarse en un concepto torico cuyo origen ineaforco es ovdado (como To s, por To demas, econcepto mismo Je ditorion, que snificaiteralmente un desplazamiento violento una deformacin) La semimetifora de la represion per Freud ha recurrid tenece al mismo ciclo.® ‘Otra metifoa casi fica de igual importancia es la de inversién, euyo parentesco no ocultaa Freud con la operacién de un capitalista que di pone de fondos al servicio de un empresario ("el empresario de sueiio", «el pensamiento diurno; "el eapitalta que compromete la disposicion prcoldgca necesaria para el lanzamiento del suefio es siempre, absoluta- Inns eal. ensaiento dio, un desco proven de in fhe spumattonscinse ct elspa oan fu LA CURSTION DE-LA PRUEBA EN PstCOANALISIS 43 de camidad, sino también de calidad, de verdad. O, para decirlo de ‘tro modo, sobre si el grado de exactitul que puede esperarse dle los cenunciados psicoanaliticos depende del tipo de verdad que pueda cesperarse en este terreno." A falta de tuna concepcién precisa de a diversidad cualitaiva de los ipos de verdad en relacién con los tipos de hechos en si, no han dejado de aplicarse al psicoansliss criterios de verificacion viTidos para Tay eieneras en Tos cuales Tos hechos son cmpiricamente dados a uno o mis observadores externos, La concle Sone entonces 0 bien que el psicoanalisis no satisface de ninguna Tmaniera estos criterios, 0 bien que solo los satisface i estox criterion se ‘sen debiltados, La CuestiOn no esta, segin yo, en Como usar de mane 108 flexible crterios estritos y cémo ubiear as el psicoae js en una posicién mis 6 menos elevada sobre una escala nica de verificabilidad (pero sin ninguna duda bastante bajo en ella) sino ide saber cémo especificar la pretensién a la verdad en funcién dela naturaleza de los "hechos’ en el terreno psicoanalitico. ‘Yolvamos a nuestra enumeracion de los criterios de Yo que vale \ como hecho en psicoandlisis, y preguntémonos qué forma de ade- ¢ ¢ ccuacién resulta apropiada para esos critetios. En primer lugar, sila ,~ ‘experiencia analitica descansa en el deseo proveniente del discurso, © in eapecie de verdad que le corresponde mejor esa de un “deci ver- ‘Gad, antes que Ta de-un “ser verdad” Fate “decir verdad” est signado negativamente por fa caractervzacién de los mecanismos de distorsion, como distraz,falsificacin, lusion y en general como ine comprensién. La verdad esta aqui mis cerca de la ragedia griega que de la fisica moderna, Pathe mathos, aprende mediante el sufrimiento, dice el coro del Agamenin de Esquilo. Pero, ah ah a Rad a ea hs