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UNIVERSIDAD NACIONAL DE UCAYALI

FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS

ESCUELA PROFESIONAL DE DERECHO

MONOGRAFÍA: CONSTITUCIÓN PERUANA DE 1823

AUTORES :

Campos Gracia, Diana Melisa Moreno Villacorta, Iris Almendra

Campos García, Maria Victoria Luera Ocampo, Rosa Jianelly

Guerra Alegría, María Victoria Romero Katayama, Sumiko

Meneses Aliaga, Alexandra Sánchez Rengifo, Fernando

AULA : Derecho IV - A

ASESOR : Dr. Jorge A. Ruíz Rojas

CURSO : Derecho Constitucional Peruano

PUCALLPA – PERÚ

2014
DEDICATORIA:

A nuestros padres por su apoyo incondicional,

Al maestro y Decano de nuestra facultad por impartirnos sus conocimientos.

1
INDÍCE:

DEDICATORIA 1
ÍNDICE 2
INTRODUCCIÓN 3

CAPITULO I: ANTEDECENTES HISTÓRICOS 5

I. Antecedentes Históricos 6

1.1 El Reglamento Provisional de 1821 7


1.2 El Estatuto Provisional de 1821 8

CAPÍTULO II: CONSTITUCIÓN PERUANA DE 1823 11

II. Constitución Peruana de 1823 12

CAPÍTULO III: TENDENCIAS FILOSÓFICAS EN LA CO NSTITUCIÓN PERUANA DE


1823 15

III. Tendencias Filosóficas 16

CAPITULO IV: ESTRUCTURA CONSTITUCIONAL 18

IV. Estructura Constitucional 19

4.1 Parte Dogmática 20


4.2 Parte Orgánica 22
4.3 Cláusula de Reforma Constitucional 54
4.4 Paralelo entre Constituciones (1823-1993) 55

CONCLUSIONES 63
RECOMENDACIONES 64
BIVLIOGRAFÍA 66
ANEXOS 67
1–A 68
2–A 101
3–A 105
4–A 112

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INTRODUCCIÓN:

Como es de conocimiento, el Perú desde su independencia en 1821 ha contado


con un Reglamento y un Estatuto Provisional, a partir de las cuales nacieron las
12 constituciones que han regido nuestro país. Estas constituciones tenían la
característica de ser renovadas cada lapso de tiempo, que podrían ser
consideradas muy cortas (casi cada 10 años aproximadamente). Esto refleja la
inestabilidad de las instituciones políticas en el Perú desde el inicio de su historia
republicana como nación independiente.

La historia constitucional peruana ha sido pródiga en la expedición de textos


constitucionales y en la incorporación nominal de modernas instituciones
democrática, pero no en la creación de una conciencia constitucional en la
ciudadanía, ni en el pleno ejercicio del poder con lealtad constitucional de sus
gobernantes. Podría señalarse que el desfase de la falta de vigencia de los textos
constitucionales en la vida social, se debe a que en la expedición de las cartas
políticas se fueron dando al unísono de los cambios políticos y sociales de cada
época: unos más estructurales como la independencia de España y el
establecimiento de la república y, otros más coyunturales, como las guerras
civiles, las guerras internacionales y las revoluciones civiles y militares.

Este curso histórico muestra que las constituciones y la vida constitucional han
dependido directamente de los acontecimientos políticos y militares de cada
época y que los operadores constitucionales no han sido capaces de procesar
dichos fenómenos en el marco de la constitución. Esto se ha debido a la falta de
estabilidad política, que es expresión de la carencia de un consenso mínimo o
pacto social ni siquiera entre las élites dirigentes para asegurar un Estado de
Derecho duradero. La falta de acuerdo nacional que ha creado una cultura cívica
de incredulidad en la sociedad respecto del Estado y la Constitución; debido a
que las necesidades e ilusiones de la población no se han visto satisfechas por
las grandes corrientes ideológicas en cualquiera de sus constituciones: liberales
– 1823; 1828; 1834; 1856 y 1867 - ; conservadoras – 1826; 1836; 1839 y 1860 -
; sociales – 1920; 1933 y 1979 – y esto no ha cambiado con la actual constitución
neoliberal de 1993.

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Dichas constituciones, además, siempre han buscado cerrar una etapa política
e inaugurar una nueva, usualmente denominada de revolucionaria. Por eso, con
acierto De Vega ha dicho que: “hasta cierto punto se podría sostener que la
historia de la temática constitucional, y de los enfoques diversos en su
tratamiento, no es más que el correlato y la consecuencia lógica del proceso de
transformaciones en el ámbito de la ideología y de la legitimidad constitucional
que le sirve de fundamento.” Sin embargo, en el Perú las quiméricas ideologías
políticas liberal, conservadora y social han tenido un asidero apenas virtual en la
vida social y en el quehacer jurídico; produciendo constituciones nominales que
no concuerdan con los presupuestos sociales y económicos y /o constituciones
semánticas en beneficio de los detentadores fácticos del poder. Profundizando
así, más la disonancia entre la norma constitucional y la normalidad
constitucional, así como también limitando gravemente la realización de la
Constitución.

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CAPÍTULO I:

ANTECEDENTES HISTÓRICOS

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I. ANTECEDENTES HISTÓRICOS

Después de la proclamación de la Independencia del Perú en 1821, nuestro país


entró en una etapa de transición entre la independencia y la república
propiamente dicha; esta etapa fue denominada “El Protectorado.”

El libertador José de San Martín asumió el 3 de agosto de 1821 el poder político


y militar del Perú con el título de Protector. Fue precisamente él, quien dio al
estado peruano su primera bandera, su himno, su moneda, así como su
administración primigenia y sus primeras instituciones públicas.

El protectorado tuvo una duración de un poco más de un año, desde el 3 de


agosto de 1821 hasta el 20 de setiembre 1822; en donde se crearon tres
ministerios: Ministerios de Hacienda con Hipólito Unanue, Ministerio de
Relaciones Exteriores con García del Río y Ministerio de Guerra con Bernardo
Monteagudo.

San Martín quería implantar en el Perú una monarquía constitucional y para ello
envió una misión a Europa a cargo de García del Río y Diego Paroissien para
traer un Príncipe de Europa que reine en el Perú. Esto se contradice con la
finalidad que tenía la independencia, pues si se suponía que nos estábamos
desligando del yugo español, por qué tendríamos que traer un príncipe si no es
para retornar a un Perú virreinal solo que, con el título de república.

Asimismo, creó la sociedad patriótica, organización política social que tenía la


finalidad de formar una base social que apoye y respalde sus ideas políticas.
Tendencia que actualmente podríamos denominar como partido político.

Por otro lado, Cambió los títulos de Castilla por los títulos del Perú; quiere decir
que en esencia mantenía a la aristocracia nobiliaria colonial todavía, lo que
reafirma la falta de voluntad de desprendernos totalmente de España. En la
misma línea estableció dos condecoraciones: la orden del Sol para los varones
y la banda de seda para las damas.

Militarmente, San Martín elaboró el plan militar “Campaña de Puertos


intermedios”, con la participación de Thomas Cochrane. Además, creó el primer

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ejército peruano: “Legión Peruana de la Guardía”; que la integraba el escuadrón
de caballería: “Húsares del Perú”. Se formó la primera Marina de Guerra del
Perú, cuyo primer comandante fue el Vicealmirante inglés Jorge Martín Guisse.

Es precisamente en este proceso de protectorado donde empezó a sentirse la


falta de una Constitución Política que orientara y organizara el país; en tanto,
mientras se elaboraban las bases concretas para tal constitución, rigió en el Perú
un Reglamento provisional, reemplazado después por un Estatuto provisional.

1.1 El Reglamento Provisional de 1821

Este Reglamento Provisional, fue dictado por Don José de San Martin el 12 de
Febrero de 1821, constando de 20 artículos.

Con el Reglamento, se divide al Perú en 4 departamentos: Trujillo, Tarma,


Huaylas y La Costa.

Cada región contaba con un presidente del departamento, un gobernador, un


teniente gobernador y un agente fiscal; este último se encargaba de las
instancias en que se interese el erario público, también era de su resorte el
promover la prosperidad y aumento de este ramo, y vigilar sobre la conducta de
los empleados, entablar acciones contra ellos en caso necesario, e informar
sobre las medidas que convengan tomar para el aumento y conservación de la
riqueza pública. Todo el cuerpo de funcionarios se encargaba de velar por el
bienestar social y económico.

Hacia otro punto, campo civil y criminal, en primera instancia, las leyes y
ordenanzas no se alteran de ninguna manera. En el lado judicial, se estableció
una Cámara de Apelaciones en Trujillo con atribuciones propias, en tanto la
jurisdicción eclesiástica seguía ejerciéndose con sujeción al Derecho Canónico.

Todos los funcionarios públicos estaban sometidos al juicio de residencia, y por


último, las leyes, ordenanzas y reglamentos que no estuvieran en oposición a los
principios de libertad e independencia, quedaban en fuerza y vigor mientras no
fueran derogados o abrogados por la autoridad competente.

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El presente Reglamento Provisional dejó de regir el 8 de octubre de 1821.

1.2 El Estatuto Provisional de 1821

Aún antes de haberse instalado el Primer Congreso Constituyente, el 20 de


septiembre de 1822, se procedió a jurar el Estatuto Provisional del Estado; el
cual empezó a regir el 8 de octubre de 1821 y contaba con 10 secciones.

Este fue dictado por San Martín a fin de regularizar sus atribuciones como
protector del Perú, y establecer algunas muestras reglamentarias y
administrativas que podrían servir de base para un mejor gobierno de
Protectorado.

Principalmente, se determinan las atribuciones, derechos y deberes del


protector, convirtiéndose en el Generalísimo de las Fuerzas del Mar y la Tierra,
obligándose a obtener la independencia del Perú. Como punto fundamental, San
Martín legisla la religión del estado, la católica, no pudiendo ser funcionario
público quien no la practique; asimismo está facultado en la determinación de
nacionales (es decir quiénes pueden ser considerados “peruanos”). Además,
establece las garantías y derechos individuales, la función de los ministros y del
Poder Judicial, en la misma línea, las funciones y elecciones municipales.

El protector debía mantener la vigencia del Estatuto hasta que se declare la


independencia de todo el territorio, en cuyo caso se convocaría un Congreso
General que establecería la constitución permanente y la forma de gobierno. En
tanto que provisionalmente estaba obligado a perseguir la paz y el orden social.

En alusión a lo anterior, es importante destacar la declaración de la religión


católica como la religión oficial del Perú; ya que esto se da a consecuencia de
la conquista española en 1532 en donde se introdujo el catolicismo de tal manera
que ganó preponderancia en el país, convirtiéndose en la religión principal.
Podemos decir, que era parte de los rezagos que teníamos con razón de haber
sido colonia de España.

Por otra parte, el Perú como país libre e independiente (aunque no en su


totalidad) debía desligarse de todo poder autoritario y prácticamente absoluto de

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España, por lo que debían establecerse las bases para poder determinar y limitar
los poderes de ciertos funcionarios públicos a fin de evitar lo anterior y empezar
a implantar la democracia con elecciones municipales.

Finalmente, este Estatuto Provisional dejó de regir el 17 de diciembre de 1822.

Tanto el Estatuto como el Reglamento Provisional de 1821 sentaron los primeros


cimientos de lo que luego se convertiría en la gama de constituciones con las
que cuenta el Perú, haciendo un especial énfasis en la de 1823 pues es la
primera muestra de constitucionalismo en el país.

Se sabe por historia que el general San Martín, por decreto de diciembre de
1821, convoco a un Congreso General Constituyente, cuyos objetivos serian
establecer la formación definitiva de Gobierno y dictar la constitución que más
convenía a la nación. Como fecha de su reunión se señaló el 1ero de mayo de
1822, aunque el congreso solo pudo iniciar sus labores el 20 de septiembre de
dicho año. La instalación del Congreso fue en la Universidad Nacional Mayor de
San Marcos. Apenas instalado declaró que quedaba solemnemente constituido.
Acepto la renuncia presentada por San Martín, otorgándole el título de
Generalísimo de las Armas del Perú. El congreso inicio los debates
constitucionales en el mes de abril de 1823. El problema principal que tuvieron
los constituyentes de 1823 fue la forma de gobierno, pues había partidarios de
la monarquía y también de la República.

Así, las bases de la futura constitución peruana, fueron aprobadas por el


Congreso el 17 de Diciembre de 1822, las cuales constaban de 24 artículos, en
donde todas las provincias del Perú reunidas en un solo cuerpo formaban la
nación, la que sería totalmente independiente de la Monarquía Española (pero
que si se podía predicar la religión Católica) y de cualquier otra dominación
extranjera, haciendo un énfasis, que así como no pertenecía a ningún dominio,
no podría considerarse que nuestro país no era patrimonio de ninguna persona,
ni familia.

Esta Constitución fue promulgada por el Presidente de la República José


Bernardo Tagle el 12 de Noviembre de 1823; sin embargo, no llego a regir ya

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que días antes se había acordado que quedarían en suspenso los artículos
constitucionales incompatibles con el ejercicio de las amplias facultades
otorgadas al libertador Simón Bolívar, y hasta que los hechos de la emancipación
varíen. Por la ley del 17 de febrero de 1824 y considerando que las libertades
amenazadas por los reveses que había sufrido la república, se le entrego todo el
poder a Bolívar quedando en suspenso los artículos constitucionales, leyes y
decretos que fueran incompatibles con la autoridad de Bolívar. En 1826 se
promulgó la constitución vitalicia.

Por decreto ley del 11 de julio de 1827 al mismo tiempo que se declara nula y sin
valor la constitución vitalicia, se puso en vigor la de 1823, con modificaciones y
subrogaciones que robustecían al Poder Ejecutivo y ampliaban las atribuciones
de la república.

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CAPÍTULO II:

CONSTITUCIÓN PERUANA DE 1823

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II. CONSTITUCIÓN PERUANA DE 1823:

La Constitución Peruana de 1823 fue dada por el Congreso Constituyente y


promulgada por el Gran Mariscal José Bernardo Torre Tagle. No rigió nunca, por
eso se dice que esta Constitución nació “Muerta”.

El Perú se encontraba en una situación muy crítica, pues los españoles


amenazaban seriamente la reciente libertad; por lo que hubo que recurrir al
Libertador Bolívar.

Esta constitución establece, principalmente, que el gobierno sería popular-


representativo. A la nación le correspondía dictar la constitución y las leyes por
medio de sus representantes; en tanto que los ciudadanos debían concurrir a la
elección de estos, siendo esta “la única función del Poder Nacional pues no se
puede delegar” ; es decir, se da mucho más peso a la práctica de la democracia.
Se determinó además que la representación tendría por base la población
(principio que se abandonó en 1860).

Pero el punto más relevante que contienen las bases de la constitución de 1823,
es que se fijaron los derechos que debían proteger la constitución, con la cual se
declaraba que “el principio más necesario para el establecimiento y
conservación de la libertad era la división de los tres poderes haciéndolos
independientes de cuanto fuera posible”; el poder Legislativo seria único y no
podría combatir contra sí mismo; el poder Ejecutivo no podría ser vitalicio ni
hereditario; así mismo, el poder Judicial seria independiente: los jueces
inamovibles y de por vida; es por ello que se pide la individualización y la
conexión de los tres poderes.

Irónicamente, un día antes que esta Constitución fuera promulgada por el


presidente Tagle, el mismo Congreso dispuso la suspensión de los artículos que
fueran incompatibles con las facultades otorgadas al libertador Bolívar, que ya
se hallaba en camino de instaurar la dictadura. Por ello, en la práctica, mientras
duró la dictadura bolivariana, no estuvo en vigor ni un solo día.

Años después, fue restaurada el 11 de junio de 1827 por el Congreso reunido


tras la caída del régimen bolivariano o vitalicio. El vicepresidente de la
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República Manuel Salazar y Baquíjano, encargado del Poder Ejecutivo, mandó
a cumplirla el 16 de junio del mismo año. Rigió hasta el 18 de marzo de 1828,
siendo reemplazada por la Constitución de 1828.

Esta Constitución estableció:

 El sistema republicano de gobierno, quedando así relegada definitivamente


la posición monarquista, que defendiera anteriormente San Martín.
 La restricción del concepto de Patria a lo nacional al disponer que: «Son
peruanos, todos los hombres libres nacidos en el territorio del Perú» (Artículo
10, inciso 1).
 La división de los poderes del Estado en tres: Legislativo, Ejecutivo y
Judiciario (judicial).

 El Legislativo estaría representado por un Congreso, llamado


Congreso del Perú, de naturaleza bicameral, que sería el único que
tendría la iniciativa de dar leyes.
 Se establecía también un Senado, entidad administrativa de
supervigilancia, distinto del legislativo y del ejecutivo.
 El Ejecutivo estaría en manos de un Presidente de la República,
que debía contar con tres ministros: uno de Gobierno y de
Relaciones Exteriores, otro Guerra y Marina, y otro de Hacienda.
 El poder Judiciario la conformarían los tribunales de Justicia y
juzgados subalternos, a la cabeza de los cuales estaría la Suprema
Corte de Justicia con sede en Lima.

 La inclusión de todas las garantías constitucionales, menos la libertad


religiosa (salvo el culto privado):

 La libertad civil.
 La seguridad personal y la del domicilio.
 La igualdad ante la ley para el premio o el castigo.
 La buena opinión o fama del individuo, mientras no se le declare
delincuente conforme a las leyes.
 El derecho de propiedad.

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 El secreto de las cartas.
 La libertad de imprenta.
 La libertad de la agricultura, industria, comercio y minería.
 El derecho individual de presentar peticiones o recursos al
Congreso o al gobierno.

 La elección de los gobiernos municipales, por obra de los colegios electorales


de parroquia.
 El principio de que nadie nace esclavo en el Perú, ni puede entrar en esa
condición, suprimiéndose el tráfico de negros.
 La abolición de los empleos y privilegios hereditarios.
 La abolición del tormento.
 La abolición de las confiscaciones de bienes y toda pena cruel y de infamia
trascendental.
 El reconocimiento de la instrucción como una necesidad común que la
República debía a todos los ciudadanos, debiendo fundarse universidades
en las capitales de departamentos y escuelas de instrucción primaria en
localidades más pequeñas.
 La división de la fuerza armada en ejército de línea, milicia cívica y guardia
de policía.

Total de Artículos: 194.

La debilidad en esta constitución fue el papel secundario dado el Poder Ejecutivo,


en un momento de creciente anarquía política.

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CAPÍTULO III:

TENDENCIAS FILOSÓFICAS EN LA
CONSTITUCIÓN PERUANA DE 1823

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III. TENDENCIAS FILOSÓFICAS:

Ya desde antes de la creación de la primera constitución peruana, existía dentro


del seno de la sociedad patriótica una fuerte oposición a las ideas políticas de
San Martín, por parte de los liberales cuyo líder era José Faustino Sánchez
Carrión (“El Solitario de Sayan”) cuyo órgano periodístico era la “abeja
republicana”. Por lo que deducimos que a partir de él, las ideas liberales ganaron
más espacio y acogida en la vida política del país. Tanto así que llega a repercutir
en la línea filosófica de la llamada Constitución de 1823.

Una vez conformado el primer Congreso del Perú, dio su primer paso en la labor
de la Constituyente con la elaboración de las «Bases de la Constitución Política»,
a manos de una comisión del Congreso, integrada por los diputados Justo
Figueroa, Francisco Xavier de Luna Pizarro, José Joaquín de Olmedo y Manuel
Pérez de Tudela e Hipólito Unanue.

Estas “bases” fueron promulgadas por la Junta Gubernativa el 17 de


diciembre de 1822; constaban de 24 artículos, que a grandes rasgos, declaraban
que todas las provincias del Perú, reunidas en un solo cuerpo, formaban la
nación peruana, que a partir de entonces se denominaría «República Peruana»;
asimismo, establecía que la soberanía residía en la Nación, siendo
independiente de la monarquía española y de cualquier otro tipo de dominación
extranjera; su religión sería la católica, con exclusión de cualquier otra; y en
cuanto al Poder Nacional, estaría dividido en tres poderes, el Legislativo, el
Ejecutivo y el Judicial.

En base al análisis de la Constitución de 1823, podemos decir que se trata de


una constitución de inspiración liberal, basaba en la soberanía popular: “La
soberanía reside esencialmente en la nación, y su ejercicio en los magistrados,
a quienes ella ha delegado sus poderes.” (Artículo 3).

No obstante, es necesario entender a que nos referimos con tendencia liberal.

El liberalismo es un cúmulo de ideas y no una ideología cerrada y excluyente


que se enseña como una verdad.

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El liberalismo, ya puestos a la tarea de su asedio, es un conjunto de creencias
básicas, de valores y de actitudes organizadas en torno a la convicción de que a
mayores cuotas de libertad individual se corresponden mayores índices de
prosperidad y felicidad colectivas. De ahí la mayor virtud del liberalismo: ninguna
novedad científica lo puede contradecir porque no establece verdades
inmutables. Ningún fenómeno lo puede desterrar del campo de las ideas
políticas, porque siempre será válida una gran porción de lo que el liberalismo
ha defendido a lo largo de la historia.

Se basa en cuatro simples premisas básicas:

Los liberales creen que el Estado ha sido concebido para servir de soporte al
accionar del individuo y no a la inversa. Valoran el ejercicio de la libertad
individual como algo intrínsecamente bueno y necesario, y como una condición
insustituible para alcanzar los mayores niveles de progreso en una sociedad.
Entre esas libertades están las consagradas en la Declaración Universal de
Derechos del Hombre. En particular, la libertad de poseer bienes (el derecho a
la propiedad privada) resulta fundamental, puesto que sin ella el individuo estaría
perpetuamente a merced del Estado. Por supuesto, los liberales también creen
en la responsabilidad individual y en la solidaridad.

La Constitución Política de la República Peruana era de tendencia liberal,


inspirada en la democracia individual y el liberalismo. Pues reconocía el derecho
del Pueblo a la interrupción contra los gobernantes despóticos, al declarar que
la nación no tiene facultad para decretar leyes que atenten a los derechos
individuales, además de establecer la responsabilidad del gobernante por los
actos de su administración.

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CAPÍTULO IV:

ESTRUCTURA CONSTITUCIONAL

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IV. ESTRUCTURA CONSTITUCIONAL:

Esta carta política constaba de 194 artículos, divididos en tres secciones, con
sus correspondientes capítulos. La primera sección trataba sobre la nación, el
territorio, la religión y la ciudadanía; la segunda, sobre la forma de gobierno y los
poderes que lo integraban; y la tercera, sobre los medios de conservar el
gobierno.

 Sección Primera: De la Nación:


 Capítulo I: La nación peruana.
 Capítulo II: Territorio.
 Capítulo III: Religión.
 Capítulo IV: Estado político de los peruanos.
 Sección Segunda: Del Gobierno.
 Capítulo I: Su forma.
 Capítulo II: Poder Electoral
 Capítulo III: Poder Legislativo.
 Capítulo IV: Formación y promulgación de las leyes.
 Capítulo V: Poder Ejecutivo.
 Capítulo VI: Ministros de Estado.
 Capítulo VII: Senado conservador.
 Capítulo VIII: Poder Judiciario.
 Capítulo IX: Régimen interior de la República.
 Capítulo X: Poder Municipal.
 Sección Tercera: De los medios de conservar el gobierno.
 Capítulo I: Hacienda pública.
 Capítulo II: Fuerza Armada.
 Capítulo III: Educación pública.
 Capítulo IV: Observancia de la Constitución.
 Capítulo V: Garantías Constitucionales.

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4.1 PARTE DOGMÁTICA:

Esta es la parte de la constitución que hace mención a los derechos,


obligaciones, garantías, etc., de la persona y de los grupos sociales adscritos al
Estado. Se dice que es Dogmática porque los derechos incluidos en sus
declaraciones son de validez universal. En esta constitución la encontramos en:

CAPITULO V

Garantías Constitucionales.

Art. 193. Sin embargo de estar consignados los derechos sociales é individuales
de los peruanos en la organización de esta ley fundamental se declaran
inviolables:

1° La libertad civil.

2° La seguridad personal y la del domicilio.

3° La propiedad.

4° El secreto de las cartas.

5° El derecho individual de presentar peticiones o recursos al Congreso o al


gobierno.

6° La buena opinión, o fama del individuo, mientras no se le declare delincuente


conforme a las leyes.

7° La libertad de imprenta en conformidad de la ley que la arregle.

8° La libertad de la agricultura, industria, comercio, y minería, conforme a las


leyes.

9° La igualdad ante la ley, ya premie, ya castigue.

Art. 194. Todos los peruanos pueden reclamar el uso y ejercicio de estos
derechos, y es un deber de las autoridades respetarlos, y hacerlos guardar

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religiosamente por todos los medios que estén en la esfera de las atribuciones
de cada una de ellas.

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4.2 PARTE ORGÁNICA:

En esta sección se consagran los lineamientos esenciales, las normas que


defienden el Estado, su sistema de gobierno, su régimen político, su división
territorial, las referentes a la población, nacionalidad, ciudadanía, las que
determinan la titularidad del poder público, su distribución en ramas u órganos,
los procedimientos para la designación de los gobernantes y sus atribuciones,
las reglas sobre el ejercicio del poder, los controles y limitaciones a que están
sometidos los gobernantes, los términos de su mandato y, en general, las
condiciones en las cuales deben organizarse el Estado y ejercer el poder
soberano. En esta constitución la encontramos en:

SECCION PRIMERA

DE LA NACION.

CAPÍTULO I.

De la Nación Peruana.

Art. 1. Todas las provincias del Perú, reunidas en un solo cuerpo forman la nación
peruana.

Art. 2. Esta es independiente de la monarquía española, y de toda dominación


extranjera; y no puede ser patrimonio de ninguna persona ni familia.

Art. 3. La soberanía reside esencialmente en la nación, y su ejercicio en los


magistrados, a quienes ella ha delegado sus poderes.

Art. 4. Si la nación no conserva o protege los derechos legítimos de todos los


individuos que la componen, ataca el pacto social: así como se extrae de la
salvaguardia de este pacto cualquiera que viole alguna de las leyes
fundamentales.

Art. 5. La nación no tiene facultad para decretar leyes que atenten a los derechos
individuales.

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CAPITULO II.

Territorio.

Art. 6. El Congreso fijará los límites de la República, de inteligencia con los


Estados limítrofes, verificada la total independencia del alto y bajo Perú.

Art. 7. Se divide el territorio en departamentos, los departamentos en provincias,


las provincias en distritos, y los distritos en parroquias.

CAPITULO III.

Religión.

Art. 8. La religión de la República es la católica, apostólica, romana, con


exclusión del ejercicio de cualquier otra.

Art. 9. Es un deber de la nación protegerla constantemente, por todos los medios


conformes al espíritu del Evangelio, y de cualquier habitante del Estado
respetarla inviolablemente.

CAPITULO IV.

Estado Político de los Peruanos.

Art. 10. Son peruanos:

1° Todos los hombres libres nacidos en el territorio del Perú.

2° Los hijos de padre o madre peruanos, aunque hayan nacido fuera del territorio,
luego que manifiesten legalmente su voluntad de domiciliarse en el país.

3° Los naturalizados en él, o por carta de naturaleza, o por la vecindad de cinco


años, ganada según ley, en cualquiera lugar de la República.

Art. 11. Nadie nace esclavo en el Perú, ni de nuevo puede entrar en él alguno
de esta condición. Queda abolido el comercio de negros.

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Art. 12. El peruano que fuere convencido de este tráfico, pierde los derechos de
naturaleza.

Art. 13. El extranjero que se ocupare en él, no puede naturalizarse en el Perú.

Art. 14. Los oficios prescritos por la justicia natural, son obligaciones que muy
particularmente debe llenar todo Peruano, haciéndose indigno de este nombre
el que no sea religioso, el que no ame a la Patria, el que no sea justo o benéfico,
el que falte al decoro nacional, el que no cumpla con lo que se debe a sí mismo.

Art. 15. La fidelidad a la Constitución, la observancia de las leyes, y el respeto a


las autoridades comprometen de tal manera la responsabilidad de todo Peruano,
que cualquiera violación en estos respectos lo hacen delincuente.

Art. 16. La defensa y sostén de la República, sea por medio de las armas, sea
por el de las contribuciones, obligan a todo peruano en conformidad de sus
fuerzas y de sus bienes.

Art. 17. Para ser ciudadano es necesario:

1° Ser peruano.

2° Ser casado, o mayor de veinticinco años.

3° Saber leer y escribir, cuya calidad no se exigirá hasta después del año de
1840.

4° Tener una propiedad, o ejercer cualquiera profesión, o arte con título público,
u ocuparse en alguna industria útil, sin sujeción a otro en clase de sirviente o
jornalero.

Art. 18. Es también ciudadano el extranjero que obtuviere carta de ciudadanía.

Art. 19. Para obtenerla, además de reunir las calidades del artículo 17, deberá
haber traído, fijado o enseñado en el país alguna invención, industria, ciencia o
arte útil, o adquirido bienes raíces que le obliguen a contribuir directamente; o
establecidos en el comercio, en la agricultura, o minería, con un capital

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considerable; o hecho finalmente servicios distinguidos en pro y defensa de la
nación: todo a juicio del Congreso.

Art. 20. Son igualmente ciudadanos los extranjeros casados que tengan diez
años de vecindad en cualquier lugar de la República, y los solteros de mas de
quince, aunque unos y otros no hayan obtenido carta de ciudadanía, con tal que
sean fieles a la causa de la Independencia, y reúnan las condiciones del artículo
17.

Art. 21. Se moderarán estas reglas en orden a los naturales de las demás
secciones independientes de América, según sus convenciones recíprocas con
la República.

Art. 22. Solo la ciudadanía abre la puerta a los empleos, cargos o destinos de la
República, y da el derecho de elección en los casos prefijados por la ley. Esta
disposición no obsta para que los peruanos que aún no hayan comenzado a
ejercer la ciudadanía, puedan ser admitidos a los empleos, que por otra parte no
exijan edad legal.

Art. 23. Todos los ciudadanos son iguales ante la ley, ya premie, ya castigue.
Quedan abolidos los empleos y privilegios hereditarios.

Art. 24. El ejercicio de la ciudadanía se suspende únicamente:

1° En los que por ineptitud física o moral no puedan obrar libremente.

2° Por la condición de sirviente doméstico.

3° Por la tacha de deudor quebrado, o deudor moroso al Tesoro público.

4° Por no tener empleo, oficio o modo de vivir conocido.

5° En los procesados criminalmente.

6° En los casados que sin causa abandonen a sus mujeres, o que notoriamente
falten a las obligaciones de familia.

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7º En los jugadores, ebrios, truanes, y demás que con su vida escandalosa
ofendan la moral pública.

8° Por comerciar sufragios en las elecciones.

Art. 25. Se pierde el derecho de ciudadanía únicamente:

1° Por naturalizarse en tierra de gobierno extranjero.

2° Por imposición de pena aflictiva o infamante, si no se alcanza rehabilitación:


la que no tendrá lugar en los traidores a la Patria, sin pruebas muy
circunstanciadas a juicio del Congreso.

Art. 26. Las condiciones que indica este capítulo, calificadas legalmente se
tendrán en consideración al arreglar el censo constitucional cada quinquenio, del
que se formará el registro cívico de toda la República.

SECCION SEGUNDA

DEL GOBIERNO.

CAPITULO PRIMERO

Su forma.

Art. 27. El gobierno del Perú es popular representativo.

Art. 28. Consiste su ejercicio en la administración de los tres poderes: legislativo,


ejecutivo y judiciario, en que quedan divididas las principales funciones del poder
nacional.

Art. 29. Ninguno de los tres poderes podrá ejercer jamás ninguna de las
atribuciones de los otros dos.

CAPITULO II.

Poder Electoral.

26
Art. 30. Tocando a la nación hacer sus leyes por medio de sus representantes
en Congreso, todos los ciudadanos deben concurrir a la elección de ellos, en el
modo que reglamenta la ley de elecciones, conforme a los principios que aquí se
establecen. Esta es la única función del poder nacional que se puede ejercitar
sin delegarla.

Art. 31. La elección de diputados se hará por medio de colegios electorales de


parroquia, y de provincia, señalándose para la reunión de los primeros el primer
domingo de Mayo, y para la de los segundos el primer domingo de Junio, a fin
de que en Setiembre puedan reunirse todos los diputados en la capital de la
República.

Art. 32. Constituyen los colegios electorales de parroquia todos los vecinos
residentes en ella que estuviesen en ejercicio de la ciudadanía, presididos por el
alcalde o regidor que se designare, y asistencia del secretario y escrutadores
que nombrará el colegio de entre los concurrentes.

Art. 33. Por cada doscientos individuos se nombrará un elector, cualquiera que
sea el censo parroquial.

Art. 34. Para ser elector parroquial se exige:

1° Ser ciudadano en ejercicio.

2° Ser vecino y residente en la parroquia.

3° Tener una propiedad que produzca trescientos pesos cuando menos, o


ejercer cualquiera arte, u oficio, o estar ocupado en alguna industria útil que los
rinda anualmente, o ser profesor público de alguna ciencia.

Art. 35. Los colegios electorales de parroquia remitirán cerradas y selladas a la


Municipalidad de la capital de la provincia las actas de sus elecciones, a fin de
que constatada la identidad de los elegidos, puedan tener lugar los actos
subsecuentes.

27
Art. 36. Forman los colegios electorales de provincia todos los electores de
parroquia reunidos en su capital, presididos por un ciudadano nombrado por ellos
mismos, y asistencia del secretario y escrutadores que se elegirán de su seno.

Art. 37. Reunido el colegio procederá a elegir en sesión pública permanente los
representantes o diputados que correspondan a la provincia.

Art. 38. Elegirá asimismo un suplente por cada tres diputados propietarios. Y si
no correspondiere a la provincia más que uno solo de estos, elegirá sin embargo
un suplente.

Art. 39. Los colegios electorales de provincia remitirán cerradas y selladas al


Senado conservador las actas de sus elecciones, para el fin indicado en el
artículo 34.

Art. 40. El cargo de elector cesa verificadas las elecciones, pero si en el intervalo
de una legislatura a su renovación, ocurriere motivo de elecciones, se reunirán
los mismos electores.

Art. 41 Mientras se aumenta considerablemente la población, se declara por


base representativa para cada diputado, la de doce mil almas.

Art. 42. La provincia que no tuviere este número, pero que pase de la mitad,
elegirá sin embargo un diputado. Y la que tuviere esta sobre los doce mil, elegirá
dos diputados, y así progresivamente.

Art. 43. Para el grave encargo de representante es necesario:

1° Ser ciudadano en ejercicio.

2° Ser mayor de 25 años.

3° Tener una propiedad o renta de ochocientos pesos cuando menos, o ejercer


cualquiera industria que los rinda anualmente, o ser profesor público de alguna
ciencia.

28
4° Haber nacido en la provincia, o estar avecindado en ella diez años antes de
su elección, pudiendo recaer esta en individuos del colegio electoral.

Art. 44. Verificada la elección, otorgará cada colegio electoral de provincia a sus
representantes, los correspondientes poderes, con arreglo a la fórmula que
prescriba la ley reglamentaria de elecciones.

Art. 45. Tanto para ser elector como para ser diputado, es indispensable la
pluralidad absoluta de sufragios.

Art. 46. Los sufragios serán secretos, registrándose después su resultado en los
libros correspondientes, para depositarlos en el archivo público de elecciones,
que se conservará en la capital de la provincia.

Art. 47. Toda duda en punto de elecciones, se decidirá por el presidente,


escrutadores y secretarios de cada colegio electoral, sin necesidad de otro
recurso para este solo efecto.

Art. 48. El cargo de elector es inexcusable: lo es también el de diputado, excepto


el caso de ser reelegido antes de los cuatro años de haber cesado.

Art. 49. La subsistencia de los diputados durante su comisión es de cuenta de


su respectiva provincia, conforme a la tasa permanente que se designare por ley.

Art. 50. Al día siguiente de la elección de diputados procederán los mismos


colegios electorales de provincia a la de senadores; y al siguiente de esta
elección, a la de diputados departamentales, observando en todo las mismas
formalidades que para el nombramiento de diputados á Congreso.

29
CAPITULO III.

Poder Legislativo.

Art. 51. El Congreso del Perú en quien reside exclusivamente el ejercicio del
Poder Legislativo, se compone de todos los representantes de la nación,
elegidos por las provincias.

Art. 52. Todo diputado antes de instalarse el Congreso para ejercer su cargo
prestará juramento ante el Presidente del Senado en la forma siguiente:

¿Juráis a Dios defender la religión católica, apostólica, romana, sin admitir el


ejercicio de otra alguna en la República? – Sí, juro. – ¿Juráis guardar y hacer
guardar la Constitución política de la República peruana, sancionada por el
Congreso Constituyente?– Sí, juro. – ¿Juráis haberos bien y fielmente en el
cargo que la nación os ha hecho, mirando en todo por el procomunal de la misma
nación? – Sí, juro. – Si así lo hiciereis, Dios os premie, y si no, os lo demande.

Art. 53. El Congreso se reunirá cada año el 20 de Setiembre, permaneciendo en


sus sesiones tres meses consecutivos, y podrá continuarlas por otro mes en caso
necesario, con tal que lo resuelvan los dos tercios de los diputados existentes.

Art. 54. Se abrirán indispensablemente las sesiones el 21 del mismo mes con
asistencia del poder ejecutivo, sin que la falta de este por cualquier impedimento
pueda diferirla.

Art. 55. Se renovará el Congreso por mitad cada dos años; de modo que cada
cuatro lo sea totalmente, designando en la primera vez la suerte los diputados
que cesaren.

Art. 56. El reglamento actual, sin perjuicio de las reformas que en él se hicieren,
fijará la economía interior del Congreso, y todas las formalidades convenientes.

Art. 57. Los diputados son inviolables por sus opiniones, y jamás podrán ser
reconvenidos ante la ley por las que hubieren manifestado en el tiempo del
desempeño de su comisión.

30
Art. 58. Ningún diputado durante su diputación, podrá obtener para sí, ni
pretender para otro, empleo, pensión, o condecoración alguna, si no es ascenso
de escala en su carrera.

Art. 59. En las acusaciones criminales contra los diputados no entenderá otro
juzgado ni tribunal que el Congreso, conforme a su reglamento interior; y
mientras permanezcan las sesiones del Congreso, no podrán ser demandados
civilmente, ni ejecutados por deudas.

Art. 60. Son facultades exclusivas del Congreso:

1° Decretar y sancionar las leyes, interpretarlas, modificarlas, o derogarlas.

2° Conceder indultos generales o particulares.

3° Aprobar los reglamentos de cualesquiera cuerpos, o establecimientos


nacionales.

4° Crear milicias nacionales, y aumentar y reducir las fuerzas de línea.

5° Decretar el aumento o disminución de las fuerzas navales.

6° Decretar la guerra con presencia de las instrucciones del poder ejecutivo, y


requerir a este para que negocie la paz.

7° Aprobar los tratados de paz, y demás convenios procedentes de las relaciones


exteriores en todos respectos.

8° Establecer los medios de pagar la deuda pública al paso que vaya


liquidándose.

9° Decretar las contribuciones, impuestos y derechos para el sostén y defensa


de la República.

10° Aprobar la repartición de las contribuciones entre los departamentos y


provincias.

31
11° Arreglar anualmente la tarifa de los gastos públicos en vista de los datos que
suministre el poder ejecutivo.

12° Abrir empréstitos en caso necesario, dentro o fuera de la República,


pudiendo empeñar el crédito nacional.

13° Examinar y aprobar la inversión de los caudales públicos.

14° Determinar la moneda en todos sus respectos, fijar y uniformar los pesos y
medidas.

15° Crear o suprimir empleos públicos, y asignarles la correspondiente dotación.

16° Conceder cartas de naturaleza y ciudadanía.

17° Conceder títulos de villa, o de ciudad a los lugares.

18° Arreglar la demarcación interior del territorio para su mejor administración, y


fundar nuevas poblaciones, previo el informe del poder ejecutivo.

19° Conceder premios a los beneméritos de la patria, y decretar honores a su


memoria.

20° Conceder privilegios temporales a los autores de alguna invención útil a la


República.

21° Instituir fiestas nacionales para mantener la unión cívica, avivar el


patriotismo, y perpetuar la memoria de los sucesos más célebres de la
Independencia Nacional.

22° Decretar todo lo necesario para la instrucción pública por medio de planes
fijos, e instituciones convenientes a la conservación y progreso de la fuerza
intelectual y estímulo de los que se dedicaren a la carrera de las letras.

23° Crear establecimientos de caridad y beneficencia.

24° Elegir el presidente y vice-presidente de la República de entre los individuos


que le proponga el Senado.

32
25° Designar por escrutinio los senadores de cada departamento de entre los
elegidos por las provincias, cuidando de que no salgan dos de una misma
provincia.

26° Nombrar cada bienio los individuos de la junta conservadora de la libertad


de imprenta.

27° Proteger la libertad de imprenta de modo que jamás pueda suspenderse su


ejercicio, ni mucho menos abolirse.

28° Prestar o negar su consentimiento para el ingreso de tropas extranjeras, y


estación de escuadras en el territorio y puertos de la República; y en caso de
otorgarlo, prescribir al mismo tiempo las precauciones con que deban admitirse.

29° Prestar o negar igualmente su consentimiento para la salida de tropas


nacionales fuera del territorio de la República.

30° Gozar del derecho de policía en la casa de sus sesiones, y fuera de ella en
todo lo conducente al libre ejercicio de sus atribuciones, y a la respetabilidad de
sus miembros; y hacer castigar con las penas establecidas a todo el que le faltare
el debido respeto, o que amenazase atentar contra el cuerpo, o contra la
inmunidad de sus individuos, o que de cualquier otro modo desobedeciere o
embarazare sus órdenes y deliberaciones.

31º Trasladarse a otro lugar cuando lo exijan graves circunstancias, siempre que
lo resuelvan los dos tercios de los diputados existentes.

CAPITULO IV.

Formación y promulgación de las leyes.

Art. 61. Solo a los representantes en Congreso compete la iniciativa de las leyes.

33
Art. 62. El reglamento de debates determinará la forma, intervalos, y modo de
proceder en la discusión de las proposiciones que se presentaren por los
diputados.

Art. 63. Los proyectos de ley suficientemente discutidos, pasarán al poder


ejecutivo, quien con las observaciones oportunas, los remitirá al Senado en el
preciso término de tres días.

Art. 64. El Senado deliberará sobre ellos consultivamente, y dentro de tercero


día los devolverá al Congreso, el que después de nueva discusión, les dará o no
fuerza de ley.

Art. 65. Si pasado el término que prefijan los dos artículos anteriores, no se
hubiese devuelto el proyecto al Congreso, procederá este a la segunda
discusión, y en su consecuencia le dará o no fuerza de ley.

Art. 66. Todo proyecto de ley admitido según el reglamento de debates, se


imprimirá antes de su discusión, la que tendrá lugar luego que el impreso hubiere
circulado.

Art. 67. Desechado un proyecto de ley conforme al reglamento, no podrá


presentarse hasta la legislatura del año siguiente.

Art. 68. El poder ejecutivo hará ejecutar, guardar y cumplir todas las leyes y
decretos bajo esta fórmula: –"El ciudadano presidente de la República, por la
Constitución peruana.- Por cuanto el Congreso ha sancionado lo siguiente: (Aquí
el texto) Por tanto ejecútese, guárdese y cúmplase".

Art. 69. El Congreso para promulgar sus leyes o decretos usará la fórmula
siguiente: "El Congreso de la República peruana decreta y sanciona lo siguiente:
(Aquí el texto).- Comuníquese, mandándole imprimir, publicar y circular".

Art. 70. Para derogar o modificar una ley se observarán las mismas formalidades
que para sancionarlas.

34
Art. 71. Para la votación de un proyecto de ley, y su sanción, es indispensable
la pluralidad absoluta de los diputados presentes, que no deberán ser menos de
los dos tercios de la totalidad de ellos.

CAPITULO V

Poder Ejecutivo.

Art. 72. Reside exclusivamente el ejercicio del poder ejecutivo en un ciudadano


con la denominación de Presidente de la República.

Art. 73. Todos los actos de su administración serán suscritos por el ministro de
estado en el despacho respectivo. El que careciere de esta circunstancia se
reputará como no dimanado de este poder.

Art. 74. El ejercicio del poder ejecutivo nunca puede ser vitalicio, y mucho menos
hereditario. Dura el oficio de presidente cuatro años, y no podrá recaer en el
mismo individuo, sino pasados otros cuatro.

Art. 75. Para ser presidente se requiere:

1° Ser ciudadano del Perú por nacimiento.

2° Reunir las mismas calidades que para ser diputado. Supone además esta
magistratura la aptitud de dirigir vigorosa, prudente y liberalmente una República.

Art. 76. Habrá un vice-presidente en quien concurran las mismas calidades.


Administrará el poder ejecutivo por muerte, renuncia, destitución del presidente,
o cuando llegare el caso de mandar personalmente la fuerza armada.

Art. 77. En defecto del vice-presidente administrará el poder ejecutivo el


presidente del Senado hasta la elección ordinaria de nuevo presidente.

Art. 78. El presidente es responsable de los actos de su administración.

35
Art. 79. El presidente es jefe de la administración general de la República, y su
autoridad se extiende tanto a la conservación del orden público en lo interior,
como á la seguridad exterior conforme a la Constitución y a las leyes.

Art. 80. Además son facultades exclusivas del presidente:

1° Promulgar, mandar ejecutar, guardar, y cumplir las leyes, decretos y


resoluciones del Congreso, y expedir las providencias indispensablemente
necesarias para su efecto.

2° Tiene el mando supremo de la fuerza armada.

3° Ordenar lo conveniente para que se verifiquen las elecciones populares en los


días señalados por la Constitución.

4° Declarar la guerra a consecuencia de la resolución del Congreso.

5° Entrar en tratados de paz y de alianza, y otros convenios procedentes de


relaciones extranjeras con arreglo a la Constitución.

6° Decretar la inversión de los caudales destinados por el Congreso a los


diversos ramos de la administración pública.

7° Nombrar los oficiales del ejército y armada, y de coronel inclusive para arriba,
con acuerdo y consentimiento del Senado.

8° Nombrar por si los ministros de Estado; y los agentes diplomáticos de acuerdo


con el Senado.

9° Velar sobre la exacta administración de Justicia en los tribunales y juzgados


y sobre el cumplimiento de las sentencias que estos pronunciaren.

10° Dar cuenta al Congreso en cada legislatura de la situación política y militar


de la República, indicando las mejoras o reformas convenientes en cada ramo.

Art. 81. Limitaciones del poder ejecutivo:

36
1° No puede mandar personalmente la fuerza armada sin consentimiento del
Congreso, y en su receso sin el del Senado.

2° No puede salir del territorio de la República sin permiso del Congreso.

3° Bajo ningún pretexto puede conocer en asunto alguno judicial.

4° No puede privar de la libertad personal a ningún peruano; y en caso de que


fundadamente exija la seguridad pública el arresto o detención de alguna
persona, podrá ordenar lo oportuno, con la indispensable condición de que
dentro de veinticuatro horas pondrá al detenido a disposición de su respectivo
Juez.

5° Tampoco puede imponer pena alguna. El ministro que firmare la orden, y el


funcionario que la ejecutare, atentan contra la libertad individual.

6° No puede diferir ni suspender en ninguna circunstancia las sesiones del


Congreso.

CAPITULO VI

Ministros de Estado.

Art. 82. Habrá tres ministros de Estado; uno de Gobierno y Relaciones


Exteriores, otro de Guerra y Marina, y otro de Hacienda.

Art. 83. El régimen interior de los ministerios depende del reglamento que hiciere
el Congreso.

Art. 84. Son responsables in solidum los ministros por las resoluciones tomadas
en común, y cada uno en particular por los actos peculiares a su departamento.

Art. 85. Los ministros son el órgano del gobierno en los departamentos de su
dependencia, debiendo firmar las órdenes que emanen de este poder.

37
Art. 86. Para ser ministro se requieren las mismas calidades que se exigen en la
persona que administra el poder ejecutivo.

CAPITULO VII

Senado conservador.

Art. 87. Se compone de tres senadores por cada departamento elegidos por las
provincias, y designados conforme a la facultad 25 del capítulo 3.

Art. 88. Cada provincia elegirá dos senadores propietarios, y un suplente, y


remitirá las actas de su elección al Congreso.

Art. 89. El cargo de senador durará doce años, distribuyéndose su número por
lo que hace a su renovación por cada departamento en tres órdenes.

Los de la primera cesarán al fin del cuarto año: los de la segunda al del octavo,
y los de la tercera al duodécimo; de suerte que cada doce años se renueve la
totalidad del Senado, saliendo por suerte en los dos primeros cuatrienios los que
deben cesar.

Art. 90. Las atribuciones del Senado son:

1° Velar sobre la observancia de la Constitución y de las leyes, y sobre la


conducta de los magistrados y ciudadanos.

2° Elegir y presentar al poder ejecutivo los empleados de la lista civil de la


República, y elegir los de la eclesiástica que deban nombrarse por la nación.

3° Convocar a Congreso extraordinario, si fuere necesario, declarar la guerra o


hacer tratados de paz, o en otras circunstancias de igual gravedad, o cuando
para ello lo excitare el poder ejecutivo.

4° Convocar a Congreso ordinario, cuando no lo hiciere el poder ejecutivo en el


tiempo prescrito por la Constitución.

38
5° Decretar, tanto en los casos ordinarios como en los extraordinarios, que ha
lugar a formación de causa contra el magistrado que ejerciere el poder ejecutivo,
sus ministros, y el Supremo Tribunal de Justicia.

6° Prestar su voto consultivo al poder ejecutivo en los negocios graves de


gobierno, y señaladamente en los que respectan al interés particular de los
departamentos, y en los de paz y guerra.

7° Abrir empréstitos dentro de la República en caso necesario.

8° Resolver en conformidad del artículo 63.

9° Examinar las bulas, decretos y breves pontificios para darles el pase, o


decretar su detención.

10° Velar sobre la conservación y mejor arreglo de las reducciones de los Andes;
y promover la civilización y conversión de los infieles de su territorio, conforme al
espíritu del Evangelio.

11º Hacer su respectivo reglamento, y presentarlo para su aprobación al


Congreso.

Art. 91. El Senado no puede procesar ni por acusación, ni de oficio, si solo poner
en conocimiento del Supremo Tribunal de Justicia cualquiera ocurrencia relativa
a la conducta de los magistrados, sin perjuicio de la atribución 5ª de este
capítulo.

Art. 92. Para ser senador se requiere:

1° Cuarenta años de edad

2° Ser ciudadano en ejercicio.

3° Haber nacido en la provincia o departamento que le elige, o estar avecindado


en él diez años antes de su elección.

39
4° Tener una propiedad que exceda el valor de diez mil pesos en bienes raíces,
o el goce o renta de dos mil pesos anuales, o el ser profesor público de alguna
ciencia.

5° Gozar del concepto de una probidad incorruptible, y ser de conocida


ilustración en algún ramo de pública utilidad.

Art. 93. De los senadores serán por ahora precisamente seis eclesiásticos y no
más.

Art. 94. La ley reglamentaria de elecciones determinará el modo de nombrarse


estos eclesiásticos.

CAPITULO VIII

Poder Judiciario.

Art. 95. Reside exclusivamente el ejercicio de este poder en los tribunales de


Justicia y juzgados subalternos en el orden que designen las leyes.

Art. 96. No se conocen otros jueces que los establecidos por la Constitución, ni
otra forma de juicios que la ordinaria que determinaren las leyes.

Art. 97. Los jueces son inamovibles, y de por vida, si su conducta no da motivo
para lo contrario conforme a la ley.

Art. 98. Habrá una Suprema Corte de Justicia que residirá en la capital de la
República, compuesta por un presidente, ocho vocales, y dos fiscales, divididos
en las salas convenientes.

Art. 99. Para ser individuo de la Suprema Corte de Justicia se requiere:

1° Ser de cuarenta años.

2° Ser ciudadano en ejercicio.

40
3° Haber sido individuo de alguna de las Cortes Superiores. Y mientras estas se
organizan, podrán serlo los abogados que hubiesen ejercido su profesión por
diez años con reputación notoria.

Art. 100. Corresponde a la Suprema Corte:

1° Dirimir todas las competencias que entre si tuvieren las Cortes Superiores, y
las de estas con los demás tribunales de la República.

2° Hacer efectiva la responsabilidad del magistrado que ejerciere el poder


ejecutivo, y de los ministros de Estado, cuando el Senado decretare haber lugar
a formación de causa.

3° Conocer de las causas criminales, de los ministros de Estado, y hacer efectiva


la responsabilidad de las Cortes Superiores.

4° Conocer de todas las causas criminales que se promovieren contra los


individuos de su seno. Y si fuere necesario hacer efectiva la responsabilidad de
toda ella, nombrará el Congreso un tribunal de nueve jueces, sacados por suerte
de un número doble que elegirá a pluralidad absoluta.

5° Conocer en tercera instancia de la residencia de todo empleado público que


esté sujeto a ello por disposición de las leyes.

6° Conocer de los recursos de nulidad que se interpongan contra las sentencias


dadas en última instancia por las Cortes Superiores, para el efecto de reponer y
devolver.

7° Oír dudas de los demás tribunales y juzgados sobre la inteligencia de alguna


ley, y consultar sobre ella fundadamente al poder legislativo.

8° Conocer de las causas concernientes a los negocios diplomáticos y de los


contenciosos entre los ministros, cónsules, o agentes diplomáticos.

Art. 101. Habrá en los departamentos de Lima, Trujillo, Cuzco, Arequipa, y


demás que conviniese, Cortes Superiores de Justicia compuestas de los vocales
y fiscales necesarios.

41
Art. 102. Son atribuciones de las Cortes Superiores:

1° Conocer en segunda y tercera instancia de todas las causas civiles del fuero
común, hacienda pública, comercio, minería, presas y comisos.

2° Conocer de las causas criminales, mientras se pone en observancia el juicio


de jurados.

3° Decidir las competencias suscitadas entre los tribunales y juzgados


subalternos.

4° Conocer de los recursos de fuerza en su respectivo departamento.

Art. 103. Para ser individuo de las Cortes Superiores es necesario:

1° Tener treinta y cinco años de edad.

2° Ser ciudadano en ejercicio.

3° Haber sido juez de derecho, o ejercido otro empleo o destino equivalente.

Art. 104. Habrá jueces de derecho con sus juzgados respectivos en todas las
provincias, arreglándose su número en cada una de ellas, según lo exija la pronta
administración de justicia.

Art. 105. Para ser juez de derecho se requiere:

1° Treinta años de edad.

2° Ser ciudadano en ejercicio.

3° Ser abogado recibido en cualquier tribunal de la República.

4° Haber ejercido la profesión cuando menos por seis años con reputación
notoria.

Art. 106. Los códigos civil y criminal prefijarán las formas judiciales. Ninguna
autoridad podrá abreviarlas, ni suspenderlas en caso alguno.

42
Art. 107. En las causas criminales el juzgamiento será público, el hecho
conocido y declarado por jurados, y la ley aplicada por los jueces.

Art. 108. El nombramiento de jurados, su clase, atribuciones y modo de


proceder, se designará por un reglamento particular. Entre tanto, continuarán los
juicios criminales en orden prevenido por las leyes.

Art. 109. Producen acción popular contra los jueces el soborno, la prevaricación,
el cohecho, la abreviación o suspensión de las formas judiciales, el
procedimiento ilegal contra la libertad personal y la seguridad del domicilio.

Art. 110. Se administrará justicia en nombre de la nación.

Art. 111. Los jueces de primera instancia son responsables personalmente de


su conducta ante las Cortes Superiores, y los individuos de estos ante la
Suprema Corte de Justicia.

Art. 112. Todas las causas civiles y criminales se fenecerán dentro del territorio
de cada Corte Superior.

Art. 113. No se conocen más que tres instancias en los juicios.

Art. 114. Queda abolido el recurso de injusticia notoria.

Art. 115. Queda abolida toda confiscación de bienes y toda pena cruel y de
infamia trascendental. El código criminal limitará, en cuanto sea posible, la
aplicación de la pena capital a los casos que exclusivamente la merezcan.

Art. 116. Ninguna pena infama a otro individuo, que al que la mereció por la
aplicación de la ley.

Art. 117. Dentro de 24 horas se le hará saber a todo individuo, la causa de su


arresto, y cualquiera omisión en este punto se declara atentatoria de la libertad
individual.

Art. 118. Nadie puede allanar la casa de ningún Peruano, y caso que lo exija
fundada é indispensablemente el orden público, se expedirá por el Poder

43
Ejecutivo la orden conveniente por escrito que remitirá desde luego al juez que
conozca de la causa, con la exposición de los datos que motivaron este
procedimiento para que obre en el proceso.

Art. 119. El agente que se excediere bien en la sustancia de la orden que indica
el artículo anterior, bien en el modo de cumplirla, injuria la autoridad y la ley, y
será castigado a proporción del abuso.

Art. 120. No podrá entablarse demanda alguna civil, sin haberse intentado la
conciliación ante el juez de paz.

Art. 121. Todas las leyes anteriores a esta Constitución, que no se opongan al
sistema de la independencia, y a los principios que aquí se establecen, quedan
en su vigor y fuerza hasta la organización de los códigos civil, criminal, militar y
de comercio.

CAPITULO IX

Régimen interior de la República.

Art. 122. El gobierno político superior de los departamentos reside en un


ciudadano denominado prefecto.

Art. 123. El gobierno político de cada provincia en un ciudadano que se


denominará intendente.

Art. 124. El de los distritos en un ciudadano que igualmente se nombrará en


cada uno de ellos con la denominación de gobernador.

Art. 125. Las atribuciones del prefecto, intendente y gobernador se reducirán a


mantener el orden y seguridad pública en sus respectivos territorios, con
subordinación gradual al Gobierno Supremo, y a cuidar de que los funcionarios
de su dependencia llenen exactamente sus obligaciones.

44
Art. 126. También les corresponde la intendencia económica sobre la Hacienda
pública.

Art. 127. Les está prohibido absolutamente todo conocimiento judicial, pero si la
tranquilidad pública exigiere fundadamente la aprehensión de algún individuo,
podrán ordenarla desde luego, poniendo al preso dentro de 24 horas a
disposición del juez y remitiéndole los antecedentes.

Art. 128. Esta disposición tendrá lugar, cuando el tiempo y las circunstancias no
permitieren de algún modo poner en noticia del juez la necesidad de la
aprehensión.

Art. 129. Cualquier exceso del prefecto, intendente, o gobernador en el ejercicio


de su empleo, relativo a la seguridad individual, o a la del domicilio, produce
acción popular.

Art. 130. La duración de los jefes que indica este capítulo será de cuatro años
improrrogables, pudiendo ser removidos antes si así lo exigiere su conducta,
según las leyes.

Art. 131. Para ser prefecto, intendente, o gobernador se requiere:

1° Ser ciudadano en ejercicio.

2° Tener treinta años de edad.

3° Probidad notoria.

Art. 132. En la capital de cada departamento habrá una junta departamental,


compuesta de un vocal por cada provincia elegido en la misma forma que los
diputados.

Art. 133. Esta junta es el consejo del prefecto, que la presidirá, y pedirá dictamen
en los negocios graves.

Art. 134. Se renovará cada dos años por mitad, designando en la primera vez la
suerte los vocales que cesaren.

45
Art. 135. Son atribuciones de esta junta:

1° Inspeccionar la conducta de las municipalidades e informar al Senado de lo


que hubieren hecho con arreglo a sus atribuciones en favor de los pueblos, y lo
que hubieren dejado de hacer.

2° Formar el censo estadístico de cada departamento, cada quinquenio, con


presencia de los datos que suministren las municipalidades, y remitirlo al
Senado.

3° Promover todos los ramos conducentes a la prosperidad del departamento, y


señaladamente la agricultura, industria, y minería.

4° Cuidar de la instrucción pública, y de los establecimientos piadosos y de


beneficencia.

5° Velar sobre la inversión de los fondos públicos, e intervenir en la repartición


de las contribuciones que se hicieren al departamento.

6° Proponer al Senado en terna los ciudadanos para el gobierno político de las


provincias y distritos del departamento.

7° Remitir anualmente al Senado lista de todas las personas beneméritas en el


departamento para los empleos públicos.

8° Informar anualmente al Senado sobre los medios y recursos oportunos para


la mayor prosperidad de las provincias, dando razón de lo que hubiere hecho
conforme a sus atribuciones, o lo que hubiere dejado de hacer.

9° Remitir al Senado la lista de tres ciudadanos elegibles para presidente de la


República.

Art. 136. Para ser vocal de esta junta se requieren las mismas calidades que
para diputado.

Art. 137. Se elegirá el mismo número de suplentes que de propietarios en cada


junta departamental.

46
CAPITULO X

Poder Municipal.

Art. 138. En todas las poblaciones, sea cual fuere su censo, habrá
municipalidades compuestas del alcalde o alcaldes, regidores, síndico o
síndicos, correspondientes; en la inteligencia de que nunca podrá haber menos
de dos regidores, ni más de diez y seis, dos alcaldes y dos síndicos.

Art. 139. La elección de estos individuos se hará por colegios electorales de


parroquia, renovándose la mitad cada año según el reglamento respectivo.

Art. 140. Las atribuciones del régimen municipal dependen:

1º De la policía de orden.

2º De la policía de instrucción primaria.

3º De la policía de beneficencia.

4º De la policía de salubridad y seguridad.

5º De la policía de comodidad, ornato y recreo.

Art. 141. Las municipalidades deben además:

1º Repartir las contribuciones o empréstitos que se hubieren señalado a su


territorio.

2º Formar los ordenamientos municipales del pueblo, y remitirlos al Congreso


para su aprobación por medio de la Junta departamental.

3° Promover la agricultura, industria, minería y cuanto produzca en razón de la


localidad al bien del pueblo.

4° Informar anualmente a la Junta departamental de lo que hubieren hecho en


conformidad de sus atribuciones, o de lo que hubieren dejado de hacer,
indicando los motivos.

47
Art. 142. Los alcaldes son los jueces de paz de su respectiva población. En las
poblaciones numerosas ejercerán también este oficio los regidores.

Art. 143. Conocerá los jueces de paz de las demandas verbales, civiles de
menor cuantía; y de las criminales sobre injurias leves, y delitos menores que
solo merezcan una moderada corrección.

Art. 144. Para ser alcalde, regidor o síndico, se requiere:

1° Ser ciudadano en ejercicio.

2° Tener veinticinco años de edad.

3° Ser natural del pueblo, o tener diez años de vecindad próximamente antes de
su elección.

4° Tener probidad notoria.

Art. 145. Ningún empleado de Hacienda puede ser admitido a los empleos
municipales.

Art. 146. Ningún ciudadano podrá excusarse de estas cargas.

Art. 147. Toda municipalidad tendrá un secretario y un tesorero elegidos a


pluralidad absoluta y con asignación deducida de los propios del común.

SECCION TERCERA

DE LOS MEDIOS DE CONSERVAR EL GOBIERNO.

CAPITULO PRIMERO

Hacienda Pública.

Art. 148. Constituyen la Hacienda pública todas las rentas y productos que
conforme a la Constitución y a las leyes deban corresponder al Estado.

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Art. 149. El presupuesto de los gastos públicos fijará las contribuciones
ordinarias, mientras se establece la única contribución. Adoptándose por regla
constante el acrecer la Hacienda por el fomento de ramos productivos a fin de
disminuir las imposiciones en cuanto sea posible.

Art. 150. La administración general de la Hacienda pertenece al ministerio de


ella.

Art. 151. Este presentará anualmente al gobierno, para que lo haga al Congreso:

1° Los planes orgánicos de la Hacienda en general, y de sus oficinas en


particular.

2° El presupuesto de los gastos precisos para el servicio de la República.

3° El plan de contribuciones ordinarias para cubrirlos.

4° El de las contribuciones extraordinarias para satisfacer los empréstitos


nacionales, y sus réditos correspondientes.

Art. 152. Habrá en la capital de la República una contaduría general con un jefe
y los empleados necesarios. En ella deberán examinarse, glosarse, y fenecerse
las cuentas de todos los productos e inversiones de la Hacienda.

Art. 153. Habrá también en la capital de la República una tesorería general,


compuesta de un contador, un tesorero, y los empleados correspondientes. Se
reunirán en ella todos los productos de la Hacienda.

Art. 154. Una ley reglamentaria de Hacienda ordenará todas estas oficinas, y las
demás dependencias que sean necesarias en este ramo, fijando las
atribuciones, escala, número y responsabilidad de los empleados, y el modo de
rendir y liquidar las cuentas.

Art. 155. Quedan abolidos los estancos en el territorio de la República.

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Art. 156. Las aduanas se situarán en los puertos de mar y en las fronteras, en
cuanto sea compatible con la recta administración, con el interés del Estado, y el
servicio público.

Art. 157. Quedan suprimidas las aduanas interiores; pero esta disposición no
tendrá efecto hasta que lo determine el Congreso.

Art. 158. Se establecerá en la capital de la República un Banco general de


rescate de oro y plata, y habilitación de minas.

Art. 159. Se establecerán Bancos de rescate en los principales asientos de


minas, a fin de auxiliar a los mineros, y facilitarles la pronta explotación y
beneficio de metales.

Art. 160. Un reglamento particular determinará todo lo conducente á estos


establecimientos.

Art. 161. La nación reconoce la deuda pública, y su pago depende del honor
nacional; para cuyo fin decretará el Congreso cuanto estime necesario a la
dirección de este importantísimo negocio.

Art. 162. Las contribuciones se repartirán bajo regla de igualdad y proporción,


sin ninguna excepción, ni privilegio.

Art. 163. Las asignaciones de los funcionarios de la República son de cuenta de


la Hacienda; cuyo arreglo se hará por un decreto particular, con concepto a la
representación y circunstancias de los empleos o destinos.

CAPITULO II

Fuerza Armada.

Art. 164. La defensa y seguridad de la República demanda una fuerza armada


permanente.

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Art. 165. Constituyen la fuerza armada de tierra: el ejército de línea, la milicia
cívica, y la guardia de policía.

Art. 166. El destino del ejército de línea es defender la seguridad exterior de la


República, y se empleará donde esta pueda ser amenazada.

Art. 167. Para emplearla en el caso de alguna revolución declarada en el interior


de la República, procederá el acuerdo del Congreso, y en su receso el del
Senado.

Art. 168. La milicia cívica servirá para mantener la seguridad pública entre los
límites de cada provincia.

Art. 169. No podrá traspasar estos límites sino en el caso de alguna revolución
entre otras provincias dentro o fuera del departamento, o en el de invasión.

Art. 170. En estos casos precederá el acuerdo del Congreso, y en su receso el


del Senado.

Art. 171. El objeto de la guardia de policía es proteger la seguridad privada,


purgando los caminos de malhechores, y persiguiendo a los delincuentes con
sujeción a las órdenes de la autoridad respectiva.

Art. 172. No puede destinarse esta guardia a otro servicio, si no es en los casos
de revolución declarada, o de invasión; para lo que precederá el acuerdo del
Congreso, y en su receso el del Senado.

Art. 173. El Congreso fijará anualmente el número de tropas necesarias en el


ejército de línea, y el modo de levantar las que fueren más convenientes.

Art. 174. Las ordenanzas que prefijare el Congreso, determinarán todo lo relativo
a la organización de estos cuerpos, la escala militar, disciplina, y arreglo
económico del ejército.

51
Art. 175. La enseñanza e instrucción del ejército y armada dependen de la
educación que se dará en las escuelas o colegios militares que deberán
establecerse.

Art. 176. La milicia cívica se organizará en todas las provincias según su


población y circunstancias.

Art. 177. Se creará una guardia de policía en todos los departamentos que la
exijan conforme a sus necesidades.

Art. 178. El Congreso fijará anualmente el número de buques de la marina militar


que deban conservarse armados.

Art. 179. Todo militar no es más que un ciudadano armado en defensa de la


República. Y así como esta circunstancia le recomienda de una manera
particular para las recompensas de la patria; el abuso de ella contra la libertad le
hará execrable a los ojos de la nación y de cada ciudadano.

Art. 180. Ningún Peruano podrá excusarse del servicio militar, según y como
fuere llamado por la ley.

CAPITULO III

Educación Pública.

Art. 181. La instrucción es una necesidad común, y la República la debe


igualmente a todos sus individuos.

Art. 182. La Constitución garantiza este derecho:

1° Por los establecimientos de enseñanza primaria, de ciencias, literatura, y


artes.

2° Por premios que se concedan a la dedicación, y progresos distinguidos.

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3° Por institutos científicos, cuyos miembros gocen de dotaciones vitalicias
competentes.

4° Por el ejercicio libre de la imprenta que arreglará una ley particular.

5° Por la inviolabilidad de las propiedades intelectuales.

Art. 183. La instrucción pública depende en todos sus ramos de los planes y
reglamentos generales que decretare el Congreso.

Art. 184. Todas las poblaciones de la República tienen derecho a los


establecimientos de instrucción que sean adaptables a sus circunstancias. No
puede dejar de haber universidades en las capitales de departamento, ni
escuelas de instrucción primaria en los lugares más pequeños; la que
comprenderá también el catecismo de la religión católica y una breve exposición
de las obligaciones morales y civiles.

Art. 185. Se establecerá una Dirección general de estudios en la capital de la


República, compuesta de personas de conocida instrucción, a cuyo cargo estará
bajo la autoridad del gobierno, y protección especial del Senado, la inspección
de la instrucción pública.

CAPITULO IV

Observancia de la Constitución.

Art. 186. El primer cuidado del Congreso, luego después de la apertura de sus
sesiones, será examinar las infracciones de la Constitución que no se hubieren
remediado, a fin de decretar lo necesario para que se haga efectiva la
responsabilidad de los infractores.

Art. 187. Todo peruano debe reclamar ante el Congreso, ante el Poder Ejecutivo,
o ante el Senado la observancia de la Constitución, y representar fundadamente
las infracciones que notare.

53
Art. 188. Todo funcionario público, de cualquier fuero que sea, al tomar posesión
de su cargo, ratificará el juramento de fidelidad a la Constitución, prometiendo
bajo de él cumplir debidamente sus obligaciones respectivamente.

Art. 189. El presidente de la República jurará ante el Congreso, como asimismo


el de la Suprema Corte de Justicia, y el del Senado: los Obispos jurarán en
presencia de sus respectivos cabildos.

Art. 190. Todos los demás empleados jurarán ante las autoridades
correspondientes según el departamento a que pertenecieren.

4.3 CLAÚSULA DE REFORMA CONSTITUCIONAL:

En la Constitución de 1823, se considera:

Art. 191. Esta Constitución queda sujeta a la ratificación o reforma de un


Congreso general compuesto de los diputados de todas las provincias
actualmente libres, y de todas las que fueren desocupadas por el enemigo,
concluida que sea la guerra.

Art. 192. Para la ratificación o reforma que indica el artículo anterior deberán
contener los poderes de los diputados, cláusula especial que los autorice para
ello.

54
4.4 PARALELO ENTRE CONSTITUCIÓN DE 1823 CON CONSTITUCIÓN DE
1993:

Si bien es cierto, las constituciones que se dieron a lo largo de la historia peruana


han sido con el fin de ver al Perú, como un país libre de todo aprehensión
extranjera, pues debemos tener en cuenta que estas se dieron según las
circunstancias y el contexto social - político del tiempo en el que se desarrollaron,
es decir cada constitución tienen características propias que las coloca dentro
del marco de su propia época.

En esta ocasión, compararemos dos constituciones de nuestro país, que tienen,


según creemos, la mayor relevancia para la historia peruana, no solo por el
medio en el que se desarrollaron ambas, sino también, porque significan los
extremos de un Perú en desarrollo, en todos los aspectos; nos referimos a la
primera y última (actual) constitución peruana: la del 1823 y la de 1993.

En 1821, éramos un país que recién se libertaba del yugo español, que
empezaba a nacer hacia la paz y justicia social, que en primera instancia no se
creó una constitución propiamente dicha, pero a pesar de ello, se crearon
estatutos y reglamentos, que junto a José de San Martin regularizaron por un
tiempo nuestro país, en 1822 se crean las bases de la constitución que se daría
en 1823, y aunque esta constitución no entró en vigencia, desde el mismo
instante en que se promulgó (ya que entro en vigencia cuatro años después),
nos deja constancia de que en el Perú, se buscaba ser una nación y un país
como cualquier otro es en la actualidad: que sea un gobierno que regularice
todos sus movimientos a través de una Ley Madre: la Constitución.

Y tenemos al otro extremo de la historia, la década de los 90’, con una coyuntura
totalmente distinta a la anterior constitución mencionada, pues estábamos
atravesando una de las etapas más fuertes de la historia peruana: el terrorismo,
que ya había avanzado grandemente en la región peruana, y otro gran suceso
que acaecía en esa década era la hiperinflación económica, esos dos factores
fueron los determinantes para que se cambiara la constitución del 1979 a la de
1993, sea como sean las circunstancias que sucedieron antes y/o después de la
promulgación de la nueva constitución (1993), lo cierto es que hasta el día de

55
hoy nos regimos de esta y poco a poco crecemos más, en todos los aspectos,
como país .

Si vamos refiriéndonos de las figuras que resaltaron en el contexto social para


las constituciones que se dieron, los personajes fueron: de 1821 fue San Martin
y José Sánchez Carrión a mediados de 1823, además se crea el 1º congreso
constituyente en 1822, así mismo, en 1990 fue el personaje el ex-Presidente
Alberto Fujimori al cerrar el congreso en 1992 y crear una nueva constitución con
grandes reformas en 1993.

Habiendo analizado y comparado ambas constituciones en el contexto en que


se desarrollaron, ahora si pasaremos a analizar aspectos de cada constitución:

Para empezar queremos hacer hincapié en cuanto al término “comparación” ya


que hablar de ello no solo nos referimos a diferencias, sino también a similitudes
que se tienen, y es pues que desde que se empieza a leer ambas constituciones,
los detalles saltan rápidamente a la luz.

La forma en la que se dividió la constitución, es distinta ya que en la actual fue


por Títulos y en la de 1823 fue en Secciones (cada cual con sus capítulos),
incluso la cantidad es distinta, ya que son 6 Títulos y en contrario tenemos 3
Secciones.

Referente a la estructura de la primera constitución elaborada en el Perú, la


primera sección trataba sobre la nación, el territorio, la religión y la ciudadanía;
la segunda, sobre la forma de gobierno y los poderes que lo integraban; y la
tercera, sobre los medios de conservar el gobierno. Por su lado la Constitución
de 1993 en el primer título trata sobre la persona y la sociedad; la segunda, sobre
el Estado y la nación; la tercera, sobre el régimen económico; la cuarta, sobre la
estructura del Estado; la quinta, sobre las garantías constitucionales y la sexta,
sobre la reforma de la constitución.

En el Preámbulo, al compararlos, hay similitudes, pues nos dimos cuenta que,


hay gran disposición por parte del Estado de salvaguardar la religión, la voluntad
de Dios, ya que en términos generales pone al país “a los ojos” de Dios.

56
Se nota claramente que la primera constitución es muy básica, preocupada más
por la nación que recién nacía, de guardarla, de cuidarla, si bien, se tuvo en
cuenta lo que dice el Art. 16º de la Declaración de los Derechos Humanos con
respecto a la separación de poderes (Poder Legislativo, Poder Ejecutivo, Poder
Jurisdiccional) y derechos fundamentales de la persona (libertad e igualdad),
pero con respecto a lo último, a nuestro parecer, se debió poner en un solo
capitulo lo referente a ‘Derechos Fundamentales’, si bien es cierto en el art. 193º
(C.P. 1823) se mencionan los derechos que son inviolables y en otro artículo se
dice que no hay más esclavos en el Perú mediante la “Ley de Vientres”, no nos
parece que haya sido colocado en el penúltimo articulo ya que pareciera que no
hubiese sido lo jerárquicamente importante y por el mismo contexto social en el
que se vivía, que se venía de una independencia y no considerar en primer plano
a los derechos fundamentales de la persona es algo desconcertante.

Muy por el contrario, en la constitución actual, se puso en primer lugar a los


derechos fundamentales que nos parece muy positivo, ya que se toma en cuenta
en primer orden a estos derechos además derechos sociales, económicos, de
ciudadanía, derechos políticos, derechos laborales, que son los que adquirimos
al nacer como personas, en fin, se hizo el esfuerzo de reunir algunos derechos
para que sean respetados, aunque estos no son los absolutos.

Y cuando decimos que se crean derechos para ser respetados nos referimos a
que actualmente existe un organismo que no solo se encarga de ver los derechos
naturales, sino también, los derechos sociales o los adquiridos con el tiempo, y
nos referimos a la Defensoría del Pueblo, que es un organismo del Estado
destinado a defender a la persona y ciudadano, si bien no existió desde el
principio de la constitución (1823) se tiene en cuenta que hay un artículo que
menciona cuales son los derechos inviolables.

El término ‘derechos sociales’, se utiliza en la constitución de 1993, y creemos


que hace un gran contraste con la primera constitución, donde se pone a la
educación como medio de conservación del gobierno mas no como un derecho
social, cabe resaltar que aparte de que se menciona educación, en ambas
constituciones, se menciona la importancia de las universidades y se ve la
preocupación de la educación de nivel superior, si bien es cierto no se lo puso

57
en sus inicios como un derecho social, se lo puso como medio de conservación
de gobierno, y qué quiere decir eso, es simple, que sin educación las personas
de un país no serán capaces de defender su nación con el conocimiento, no
serán capaces de conocer lo que tiene su país (identidad nacional) y por lo tanto
no podrán conservarlo como se debe; pero esto muchas veces esto es en teoría
y papel, porque la realidad es otra; en síntesis, la educación estuvo presente
desde la primera constitución, pero hasta hoy no se tiene un crecimiento
relevante, como debería ser.

Otro punto que llama la atención es acerca de la Obligatoriedad del Servicio


Militar (1823) que actualmente no lo es, pero se ha tratado de volcar esta
situación en los últimos meses, no siendo obligatorio sino más bien, como
coloquialmente se lo llama ñ6´p“al azahar”.

Con respecto a la ciudadanía en 1823 se perdía la ciudadanía con ciertas


acciones que se realizaban que según se pensaba iban en contra de lo que se
debía seguir, es decir necesariamente deberías tener probidad notoria,
actualmente no se puede quitar la ciudadanía, porque es inherente a la persona
nadie puede quedarse sin lugar de nacimiento, además antes se rechazaba que
una persona tenga otra nacionalidad, aparte de ello hay grandes diferencias, es
ciudadano aquel que tenga 25 años, además de ser casado, tener independencia
económica y tener educación básica, leer y escribir (1823) mientras que
actualmente solo debes tener 18 años y tener inscripción electoral, todos los
ciudadanos tienen el derecho a voto (1993), contrariamente, en la primera
constitución, por cada 200 individuos se elige un elector (art. 33º) e incluso ser
un elector tenía sus propios requisitos, casi como un privilegio; siguiendo con el
aspecto electoral, es claro, que no habían organismos especiales que se
encarguen de los procesos electorales como los hay ahora (ONPE, JNE).

Además, hay una gran diferencia con la cantidad de los ministros, ya que en la
primera constitución solo se tenían 3 ministros para tres sectores que en su
momento fueron importantes, y en el actual hay 17 ministros que velan por la
representación de sectores de gran importancia para el país.

58
A parte, no existía régimen económico, que permiten actualmente regular los
derechos del trabajador, las relaciones exteriores con otros países (Tratados), la
libertad de contratar; en síntesis, en el régimen económico encontramos las
labores que hace el estado para proteger a la persona que se dedica al rango
laboral y le da oportunidades para que pueda desenvolverse en el país.

Actualmente existe el Banco Central de la Reserva es persona jurídica de


derecho público. Tiene autonomía dentro del marco de su Ley Orgánica. La
finalidad del Banco Central es preservar la estabilidad monetaria. Sus funciones
son: regular la moneda y el crédito del sistema financiero, administrar las
reservas internacionales a su cargo, y las demás funciones que señala su ley
orgánica.

Yendo a planos más profundos, hablaremos acerca la religión (que ya


explicamos) hasta hoy se sigue profesando oficialmente la religión católica, pero
vayamos a un punto sumamente controversial, en 1823 no se aceptaba ninguna
otra religión que no fuera la oficial, como sea se debía hacer respetar y cumplir
la religión, pero actualmente esto ha cambiado, por el mismo siglo en el que
vivimos, pues ya hay más tolerancia hacia otras religiones que existen.

Con respecto a la división política, no hay modificatoria alguna, ya que sigue


siendo: Departamento, Provincia y Distrito, excepto a que en 1823 existe una
subdivisión de distrito, que son las “parroquias”, y es interesante ver que cada
departamento, provincia, distrito y parroquia tenía su propios representantes,
llamados de una manera especial según sea representante de una división
política.

Si miramos la forma en la que era el gobierno de 1823, es obvio que era


Bicameral ya que existía una cámara de Diputados y otra del Senado, tenían casi
las mismas atribuciones las cuales ayudarían a un mejor gobierno, contrario
celsum, la actual es unicameral con un solo congreso, que tienen el poder
Legislativo, para crear leyes. En cualquiera de los casos, ya sea cuando
hablamos de, bicameralidad o unicameral en defensa o no de estas tendencias
políticas, podemos decir que es casi la misma forma de operar para crear las
leyes, porque valga en verdades cuando hablamos de bicameralidad nos

59
referimos a que lo que disponía la cámara de Diputados que debía pasar,
también, por las manos del Senado, es decir, pasaba doble revisión, y por lo
tanto pasaba mucho más tiempo, y lo que pasa ahora no escapa de ser casi
similar, pues a pesar de ser unicameral, pasa mucho tiempo para que las leyes
sean aprobadas.

Con respecto a la división de poderes, como ya lo mencionamos al principio, se


tiene en cuenta la división de poderes según el art. 16º de la Declaración de los
Derechos de la Persona y del Ciudadano, y los poderes del estado considerados
desde la primera constitución no se ha modificado, pues siguen siendo los
mismos: Poder Legislativo, Poder Ejecutivo y Poder Jurídico, pero lo que si
difieren son en algunos aspectos de estos poderes.

Tal es el caso del poder ejecutivo que si bien actualmente el cambio del máximo
representante del Poder Ejecutivo: El Presidente, se da cada 5 años, es diferente
al de 1823 donde claramente se ve que se cambia cada 4 años, también es
importante recalcar que en ambas constituciones se está en contra de la
reelección o de gobiernos vitalicios o hereditarios; otro punto que se debe tener
en cuenta es en el caso hipotético de la muerte del presidente sube al cargo el
vicepresidente (1823) a contrario de lo que pasa actualmente; si muere el
presidente, el cargo queda a disposición para llamar a nuevas elecciones, pues
solo se le atribuye responsabilidad al vicepresidente cuando el presidente sea
suspendido por motivos que considera la constitución de 1993.

La Constitución de 1823 establecía los siguientes requisitos para ser Presidente


de la República:

1. Ser una persona nacida en el Perú.


2. Reunir las mismas cualidades que para ser Diputado. Supone además,
esta magistratura la aptitud de dirigir vigorosa, prudente y liberadamente
una República.

Lo que lleva a:

1. Ser ciudadano en ejercicio.


2. Ser mayor de 25 años.
60
3. Tener una propiedad o renta de ochocientos soles cuando menos, o
ejerce cualquiera industria que los rinda anualmente, o ser profesor
público de alguna ciencia.

En el caso actual, solo es necesario ser peruano de nacimiento, tener 35 años


de edad a más y gozar de derecho de sufragio.

Por otra parte, la Constitución de 1823 establecía que era atribución del
Congreso elegir al Presidente y Vicepresidente de la República, cuyos miembros
eran elegidos por Colegios Electorales parroquiales. No obstante, la Constitución
de 1993 determina que la elección tanto del presidente como los congresistas
recae sobre el pueblo; es decir que son elegidos democráticamente.

En el Poder Judicial, si bien hay cortes supremas de Justicia, no hay Colegio


Nacional de Magistratura o Ministerio Publico o la Fiscalía, que actualmente son
un apoyo con respecto a lo jurisdiccional, y si bien no se utiliza el término
“inconstitucional” propiamente dicho en la constitución de 1823, se sabe, por
contexto histórico, que lo que iba hacer el Señor Bolívar sería inconstitucional y
para evitar esa coyuntura, es por eso que no se llega a promulgar la constitución,
y muy aparte de todo ello, se hubiera ido en contra del principio de legalidad que
es muy importante para no cometer abusos del poder.

Y por último, el Poder Legislativo, antes se daba tres días para la promulgación
de la ley, actualmente son 15 días de plazo.

Y aunque se pueda pensar que la primera constitución no contenía una Clausula


de reforma, pues en realidad si la contiene al igual que nuestra actual
constitución, y es vital recalcar la importancia que tiene, el que una constitución
contenga una cláusula de reforma porque de esa manera se puede modificar
según el contexto que tenga la sociedad en ese instante.

Para culminar este paralelo entre ambas constituciones, queremos resaltar que
las comparaciones entre ellas contienen sus propias características, ya sea por
el mismo contexto en el que se vivía o por la misma época.

61
Nuestra primera constitución no entró en vigencia en el momento que fue creada,
pero para ser la primera constitución tenía bases para proteger a una nación,
aunque había muchos aspectos que quedaban prácticamente en el aire, como
son la protección de los derechos fundamentales, de los derechos sociales, de
los derechos laborales, fue como una sustracción de lo más importante de la
época: la protección de la nación, la manera de conservarla, y ver cómo hacer
para que las personas ciudadanos peruanos vivan en ella, respetando sus
derechos inviolables, con la conformación de sus tres poderes, respetando el
principio de legalidad, es decir, lo que sucedió con esta constitución (la primera:
1823) es que como era la primera constitución se generalizo lo más importante,
con bases a ser una mejor nación.

Lo que sucede con la última y actual constitución, es un poco más a lo que se


ajusta la época, que se habla sobre la importancia del respeto del derecho
humano, que si bien hay muchos aspectos en nuestra constitución que no están
del todo saneadas, lo importante es que hasta hoy nos regimos de esta y bueno
que malo es nuestra actual constitución.

62
V. CONCLUSIONES:

La Constitución peruana de 1823 ha constituido un precedente muy importante


para el resto constituciones con las que ha contado el país. Si bien ha sido
nuestra primera constitución, o al menos así considerada aunque no haya regido
por mucho tiempo, jamás ha sido tomada con la importancia debida, ni mucho
tuvo el realce ni el impacto que toda constitución debe tener sobre su sociedad.

No obstante, desde la aparición de la figura de Bolívar en la historia peruana,


esta constitución se ha visto prácticamente invalidada, pues no respondía a lo
que Bolívar necesitaba para gobernar el Perú. Por este hecho podemos afirmar
que desde antaño, las constituciones debían estar hechas no para responder ni
salvaguardar las exigencias y la seguridad de la sociedad, sino para adecuarse
al modo de gobierno de cierto sector político, de tal manera que les facilite el
empoderamiento del país. He allí que casi todas las constituciones, empezando
por las de 1823, no se adecuaban a la realidad social y terminaban fracasando.
En otros casos más reales tampoco se adecuaban al modo de gobierno de algún
presidente y fin era terminar derogada.

Esto se ha visto a lo largo de los años y muestra de ello es la gran cantidad de


constituciones que alberga nuestra historia republicana. No puede ser posible
que una constitución sirva únicamente para un gobierno en específico ni mucho
menos que no se adecue en su totalidad a realidad peruana, pues eso demuestra
la incapacidad de nuestros legisladores de identificarse con nuestra realidad
social y plantear normas que puedan regirla.

Por otra parte, hablando netamente de la constitución de 1823, nos demuestra


que aún existían grandes rezagos del dominio español sobre todo en el tema de
la religión, al considerar al catolicismo como única e irremplazable a tal magnitud
que nadie podría ejercer cargo público si no predicase dicha religión. No
obstante, no es difícil darse cuenta que esta constitución tuvo de modelo a otras
constituciones del mundo.

A modo conclusión general sobre esta constitución, podemos manifestar que en


primer lugar mantiene una tendencia de corte liberal, por el mismo entorno en el

63
que se desarrolló; es una constitución rígida, pues para su modificación era
necesario seguir cláusulas de reforma (lo que hasta ahora sucede).

En tanto, después de haber realizado esta monografía, podemos concluir en que


la Constitución de 1823 es la primera manifestación de una nación republicana,
con un gobierno con aires de democracia que no se asentaban en su totalidad;
que si bien no es totalmente sólida en su contenido, estaba claramente destinada
a proteger el Estado y la nación, lo que nos deja pruebas de que el Perú, desde
sus inicios como república, buscaba siempre un estado bien conformado pero
que en la práctica no lo conseguía.

64
VI. RECOMENDACIONES:
 La presente monografía fue redactada para fines académicos, expositivos e
informáticos, por lo tanto no debe tomarse como única, esta fuente escrita.

 Es recomendable respetar las opiniones vertidas dentro de la monografía, ya


que existe en el Perú, hoy por hoy, libertad de expresión; y este material,
como se mencionó en un principio, tiene fines netamente académicos.

 El paralelo que existe entre las constituciones estudiadas en la presente


monografía, no son las únicas comparaciones existentes; incluso se puede
generar debate con este tema.

 Recomendamos buscar más información por cuenta propia para que pueda
engendrar su propia opinión; tome esta monografía como incentivo para tal
acto.

 Recomendamos, en última instancia, que al finalizar la lectura de la presente


monografía, el lector realice su propio resumen del tema tratado, y comparta
este material con allegados a fin de que todos podamos conocer un poco más
de la historia constitucional de nuestro país.

65
BIBLIOGRAFÍA:

 García, D. (2005). Las Constituciones del Perú. Segunda edición, Lima,


 Pareja. J. (1973). Derecho Constitucional Peruano. Lima: Ediciones
Librería Studium.
 http://www2.congreso.gob.pe/sicr/cendocbib/con2_uibd.nsf/05C7CB4D5
27A6EB505257718005DD7D8/$FILE/19_La_evoluci%C3%B3n_constitu
cional_del_Per%C3%BA_contempor%C3%A1neo.pdf
 http://www4.congreso.gob.pe/historico/quipu/constitu/1821b.htm
 http://www4.congreso.gob.pe/historico/quipu/constitu/1821a.htm
 http://www.deperu.com/abc/constituciones/246/constitucion-politica-del-
peru-1823
 http://historiadelperu.carpetapedagogica.com/2012/08/el-
protectorado.html
 http://www.ilustrados.com/tema/9915/Breve-resena-constituciones-
politicas-Peru.html

66
ANEXOS:

67
1-A

Constitución Política de la República Peruana


Sancionada por el Primer Congreso Constituyente el
12 de Noviembre de 1823

CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE LA REPÚBLICA PERUANA SANCIONADA POR EL PRIMER


CONGRESO CONSTITUYENTE EL 12 DE NOVIEMBRE DE 1823.

Don José Bernardo Tagle, Gran Mariscal de los Ejércitos, y Presidente de la República Peruana,
Nombrado por el Congreso Constituyente.

Por cuanto:

El mismo ha venido en decretar y sancionar lo siguiente:

CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE LA REPÚBLICA


PERUANA

En el nombre de Dios, por cuyo poder se instituyen todas las sociedades y cuya sabiduría
inspira justicia a los legisladores.

Nos el Congreso Constituyente del Perú, en ejercicio de los poderes que han conferido los
pueblos a todos y cada uno de sus Representantes, para afianzar sus libertad, promover su
felicidad, y determinar por una ley fundamental el Gobierno de la República, arreglándonos a
las bases reconocidas y juradas.

Decretamos y sancionamos la siguiente Constitución:

68
SECCIÓN PRIMERA DE LA NACIÓN

CAPÍTULO I

De la Nación Peruana

ARTICULO 1º.- Todas las provincias del Perú, reunidas en un solo cuerpo forman la Nación
Peruana.

ARTICULO 2º.- Esta es independiente de la Monarquía Española, y de toda dominación


extranjera; y no puede ser patrimonio de ninguna persona ni familia.

ARTICULO 3º.- La soberanía reside esencialmente en la Nación, y su ejercicio en los


magistrados, a quienes ha delegado sus poderes.

ARTICULO 4º.- Si la Nación no conserva o protege los derechos legítimos de todos los individuos
que la componen, ataca el pacto social: así como se extrae de la salvaguardia de este
pacto cualquiera que viole alguna de las leyes fundamentales.

ARTICULO 5º.- La nación no tiene facultad para decretar leyes que atentan a los
derechos individuales.

CAPÍTULO II

TERRITORIO

ARTICULO 6º.- El Congreso fijará los límites de la República, de inteligencia con los Estados
limítrofes, verificada la total independencia del Alto y Bajo Perú.

ARTICULO 7º.- Se divide el territorio en departamentos, los departamentos en provincias, las


provincias en distritos y los distritos en parroquias.

69
CAPÍTULO III

RELIGION

ARTICULO 8º.- La religión de la República es la Católica, Apostólica, Romana con exclusión del
ejercicio de cualquier otra.

ARTICULO 9º.- Es un deber de la Nación protegerla constantemente, por todos los medios
conformes al espíritu del Evangelio, y de cualquier habitante del Estado respetarla
inviolablemente.

CAPÍTULO IV

ESTADO POLÍTICO DE LOS PERUANOS

ARTÍCULO 10º.- Son Peruanos:


1.- Todos los hombres libres nacidos en el territorio del Perú.

2.- Los hijos de padre o madre peruanos, aunque hayan nacido fuera del territorio, luego
que manifiesten legalmente su voluntad de domiciliarse en el país.

3.- Los naturalizados en él, o por carta de naturaleza, o por la vecindad de cinco años,
ganada según ley, en cualquier lugar de la República.

ARTICULO 11º.- Nadie nace esclavo en el Perú, ni de nuevo puede entrar en él alguno de
esta condición. Queda abolido el comercio de negros.

ARTICULO 12º.- El peruano que fuere convencido de este tráfico, pierde los derechos
de naturaleza.

ARTICULO 13º.- El extranjero que se ocupare en él, no puede naturalizarse en el


Perú.

ARTICULO 14º.- Los oficios prescritos por la justicia natural, son obligaciones que muy
particularmente debe llenar todo peruano, habiéndose indigno de este nombre el que no sea
religiosos, el que no ame a la Patria, el que no sea justo o benéfico, el que falte el decoro
nacional, el que no cumpla con lo que se debe a sí mismo.

70
ARTICULO 15º.- La fidelidad de la Constitución, la observancia de las leyes, y el respeto a las
autoridades, comprometen de tal manera la responsabilidad de todo peruano, que cualquiera
violación en estos respectos lo hacen delincuente.

ARTÍCULO 16º.- La defensa y sostén de la República, sea por medio de las armas, sea por el de
las contribuciones, obligan a todo peruano en conformidad de sus fuerzas y de sus bienes.

ARTICULO 17º.- Para ser ciudadano es necesario:

1.- Ser peruano.

2.- Ser casado, o mayor de veinticinco años.

3.- Sabe leer y escribir, cuya calidad no se exigirá hasta después del año de 1840.

4.- Tener una propiedad, o ejercer cualquiera profesión, o arte con título público, u
ocuparse en alguna industria útil, sin sujeción a otro en clase de sirviente o
jornalero.

ARTICULO 18º.- Es también ciudadano el extranjero que obtuviere carta de


ciudadanía.

ARTICULO 19º.- Para obtenerla, además de reunir las calidades del artículo 17º, deberá haber
traído, fijado o enseñado en el país alguna invención, industria, ciencia o arte útil, o adquirido
bienes raíces que le obliguen a contribuir directamente; o establecidos en el comercio, en la
agricultura, o minería, con un capital considerable; o hecho finalmente servicios distinguidos en
pro y defensa de la Nación: todo a juicio del Congreso.

ARTICULO 20º.- Son igualmente ciudadanos los extranjeros casados que tengan diez años de
vecindad en cualquier lugar de la República, y los solteros de más de quince, aunque unos y
otros no hayan obtenido carta de ciudadanía, con tal que sean fieles a la causa de la
Independencia, y reúnan las condiciones el artículo 17º.

ARTICULO 21º.- Se moderarán estas reglas en orden a los naturales de las demás secciones
independientes de América, según sus convenciones recíprocas con la República.

ARTICULO 22º.- Solo la ciudadanía abre la puerta a los empleos, cargos o destinos de la
República, y da el derecho de elección en los casos prefijados por la ley. Esta disposición no

71
obsta para que los peruanos que aún no hayan comenzado a ejercer la ciudadanía, puedan ser
admitidos a los empleos, que por otra parte no exijan edad legal.

ARTICULO 23º.- Todos los ciudadanos son iguales ante la ley, ya premie, ya castigue. Quedan
abolidos los empleos y privilegios hereditarios.

ARTICULO 24º.- El ejercicio de la ciudadanía se suspende únicamente:

1.- En los que por ineptitud física o moral no puedan obrar libremente.

2.- Por la condición de sirviente doméstico.

3.- Por la tacha de deudor quebrado, o deudor moroso al Tesoro Público.

4.- Por no tener empleo, oficio o modo de vivir conocido.

5.- En los procesados criminalmente.

6.- En los casados que sin causa abandonen a sus mujeres, o que notoriamente falten a
las obligaciones de familia.

7º.- En los jugadores, ebrios, truhanes, y demás que con su vida escandalosa ofendan la
moral pública.

8.- Por comerciar sufragio en las elecciones.

ARTICULO 25º.- Se pierde el derecho de ciudadanía únicamente:

1.- Por naturalizarse en tierra de Gobierno extranjero.

2.- Por imposición de pena aflictiva o infamante, si no se alcanza rehabilitación: la que


no tendrá lugar en los traidores a la Patria, sin pruebas muy circunstanciadas a juicio del
Congreso.

ARTICULO 26º.- Las Condiciones que indica este Capítulo, calificadas legalmente, se tendrán
en consideración al arreglar el censo constitucional cada quinquenio, del que se formará el
registro cívico de toda la República.

72
SECCIÓN SEGUNDA DEL GOBIERNO

CAPÍTULO I

SU FORMA

ARTICULO 27º.- El Gobierno es popular representativo.

ARTICULO 28º.- Consiste su ejercicio en la administración de los tres Poderes: Legislativo,


Ejecutivo y Judiciario, en que quedan dividas las principales funciones del Poder Nacional.

ARTICULO 27º.- El Gobierno es popular representativo

ARTICULO 29º.- Ninguno de los tres Poderes podrá ejercer jamás ninguna de las atribuciones
de los otros dos.

CAPÍTULO II
PODER
ELECTORAL

ARTICULO 30º.- Tocando a la Nación hacer sus leyes por medio de sus Representantes en
Congreso, todos los ciudadanos deben concurrir a la elección de ellos, en el modo que
reglamenta la ley de elecciones, conforme a los principios que aquí se establecen. Esta es la
única función del Poder Nacional que se puede ejercitar sin delegarla.

ARTICULO 31º.- La elección de Diputados se hará por medio de Colegios Electorales de


parroquia, y de provincia, señalándose para la reunión de los primeros el primer domingo de
mayo, y para la de los segundos el primer domingo de junio, a fin de que en setiembre puedan
reunirse todos los Diputados en la capital de la República.

ARTICULO 32º.- Constituyen los Colegios Electorales de parroquia, todos los vecinos residentes
en ella que estuviesen en ejercicio de la ciudadanía, presididos por el Alcalde o Regidor que se
designare, y asistencia del Secretario y Escrutadores que nombrará el Colegio de entre los
concurrentes.

ARTICULO 33º.- Por cada doscientos individuos se nombrará un elector, cualquiera que
sea el censo parroquial.

73
ARTICULO 34º.- Para ser elector parroquial se exige:

1.- Ser ciudadano en ejercicio

2.- Ser vecino y residente en la parroquia

3.- Tener una propiedad que produzca trescientos pesos cuando menos, o ejercer
cualquiera arte, u oficio, o estar ocupado en alguna industria útil que los rinda
anualmente, o ser profesor público de alguna ciencia.

ARTICULO 35º.- Los Colegios Electorales de parroquia remitirán cerradas y selladas a la


Municipalidad de la capital de la provincia las actas de sus elecciones, a fin de que constatada la
identidad de los elegidos, puedan tener lugar los actos subsecuentes.

ARTICULO 36º.- Forman los Colegios Electorales de provincia todos los electores de parroquia
reunidos en su capital, presididos por un ciudadano nombrado por ellos mismos, y asistencia
del Secretario y Escrutadores que se elegirán de su seno.

ARTICULO 37º.- Reunido el Colegio procederá a elegir en sesión pública permanente los
representantes o Diputados que correspondan a la provincia.

ARTICULO 38º.- Elegirá asimismo un Suplente por cada tres Diputados Propietarios. Y si no
correspondiere a la provincia más que uno solo de éstos, elegirá sin embargo un Suplente.

ARTICULO 39º.- Los Colegios Electorales de provincias remitirán cerradas y selladas al Senado
Conservador las actas de sus elecciones, para el fin indicado en el artículo 34º.

ARTICULO 40º.- El cargo de elector cesa verificadas las elecciones, pero si en el intervalo de una
legislatura a su renovación, ocurriere motivo de elecciones, se reunirán los mismos electores.

ARTICULO 41º.- Mientras se aumenta considerablemente la población, se declara por base


representativa para cada Diputado, la de docemil almas.

ARTICULO 42.- La provincia que no tuviere este número, pero que pase de la mitad, elegirá
sin embargo un Diputado. Y la que tuviere ésta sobre los docemil, elegirá dos Diputados, y así
progresivamente.

ARTICULO 43º.- Para el grave encargo de representante es necesario.

74
1.- Ser ciudadano en ejercicio.

2.- Ser mayor de 25 años.

3.- Tener una propiedad o renta de ochocientos pesos cuando menos, o ejerce
cualquiera industria que los rinda anualmente, o ser profesor público de alguna
ciencia.

4.- Haber nacido en la provincia, o estar avecindado en ella diez años antes de su
elección, pudiendo recaer ésta en individuos del Colegio Electoral.

ARTICULO 44º.- Verificada la elección, otorgará cada Colegio Electoral de provincia a sus
representantes, los correspondientes poderes, con arreglo a la fórmula que prescriba la ley
reglamentaria de elecciones.

ARTICULO45º.- Tanto para ser elector como para ser Diputado, es indispensable la pluralidad
absoluta de sufragios.

ARTICULO 46º.- Los sufragios serán secretos, registrándose después su resultado en


los libros correspondientes, para depositarlos en el archivo público de elecciones, que se
conservará en la capital de la provincia.

ARTICULO 47º.- Toda duda en punto de elecciones se decidirá por el Presidente, Escrutadores
y Secretarios de cada Colegio Electoral, sin necesidad de otro recurso para este solo efecto.

ARTICULO 48º.- El cargo de Elector es inexcusable: lo es también el de Diputado, excepto el caso


de ser reelegido antes de los cuatro años de haber cesado.

ARTICULO 49º.- La subsistencia de los Diputados durante su comisión es de cuenta de


su respectiva provincia, conforme a la tasa permanente que se designare por ley.

ARTICULO 50º.- Al día siguiente de la elección de Diputados procederán los mismos Colegios
Electorales de provincia a la de Senadores; y al día siguiente de esta elección, a la de Diputados
departamentales, observando en todo las mismas formalidades que para el nombramiento de
Diputados a Congreso.

CAPÍTULO III
PODER LEGISLATIVO

75
ARTICULO 51º.- El Congreso del Perú en quien reside exclusivamente el ejercicio del Poder
Legislativo, se compone de todos los Representantes de la Nación, elegidos por las provincias.

ARTICULO 52º.- Todo Diputado antes de instalarse el Congreso para ejercer su cargo prestará
juramento ante el Presidente del Senado en la forma siguiente:

- ¿Juráis a Dios defender la Religión Católica, Apostólica, Romana, sin admitir el


ejercicio de otra alguna en la República?

- Sí, Juro.

- ¿ Juráis guardar y hacer guardar la Constitución Política de la República Peruana,


sancionada por el Congreso Constituyente?

- Sí, juro.

- ¿Juráis, haberos bien y fielmente en el cargo que la Nación os ha hecho,


mirando en todo por el procomunal de la misma Nación?

- Sí, juro.

Si así lo hiciéreis, Dios os premie, y si no, os lo demande.

ARTICULO 53º.- El Congreso se reunirá cada año el 20 de setiembre, permaneciendo en sus


sesiones tres meses consecutivos, y podrá continuarlas por otro mes en caso necesario, con
tal que lo resuelvan los dos tercios de los Diputados existentes.

ARTICULO 54º.- Se abrirán indispensablemente las sesiones el 21 del mismo mes con asistencia
del Poder ejecutivo, sin que la falta de éste por cualquier impedimento pueda diferirla.

ARTICULO 55º.- Se renovará el Congreso por mitad cada dos años; de modo que cada
cuatro lo sea totalmente, designando en la primera vez la suerte los Diputados que cesaren.

ARTICULO 56º.- El reglamento actual, sin perjuicio de las reformas que en él se hicieren, fijará la
economía interior del Congreso, y todas las formalidades convenientes.

76
ARTICULO 57º.- Los Diputados son inviolables por sus opiniones, y jamás podrán ser
reconvenidos ante la ley por las que hubieren manifestado en el tiempo del desempeño de su
comisión.

ARTICULO 58º.- Ningún Diputado durante su diputación, podrá obtener para sí, ni
pretender para otro, empleo, pensión, o condecoración alguna, si no es ascenso de escala en
su carrera.

ARTICULO 59º.- En las acusaciones criminales contra los Diputados no entenderá otro Juzgado
ni Tribunal que el Congreso, conforme a su Reglamento Interior; y mientras permanezcan las
sesiones del Congreso, no podrán ser demandados civilmente, ni ejecutados por deudas.

ARTICULO 60º.- Son facultades exclusivas del congreso:

1.- Decretar y sancionar las leyes, interpretarlas, modificarlas, o derogarlas.

2.- Conceder indultos generales o particulares.

3.- Aprobar los reglamentos de cualquier cuerpo, o establecimientos nacionales.

4.- Crear Milicias Nacionales, y aumentar y reducir las fuerzas de línea.

5.- Decretar aumento o disminución de las fuerzas navales.

6.- Decretar la guerra con presencia de las instrucciones del Poder Ejecutivo, y requerir
a éste para que negocie la paz.

7.- Aprobar los tratados de paz, y demás convenios procedentes de las


relaciones exteriores en todos respectos.

8.- Establecer los medios de pagar la deuda pública al paso que valla liquidándose.

9.- Decretar las contribuciones, impuestos y derechos para el sostén y defensa de la


República.

10.- Aprobar la repartición de las contribuciones entre los departamentos y provincias.

11.- Arreglar anualmente la tarifa de los gastos públicos en vista de los datos que
suministre el Poder Ejecutivo.

77
12.- Abrir empréstitos en caso necesario, dentro o fuera de la República,
pudiendo empeñar el crédito nacional.

13.- Examinar y aprobar la inversión de los caudales públicos.

14.- Determinar la moneda en todos sus respectos, fijar y uniformar los pesos y
medidas.

15.- Crear o suprimir empleos públicos, y asignarles la correspondiente dotación.

16.- Conceder cartas de naturaleza y ciudadanía.

17.- Conceder títulos de villa, o de ciudad a los lugares.

18.- Arreglar la demarcación interior del territorio para su mejor


administración, y fundar nuevas poblaciones, previo el informe del Poder
Ejecutivo.

19.- Conceder premios a los beneméritos de la Patria, y decretar honores a su memoria.

20.- Conceder privilegios temporales a las autoridades de alguna invención útil a la


República.

21.- Instituir fiestas nacionales para mantener la unión cívica, avisar el patriotismo, y
perpetuar la memoria de los sucesos más célebres de la Independencia Nacional.

22.- Decretar todo lo necesario para la instrucción pública por medio de planes fijos,
e instituciones convenientes a la conservación y progreso de la fuerza intelectual y
estímulo de los que se dedicaren a la carrera de las letras.

23.- Crear establecimientos de caridad y beneficencia.

24.- Elegir el Presidente y Vice-presidente de la República de entre los individuos


que le proponga el Senado.

25.- Designar por escrutinio los Senadores de cada departamento de entre los elegidos
por las provincias, cuidando de que no salgan dos de una misma provincia.

78
26.- Nombrar cada bienio los individuos de la Junta Conservadora de la libertad de
imprenta.

27.- Proteger la libertad de imprenta de modo que jamás pueda suspenderse su ejercicio,
ni mucho menos abolirse.

28.- Prestar o negar su consentimiento para el ingreso de tropas extranjeras, y estación de


escuadras en el territorio y puertos de la república; y en caso de otorgarlo, prescribir al
mismo tiempo las precauciones con que deban admitirse.

29.- Prestar o negar igualmente su consentimiento para la salida de tropas nacionales


fuera del territorio de la República.

30.- Gozar del derecho de policía en la casa de sus sesiones, y fuera de ella en todo lo
conducente al libre ejercicio de sus atribuciones, y a la respetabilidad de sus miembros; y
hacer castigar con las penas establecidas a todo el que le faltare el debido respeto, o que
amenazase atentar contra el cuerpo, o contra la inmunidad de sus individuos, o que de
cualquier otro modo desobedeciere o embarazare sus órdenes y deliberaciones.

31º.-Trasladarse a otro lugar cuando lo exijan graves circunstancias, siempre que lo


resuelvan los dos tercios de los Diputados existentes.

CAPÍTULO IV

FORMACIÓN Y PROMULGACION DE LAS LEYES.

ARTICULO 61º.- Sólo a los representantes en Congreso compete la iniciativa de las leyes.

ARTICULO 62º.- El Reglamento de Debates determinará la forma, intervalos, y modo de


proceder en la discusión de las proposiciones que se presentaren por los Diputados.

ARTICULO 63º.- Los proyectos de ley suficientemente discutidos, pasarán al Poder Ejecutivo,
quien con las observaciones oportunas, los remitirá al Senado en el preciso término de tres
días.

79
ARTICULO 64º.- El Senado deliberará sobre ellos consultivamente, y dentro de tercero día los
devolverá al Congreso, el que después de nueva discusión, les dará o no fuerza de ley.

ARTICULO 65º.- Si pasado el término que prefijan los dos artículos anteriores, no se hubiesen
devuelto el proyecto al Congreso, procederá éste a la segunda discusión, y en su consecuencia
le dará o fuerza de ley.

ARTICULO 66º.- Todo proyecto de ley admitido según el Reglamento de Debates, se imprimirá
antes de su discusión, la que tendrá lugar luego que el impreso hubiere circulado.

ARTICULO 67º.- Desechado un proyecto de ley conforme al Reglamento. No podrá


presentarse hasta la Legislatura del año siguiente.

ARTICULO 68º.- El Poder Ejecutivo hará ejecutar, guardar y cumplir todas las leyes y decretos
bajo esta fórmula: "El ciudadano Presidente de la República, por la Constitución Peruana.- Por
cuanto el Congreso ha sancionado lo siguiente: (Aquí el texto). Por tanto ejecútese, guárdese y
cúmplase".

ARTICULO 69º.- El Congreso para promulgar sus leyes o decretos usará la fórmula siguiente:
"El Congreso de la República Peruana decreta y sanciona lo siguiente: (Aquí el texto).-
Comuníquese, mandándole imprimir, publicar y circular".

ARTICULO 70º.- Para derogar o modificar una ley se observarán las mismas formalidades que
para sancionarlas.

ARTICULO 71º.- Para la votación de un proyecto de ley y su sanción, es indispensable la


pluralidad absoluta de los Diputados presentes, que no deberán ser menos de los dos tercios
de la totalidad de ellos.

80
CAPÍTULO V
PODER
EJECUTIVO

ARTICULO 72º.- Reside exclusivamente el ejercicio del Poder Ejecutivo en un ciudadano


con la denominación de Presidente de la República.

ARTICULO 73º.- Todos los actos de su administración serán suscritos por el Ministro de
Estado en el despacho respectivo. El que careciera de esta circunstancia se reputará como un
dimanado de este Poder.

ARTICULO 74º.- El ejercicio del Poder Ejecutivo nunca puede ser vitalicio, y mucho menos
hereditario. Dura el oficio de Presidente cuatro años, y no podrá recaer en el mismo individuo,
sino pasados otros cuatro.

ARTICULO 75º.- Para ser Presidente se requiere:

1.- Ser ciudadano del Perú por nacimiento.

2.- Reunir las mismas calidades que para ser Diputado. Supone además, esta
magistratura la aptitud de dirigir vigorosa, prudente y liberadamente una República.

ARTICULO 76º.- Habrá un Vice-presidente en quien concurran las mismas calidades.


Administrará el Poder Ejecutivo por muerte, renuncia, destitución del Presidente, o cuando
llegare el caso de mandar personalmente la fuerza armada.

ARTICULO 77º.- En defecto del Vice-presidente administrará el Poder Ejecutivo el Presidente


del Senado hasta la elección ordinaria de nuevo Presidente.

ARTICULO 78º.- El Presidente es responsable de los actos de sus administración.

ARTICULO 79º.- El Presidente es jefe de la administración general de la República, y su autoridad


se extiende tanto a la conservación del orden público en lo interior, como a la seguridad
exterior conforme a la Constitución y a las leyes.

ARTICULO 80º.- Además son facultades exclusivas del Presidente:

81
1.- Promulgar, mandar ejecutar, guardar, y cumplir las leyes, decretos y resoluciones
del Congreso, y expedir las providencias indispensablemente necesarias para su efecto.

2.- Tiene el mando supremo de la fuerza armada.

3.- Ordenar lo conveniente para que se verifiquen las elecciones populares en los días
señalados por la Constitución.

4.- Declarar la guerra a consecuencia de la resolución del Congreso.

5.- Entrar en tratados de paz y de alianza, y otros convenios procedentes de relaciones


extranjeras con arreglo a la Constitución.

6.- Decretar la inversión de los caudales destinados por el Congreso a los diversos
ramos de la administración pública.

7.- Nombrar los oficiales del ejército y armada, y de Coronel inclusive para arriba, con
acuerdo y consentimiento del Senado.

8.- Nombrar por si los Ministros de Estado; y los agentes diplomáticos de acuerdo con el
Senado.

9.-Velar sobre la exacta administración de Justicia en los Tribunales y Juzgados y sobre el


cumplimiento de las sentencias que éstos pronunciaran.

10.- Dar cuenta al Congreso en cada Legislatura de la situación política y militar de la


República, indicando las mejoras o reformas convenientes en cada ramo.

ARTÍCULO 81º.- Limitaciones del Poder Ejecutivo:

1.- No puede mandar personalmente la fuerza armada sin consentimiento del Congreso, y
en su receso sin el del Senado.

2.- No puede salir del territorio de la República sin permiso del Congreso.

3.- Bajo ningún pretexto puede conocer en asunto alguno judicial.

4.- No puede privar de la libertad personal a ningún peruano; y en caso de que


fundadamente exija la seguridad pública el arresto o detención de alguna persona,

82
podrá ordenar lo oportuno, con la indispensable condición de que dentro de
veinticuatro horas pondrá al detenido a disposición de su respectivo Juez.

5.- Tampoco puede imponer pena alguna. El Ministro que firmare la orden, y el
funcionario que la ejecutare, atentan contra la libertad individual.

6.- No puede diferir ni suspender en ninguna circunstancia las sesiones del Congreso.

CAPÍTULO VI
MINISTROS DE
ESTADO

ARTICULO 82º.- Habrá tres Ministros de Estado; uno de Gobierno y Relaciones Exteriores, otro
de Guerra y Marina, y otro de Hacienda.

ARTICULO 83º.- El régimen interior de los Ministerios depende del Reglamento que hiciere el
Congreso.

ARTICULO 84º.- Son responsables in solidum los Ministros por las resoluciones tomadas en
común, y cada uno en particular por los actos peculiares a su departamento.

ARTICULO 85º.- Los Ministros son el órgano del Gobierno en los departamentos de su
dependencia, debiendo firmar las órdenes que emanen de este Poder.

ARTICULO 86.- Para ser Ministro se requieren las mismas calidades que se exigen en la
persona que administra el Poder Ejecutivo.

CAPÍTULO VII
SENADO
CONSERVADOR

ARTICULO 87º.- Se compone de tres Senadores por cada departamento elegidos por las
provincias, y designados conforme a la facultad 25 del capítulo III.

83
ARTICULO 88º.- Cada provincia elegirá dos Senadores propietarios, y un Suplente, y remitirá las
actas de su elección al Congreso.

ARTICULO 89º.- El cargo de Senador durará doce años, distribuyéndose su número por lo que
hace a su renovación por cada departamento en tres órdenes. Los de la primera cesarán al fin
del cuarto año: los de la segunda al del octavo, y los de la tercera al duodécimo; de suerte que
cada doce años se renueve la totalidad del Senado, saliendo por suerte en los dos primeros
cuatrienios los que deben cesar.

ARTICULO 90º.- Las atribuciones del Senado son:

1.- Velar sobre la observancia de la Constitución y de las leyes, y sobre la conducta de


los magistrados y ciudadanos.

2.- Elegir y presentar al Poder Ejecutivo los empleados de la lista civil de la República, y
elegir los de la eclesiástica que deban nombrarse por la Nación.

3.- Convocar a Congreso Extraordinario, si fuere necesario declarar la guerra o hacer


tratados de paz, o en otras circunstancias de igual gravedad, o cuando para ello lo
excitare el Poder Ejecutivo.

4.- Convocar a Congreso Ordinario, cuando no lo hiciere el Poder Ejecutivo en el tiempo


prescrito por la Constitución.

5.- Decretar, tanto en los casos ordinarios como en los extraordinarios, que ha lugar a
formación de causa Contra el Magistrado que ejerciere el Poder Ejecutivo, sus Ministros, y
en Supremo Tribunal de Justicia.

6.- Prestar su voto consultivo al Poder Ejecutivo en los negocios graves de Gobierno, y
señaladamente en los que respetan al interés particular de los departamentos, y en los
de paz y guerra.

7.- Abrir empréstitos dentro de la República en caso necesario.

8.- Resolver en conformidad del artículo 63º.

9.- Examinar las bulas, decretos y breves pontificios para darles el pase, o decretar su
detención.

84
10.- Velar sobre la conservación y mejor arreglo de las reducciones de los Andes;
y promover la civilización y conversión de los infieles de su territorio, conforme
espíritu del Evangelio.

11º.- Hacer su respectivo Reglamento, y presentarlo para su aprobación al Congreso.

ARTICULO 91º.- El Senado no puede procesar ni por acusación, ni de oficio, sí solo poner en
conocimiento del Supremo Tribunal de Justicia cualquiera ocurrencia relativa a la conducta de
los Magistrados, sin perjuicio de la atribución 5ta. De este Capítulo.

ARTICULO 92º.- Para ser Senador se requiere:

1.- Cuarenta años de edad

2.- Ser ciudadano en Ejercicio.

3.- Haber nacido en la provincia o departamento que le elige, o estar avecindado en él


diez años antes de su elección.

4.- Tener una propiedad que exceda el valor de diez mil pesos en bienes raíces, o el goce
o renta de dos mil pesos anuales, o el ser profesor público de alguna ciencia.

5.- Gozar del concepto de una probidad incorruptible, y ser de conocida ilustración en
algún ramo de pública utilidad.

ARTICULO 93º.- De los Senadores serán por ahora precisamente seis eclesiásticos y no más.

ARTICULO 94º.- La ley reglamentaria de elecciones determinará el modo de nombrarse estos


eclesiásticos.

CAPÍTULO
VIII PODER
JUDICIARIO

ARTICULO 95º.- Reside exclusivamente el ejercicio de este Poder en los Tribunales de


Justicia y Juzgados subalternos en el orden que designen las leyes.

85
ARTICULO 96º.- No se conocen otros Jueces que los establecidos por la Constitución, ni otra
forma de juicios que la ordinaria que determinaren las leyes.

ARTICULO 97º.- Los Jueces son inamovibles, y de por vida, si su conducta no da motivo
para lo contrario conforme a la ley.

ARTICULO 98º.- Habrá una Suprema Corte de Justicia que residirá en la capital de la
República, compuesta por un Presidente, ocho Vocales, y dos Fiscales, divididos en las Salas
convenientes.

ARTICULO 99º.- Para ser individuo de la Suprema Corte de Justicia se requiere:

1.- Ser de cuarenta años.

2.- Ser ciudadano en ejercicio.

3.- Haber sido individuo de alguna de las Cortes Superiores. Y mientras éstas se organizan,
podrán serlo los abogados que hubiesen ejercicio su profesión por diez años con
reputación notoria.

ARTICULO 100º.- Corresponde a la Suprema Corte:

1.- Dirimir todas las competencias que entre sí tuvieren las Cortes Superiores, y las de
éstas con los demás Tribunales de la República.

2.- Hacer efectiva la responsabilidad del magistrado que ejerciere el Poder Ejecutivo, y de
los Ministros de Estado, cuando el Senado decretare haber lugar a formación de causa.

3.- Conocer de las causas criminales de los Ministros de Estado, y hacer efectiva la
responsabilidad de las Cortes Superiores.

4.- Conocer de todas las causas criminales que se promovieren contra los individuos de su
seno. Y si fuere necesario hacer efectiva la responsabilidad de toda ella, nombrará el
Congreso un tribunal de nueve Jueces, sacados por suerte de un número doble que
elegirá a pluralidad absoluta.

5.- Conocer en tercera instancia de la residencia de todo empleado público que esté sujeto
a ello por disposición de las leyes.

86
6.- Conocer de los recursos de nulidad que se interpongan contra las sentencias dadas
en última instancia por las Cortes Superiores, para el efecto de reponer y devolver.

7.- Oir dudas de los demás Tribunales y Juzgados sobre la inteligencia de alguna ley, y
consultar sobre ella fundadamente al Poder Legislativo.

8.- Conocer de las causas concernientes a los negocios diplomáticos y de los


contenciosos entre los Ministros, Cónsules, o Agentes Diplomáticos.

ARTICULO 101º.- Habrá en los departamentos de Lima, Trujillo, Cusco, Arequipa, y demás
que conviniese, Cortes superiores de Justicia compuestas de los Vocales y Fiscales necesarios.

ARTICULO 102º.- Son atribuciones de las Cortes Superiores:

1.- Conocer en segunda y tercera instancia de todas las causas civiles del fuero común,
hacienda pública, comercio, minería, presas y comisos.

2.- Conocer de las causas criminales, mientras se pone en observancia el juicio de jurados.

3.- Decidir las competencias suscitadas entre los Tribunales y Juzgados subalternos.

4.- conocer de los recursos de fuerza en su respectivo departamento.

ARTICULO 103º.- Para ser individuo de las Cortes Superiores es necesario:

1.- Tener treinta y cinco años de edad. 2.- Ser ciudadano en ejercicio. 3.- Haber sido
juez de derecho, o ejercido otro empleo o destino equivalente.

ARTICULO 104º.- Habrá jueces de derecho con sus juzgados respectivos en todas las provincias,
arreglándose su número en cada una de ellas, según lo exija la pronta administración de justicia.

ARTICULO 105º.- Para ser juez de derecho se requiere:

1.- Treinta años de edad.

2.- Ser ciudadano en ejercicio.

3.- Ser abogado recibido en cualquier Tribunal de la República.

87
4.- Haber ejercido la profesión cuando menos por seis años con reputación notoria.

ARTICULO 106º.- Los códigos civil y criminal prefijarán las formas judiciales. Ninguna autoridad
podrá abreviarlas, ni suspenderlas en caso alguno.

ARTICULO 107º.- En las causas criminales el juzgamiento será público, el hecho conocido y
declarado por jurados, y la ley aplicada por los Jueces.

ARTICULO 108º.- El nombramiento de Jurados, su clase, atribuciones y modo de proceder, se


designará por un reglamento particular. Entre tanto, continuarán los juicios criminales en el
orden prevenido por las leyes.

ARTICULO 109º.- Producen acción popular contra los jueces el soborno, la prevaricación, el
cohecho, la abreviación o suspensión de las formas judiciales, el procedimiento ilegal contra la
libertad personal y la seguridad de domicilio.

ARTICULO 110º.- Se administrará justicia en nombre de la Nación.

ARTICULO 111º.- Los jueces de primera instancia son responsables personalmente de su


conducta ante las Cortes Superiores, y los individuos de éstos ante la Suprema Corte de Justicia.

ARTICULO 112º.- Todas las causas civiles y criminales se fenecerán dentro del territorio de
cada Corte Superior.

ARTICULO 113º.- No se conocen más que tres instancias en los juicios.

ARTICULO 114º.- Queda abolido el recurso de injusticia


notoria.

ARTICULO 115º.- Queda abolida toda confiscación de bienes y toda pena cruel y de infamia
trascendental. El Código Criminal limitará, en cuanto sea posible, la aplicación de la pena capital
a los casos que exclusivamente la merezcan.

ARTICULO 116º.- Ninguna pena infama a otro individuo, que al que la mereció por la aplicación
de la ley.

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ARTICULO 117º.- Dentro de 24 horas se le hará saber a todo individuo, la causa de su arresto,
y cualquiera omisión en este punto se declara atentatoria de la libertad individual.

ARTICULO 118º.- Nadie puede allanar la casa de ningún peruano, y caso que lo exija fundada e
indispensablemente el orden público, se expedirá por el Poder Ejecutivo la orden conveniente
por escrito que remitirá desde luego al Juez que conozca de la causa, con la exposición de los
datos que motivaron este procedimiento para que obre en el proceso.

ARTICULO 119º.- El agente que se excediere bien en la sustancia de la orden que indica el
artículo anterior, bien en el modo de cumplirla, injuria a la autoridad y a la ley, y será castigado
a proporción del abuso.

ARTICULO 120º.- No podrá entablarse demanda alguna civil, sin haberse intentado la
conciliación ante el Juez de paz.

ARTICULO 121º.- Todas las leyes anteriores a esta Constitución, que no se opongan al sistema
de la independencia, y a los principios que aquí se establecen, quedan en su vigor y fuerza
hasta la organización de los Códigos civil, criminal, militar y de comercio.

CAPÍTULO IX

RÉGIMEN INTERIOR DE LA
REPÚBLICA

ARTICULO 122º.- El Gobierno político superior de los departamentos reside en un ciudadano


denominado Prefecto.

ARTICULO 123º.- El Gobierno político de cada provincia en un ciudadano que se denominará


Intendente.

ARTICULO 124º.- El de los distritos en un ciudadano que igualmente se nombrará en cada uno
de ellos con la denominación de Gobernador.

ARTICULO 125º.- Las atribuciones del Prefecto, Intendente y Gobernador se reducirán a


mantener el orden y seguridad pública en sus respectivos territorios, con subordinación gradual

89
al Gobierno Supremo, y a cuidar de que los funcionarios de su dependencia llenen exactamente
sus obligaciones.

ARTICULO 126º.- También les corresponde la intendencia económica sobre la Hacienda pública.

ARTICULO 127º.- Les está prohibido absolutamente todo conocimiento judicial, pero si la
tranquilidad pública exigiere fundadamente la aprehensión de algún individuo podrán ordenarla
desde luego, poniendo al preso dentro de 24 horas a disposición del Juez y remitiéndole los
antecedentes.

ARTICULO 128º.- Esta disposición tendrá lugar, cuando el tiempo y las circunstancias no
permitieren de algún modo poner en noticia del Juez la necesidad de la aprehensión.

ARTICULO 129º.- Cualquier exceso del Prefecto, Intendente, o Gobernador en el ejercicio de su


empleo, relativo a la seguridad individual, o a la del domicilio, produce acción popular.

ARTICULO 130º.- La duración de los jefes que indica este capítulo será de cuatro años
improrrogables, pudiendo ser removidos antes si así lo exigiere su conducta, según las leyes.

ARTICULO 131º.- Para ser Prefecto, Intendente, o Gobernador se requiere:

1.- Ser ciudadano en ejercicio.

2.- Tener treinta años de edad.

3º.- Probidad notoria.

ARTICULO 132º.- En la capital de cada departamento habrá una Junta departamental,


compuesta de un vocal por cada provincia, elegido en la misma forma que los Diputados.

ARTICULO 133º.- Esta Junta es el Consejo del Prefecto, que la presidirá, y pedirá dictamen en los
negocios graves.

ARTICULO 134º.- Se renovará cada dos años por mitad, designando en la primera vez la suerte
los vocales que cesaren.

ARTICULO 135º.- Son atribuciones de esta Junta:

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1.- Inspeccionar la conducta de las Municipalidades e informar al Senado de lo que
hubiere hecho con arreglo a sus atribuciones en favor de los pueblos, y lo que hubieren
dejado de hacer.

2.- Formar el censo estadístico de cada departamento, cada quinquenio, con presencia de
los datos que suministren las Municipalidades, y remitirlo al Senado.

3.- Promover todos los ramos conducentes a la prosperidad del departamento, y


señaladamente la agricultura, industria y minería.

4.- Cuidar de la instrucción pública, y de los establecimientos piadosos y de beneficencia.

5.- Velar sobre la inversión de los fondos públicos, e intervenir en la repartición de las
contribuciones que se hicieren al departamento.

6.- Proponer al Senado en terna los ciudadanos para el gobierno político de las provincias y
distritos del departamento.

7.- Remitir anualmente al Senado lista de todas las personas beneméritas en el


departamento para los empleos públicos.

8.- Informar anualmente al Senado sobre los medios y recursos oportunos para la mayor
prosperidad de las provincias, dando razón de lo que hubiere hecho conforme a sus
atribuciones, o lo que hubiere dejado de hacer.

9.- Remitir al Senado la lista de tres ciudadanos elegibles para Presidente de la República.

ARTICULO 136º.- Para ser Vocal de esta junta se requiere las mismas calidades que para
Diputado.

ARTICULO 137º.- Se elegirá el mismo número de suplentes que de propietarios en cada Junta
Departamental.

91
CAPÍTULO X
PODER
MUNICIPAL

ARTICULO 138º.- En todas las poblaciones, sea cual fuere su censo, habrá Municipalidades
compuestas del Alcalde o Alcaldes, Regidores, Síndico o Síndicos, correspondientes; en la
inteligencia de que nunca podrá haber menos de dos Regidores, ni más de diez y seis, dos
Alcaldes y dos Síndicos.

ARTICULO 139º.- La elección de estos individuos se hará por colegios Electorales de Parroquia,
renovándose la mitad cada año según el reglamento respectivo.

ARTICULO 140º.- Las atribuciones del régimen municipal depende:

1º.- De la policía de orden.

2º.- De la policía de instrucción primaria.

3º.- De la policía de beneficencia.

4º.- De la policía de salubridad y seguridad.

5º.- De la policía de comodidad, ornato y recreo.

ARTICULO 141º.- Las Municipalidades deben además:

1º.- Repartir las contribuciones o empréstitos que se hubieren señalado a su territorio.2º.-


Formar los ordenamientos municipales del pueblo y remitirlos al Congreso para su
aprobación por medio de la Junta Departamental.

3.- Promover la agricultura, industria, minería, y cuanto produzca en razón de la


localidad al bien del pueblo.

4.- Informar anualmente a la Junta Departamental de lo que hubieren hecho en


conformidad de sus atribuciones, o de lo que hubieren dejado de hacer, indicando los
motivos.

92
ARTICULO 142º.- Los Alcaldes son los Jueces de Paz de su respectiva población. En las
poblaciones numerosas ejercerán también este oficio los Regidores.

ARTICULO 143º.- Conocerá los Jueces de Paz de las demandas verbales, civiles de menor
cuantía; y de las criminales sobre injurias leves, y delitos menores que sólo merezcan una
moderada corrección.

ARTICULO 144º.- Para ser Alcalde, Regidor o Síndico, se


requiere:

1.- Ser ciudadano en ejercicio.

2.- Tener veinticinco años de edad.

3.- Ser natural del pueblo, o tener diez años de vecindad próximamente antes de su
elección.

4.- Tener probidad notoria.

ARTICULO 145º.- Ningún empleado de Hacienda puede ser admitido a los empleos
municipales. ARTICULO 146º.- Ningún ciudadano podrá excusarse de estas cargas.

ARTICULO 147º.- Toda Municipalidad tendrá un Secretario y un Tesorero elegidos a


pluralidad absoluta y con asignación deducida de los propios del común.

SECCIÓN TERCERA DE LOS MEDIOS DE CONSERVAR EL GOBIERNO

CAPÍTULO I

HACIENDA PÚBLICA

ARTICULO 148º.- Constituyen la Hacienda Pública todas las rentas y productos que
conforme a la Constitución y a las leyes deban corresponder al Estado.

ARTICULO 149º.- El Presupuesto de los gastos públicos fijará las contribuciones ordinarias,
mientras se establece la única contribución. Adoptándose por regla constante al acrecer la
Hacienda por el fomento de ramos productivos a fin de disminuir las imposiciones en cuanto
sea posible.

93
ARTICULO 150º.- La administración general de la Hacienda pertenece al Ministerio de ella.

ARTICULO 151º.- Este presentará anualmente al Gobierno, para que lo haga el Congreso:

1.- Los planes orgánicos de la Hacienda en general, y de sus oficinas en particular.

2.- El Presupuesto de los gastos precisos para el servicio de la República.

3.- El plan de contribuciones ordinarias para cubrirlos.

4.- El de las contribuciones extraordinarias para satisfacer los empréstitos


nacionales, y sus réditos correspondientes.

ARTICULO 152º.- Habrá en la capital de la República una Contaduría General con un Jefe y los
empleados necesarios. En ella deberán examinarse, glosarse y fenecerse las cuentas de todos
los productos en inversiones de la Hacienda.

ARTICULO 153º.- Habrá también en la capital de la República una Tesorería General, compuesta
de un Contador, un Tesorero, y los empleados correspondientes. Se reunirán en ella todos
los productos de la Hacienda.

ARTICULO 154º.- Una ley reglamentaria de Hacienda ordenará todas estas oficinas, y las demás
dependencias que sean necesarias en este ramo, fijando las atribuciones, escala, número y
responsabilidad de los empleados, y el modo de rendir y liquidar las cuentas.

ARTICULO 155º.- Quedan abolidos los estancos en el territorio de la República.

ARTICULO 156º.- Las aduana se situarán en los puertos de mar y en las fronteras, en cuanto
sea compatible con la recta administración, con el interés del Estado, y del servicio público.
ARTICULO 158º.- Se establecerá en la capital de la República un Banco General de rescate de
oro y plata, y habilitación de minas.

ARTICULO 159º.- Se establecerán Bancos de rescate en los principales asientos de minas, a fin
de auxiliar a los mineros, y facilitarles la pronta explotación y beneficio de metales.

ARTICULO 160º.- Un reglamento particular determinará todo lo conducente a estos


establecimientos.

94
ARTICULO 161º.- La Nación reconoce la deuda pública, y su pago depende del honor nacional;
para cuyo fin decretará el Congreso cuanto estime necesario a la dirección de este
importantísimo negocio.

ARTICULO 162º.- Las contribuciones se repartirán bajo regla de igualdad y proporción, sin
ninguna excepción, ni privilegio.

ARTICULO 163º.- Las asignaciones de los funcionarios de la República son de cuenta de la


Hacienda; cuyo arreglo se hará por un decreto particular, con concepto a la representación y
circunstancias de los empleos o destinos.

CAPÍTULO II
FUERZA
ARMADA

ARTÍCULO 164º.- La defensa y seguridad de las República demanda una fuerza armada
permanente.

ARTICULO 165º.- Constituyen la fuerza armada de tierra: el Ejército de línea, la Milicia Cívica,
y la Guardia de Policía.

ARTICULO 166º.- El destino del Ejército de línea es defender la seguridad exterior de las
República, y se empleará donde ésta pueda ser amenazada.

ARTICULO 167º.- Para emplearla en el caso de alguna revolución declarada en el interior de la


República, procederá el acuerdo del Congreso, y en su receso el del Senado.

ARTICULO 168º.- La Milicia Cívica servirá para mantener la seguridad pública entre los límites de
cada provincia.

ARTICULO 169º.- No podrá traspasar estos límites sino en el caso de alguna revolución entre
otras provincias dentro o fuera del departamento, o en el de invasión.

ARTICULO 170º.- En estos casos procederá el acuerdo del Congreso, y en su receso el del
Senado.

95
ARTICULO 171º.- El objeto de la Guardia de Policía es proteger la seguridad privada, purgando
los caminos de malhechores, y persiguiendo a los delincuentes con sujeción a las órdenes de la
autoridad respectiva.

ARTICULO 172º.- No puede destinarse esta Guardia a otro servicio, si no es en los casos de
revolución declarada, o de invasión; para lo que precederá el acuerdo del Congreso, y en su
receso el del Senado.

ARTICULO 173º.- El Congreso fijará anualmente el número de tropas necesarias en el Ejército de


línea, y el modo de levantar las que fueren más convenientes.

ARTICULO 174º.- Las ordenanzas que prefijare el Congreso, determinarán todo lo relativo a las
organización de estos cuerpos, la escala militar, disciplina y arreglo económico del Ejército.

ARTICULO 175º.- La enseñanza e instrucción del Ejército y Armada dependen de la educación


que se dará en las escuelas o colegios militares que deberán establecerse.

ARTICULO 176º.- La Milicia Cívica se organizará en todas las provincias, según su población
y circunstancias.

ARTICULO 177º.- Se creará una Guardia de Policía en todos los departamentos que la exijan
conforme a sus necesidades.

ARTICULO 178º.- El Congreso fijará anualmente el número de buques de la Marina Militar que
deban conservarse armados.

ARTICULO 179º.- Todo militar no es más que un ciudadano armado en defensa de la República.
Y así como esta circunstancia le recomienda de una manera particular para las recompensas de
la Patria, el abuso de ella contra la libertad le hará execrable a los ojos de la Nación y de cada
ciudadano.

ARTICULO 180º.- Ningún peruano podrá excusarse del servicio militar, según y como fuere
llamado por la ley.

96
CAPÍTULO III
EDUCACIÓN
PÚBLICA

ARTICULO 181º.- La instrucción es una necesidad común y la República la debe igualmente a


todos sus individuos.

ARTICULO 182º.- La Constitución garantiza este derecho:

1.- Por los establecimientos de enseñanza primaria, de ciencias, literatura y artes.

2.- Por premios que se concedan a la dedicación, y progresos distinguidos.3.- Por institutos
científicos, cuyos miembros gocen de dotaciones vitalicias competentes.

4.- Por el ejercicio libre de la imprenta que arreglará una ley particular.

5.- Por la inviolabilidad de las propiedades intelectuales.

ARTICULO 183º.- La instrucción pública depende en todos sus ramos de los planes y
reglamentos generales que decretare el Congreso.

ARTICULO 184º.- Todas las poblaciones de la República tienen derecho a los establecimientos
de instrucción que sean adaptables a sus circunstancias. No puede dejar de haber Universidades
en las capitales de departamento, ni escuelas de instrucción primaria en los lugares más
pequeños; la que comprenderá también el catecismo de la Religión Católica y una breve
exposición de las obligaciones morales y civiles.

ARTICULO 185º.- Se establecerá una Dirección General de Estudios en la capital de la República,


compuestas de personas de conocida instrucción, a cuyo cargo estará bajo la autoridad del
Gobierno, y protección especial del Senado, la inspección de la instrucción pública.

97
CAPÍTULO IV
OBSERVANCIA DE LA
CONSTIRUCIÓN

ARTICULO 186º.- El primer cuidado del Congreso, luego después de la apertura de sus
sesiones, será examinar las infracciones de la Constitución que no se hubieren remediado, a fin
de decretar lo necesario para que se haga efectiva la responsabilidad de los infractores.

ARTICULO 187º.- Todo peruano debe reclamar ante el Congreso, ante el Poder Ejecutivo, o ante
el Senado la observancia de la Constitución, y representar fundadamente las infracciones que
notare.

ARTICULO 188º.- Todo funcionario público, de cualquier fuero que sea, al tomar posesión de su
cargo, ratificará el juramento de fidelidad a la Constitución, prometiendo bajo de él cumplir
debidamente sus obligaciones respectivamente.

ARTICULO 189º.- El Presidente de la república jurará ante el Congreso, como asimismo el de


la Suprema Corte de Justicia, y el del Senado; los Obispos jurarán en presencia de sus respectivos
Cabildos.

ARTICULO 190º.- Todos los demás empleados jurarán ante las autoridades correspondientes
según el departamento a que pertenecieren.

ARTICULO 191º.- Esta Constitución queda sujeta a la ratificación o reforma de un Congreso


General compuesto de los Diputados de todas las provincias actualmente libres, y de todas las
que fueren desocupadas por el enemigo, concluida que sea la guerra.

ARTICULO 192º.- Para la ratificación o reforma que indica el artículo anterior, deberán
contener los poderes de los diputados, cláusula especial que los autorice para ello.

98
CAPÍTULO V
GARANTÍAS
CONSTITUCIONALES

ARTICULO 193º.- Sin embargo de estar consignados los derechos sociales e individuales de los
peruanos en la organización de esta ley fundamental se declaran inviolables:

1.- La libertad civil

2.- La seguridad personal y la del domicilio

3.- La propiedad

4.- El secreto de las cartas

5.- El derecho individual de presentar peticiones o recursos al Congreso o al Gobierno.

6.- La buena opinión, o fama del individuo, mientras no se le declare delincuente conforme
a las leyes.

7.- La libertad de imprenta en conformidad de la ley que la arregle

8.- La libertad de la agricultura, industria, comercio y minería, conforme a las leyes.

9.- La igualdad ante la ley, ya premie, ya castigue.

ARTICULO 194º.- Todos los peruanos pueden reclamar el uso y ejercicio de estos derechos, y
es un deber de las autoridades respetarlos y hacerlos guardar religiosamente por todos los
medios que estén en las esfera de las atribuciones de cada una de ellas.

Dada en la Sala de Sesiones, en Lima, a 12 de Noviembre del año del Señor de 1823.- 4º de la
Independencia y 2º de la República.

Por tanto: Mandamos a todos los peruanos, individuos de la República, de cualquier clase
y condición que sean, que hayan y guarden la Constitución inserta, como ley fundamental
de la República, y mandamos asimismo a todos los Tribunales, Justicias, Jefes, Gobernadores
y demás autoridades así civiles como militares y eclesiásticas de cualquiera clase y dignidad,
que la guarden hagan guardar, cumplir y ejecutar en todas sus partes.

99
El Ministro de Estado en el departamento de Gobierno y Relaciones Exteriores dispondrá lo
necesario a su cumplimiento, haciéndola imprimir, publicar y circular, de que dará cuenta.

Palacio de Gobierno, en Lima, a 12 de Noviembre de 1823.-4º.-2º. JOSÉ BERNARDO TAGLE.

100
2-A

Reglamento Provisional de 1821


(12 de febrero de 1821)

Que establece la demarcación del territorio que actualmente ocupa el Ejército Libertador del
Perú, y la forma de administración que debe regir hasta que se construya una autoridad central
por la voluntad de los pueblos libres.
Encargado de restituir á esta vasta parte del Continente Americano su existencia y sus
derechos, es un deber mio consultar sin restricción todos los medios capaces de contribuir á
aquella grande obra. Aunque la victoria hiciese una estrecha alianza con mis armas, quedaria
sin embargo un peligroso vacio en los empeños que he contraido, si no me anticipasé á
preparar los elementos de la reforma universal, que ni es posible perfeccionar en un dia, ni es
justo diferir enteramente bajo ningun pretexto.
Los sucesos mas brillantes de la guerra, y las empresas mas gloriosas del genio de los
hombres, no harian mas que excitar en los pueblos un sentimiento de admiración mezclado de
zozobra, si no entreviesen por término de todas ellas la mejora de sus instituciones y la
indemnización de sus actuales sacrificios. Entre el escollo de una reforma prematura, y el
peligro de dejar intactos los abusos, hay un medio, cuya amplitud señalan las circunstancias
del momento, y la gran ley de la necesidad. Cualesquiera que sean las dificultades que se
presenten al adoptarlo, es preciso tener un grado de coraje superior á ellas, y hacer el bien con
firmeza y con generosidad, para iniciar la importante obra que el tiempo consolidará mas
adelante.
Sobre estos principios, y á fin de atender los diversos objetos que en el nuevo órden de cosas
hacen inevitable el cambiamiento de la administración, para no dejar en la incertidumbre y sin
sistema las autoridades, y expuestos los derechos particulares á los riesgos de una jurisdicción
indefinida, ó á la falta absoluta de recursos que suplan las formas suprimidas por la necesidad :
he resuelto establecer el siguiente Reglamento, usando de las facultades que en mi residen, y
consultando el derecho que tienen los pueblos al establecimiento de aquellas reglas de que
penden el órden y la seguridad general, el cual debe emanar en todas circunstancias de la
suprema autoridad que existe de hecho, aun prescindiendo del derecho en que se funde: por
tanto, y con la expresa calidad de provisorio, movido del interes público, y autorizado por esa
imperiosa ley, que solo deja elección en los medios, y no en su objeto, declaro y establezco lo
siguiente:

1. El territorio que actualmente se halla bajo la protección del Ejército Libertador, se dividirá en

101
cuatro departamentos, comprendidos en estos términos: los partidos del Cercado de Trujillo,
Lambayeque, Piura, Cajamarca, Huamachuco, Pataz y Chachapoyas, formarán el
departamento de Trujillo con las doctrinas de su dependencia: los de Tarma, Jauja, Huancayo y
Pasco, formarán el departamento de Huaylas, Cajatambo, Conchucos, Huamalies y Huanuco,
formarán el departamento denominado de la Costa.

2. En cada seccion de estas, habrá un presidente de departamento: la residencia de los dos


primeros será en Trujillo, y Tarma; la del tercero en Huaras, y la del cuarto en Huaura.

3. Los jefes de partido que ántes se denominaban sub-delegados, se llamarán gobernadores, y


ejercerán las mismas funciones de aquellos: en los pueblos de cada partido habrá un teniente
gobernador que recibirá inmediatamente las órdenes del gobernador del partido y este del
presidente del departamento.

4. Sus atribuciones serán las siguientes. Podrá proponer la creacion de nuevos cuerpos de
milicias, arreglar su economía interior, y hacer las propuestas de oficiales á la capitania
general.

5. Conocerá en todas las causas civiles y criminales que por derecho correspondian á los
gobernadores intendentes en los mismos términos que hasta aqui, consultando el dictámen del
asesor del departamento en los casos prevenidos por las leyes, y remitiéndolas para su
aprobacion al capitan general.

6. Conocerá exclusivamente en las causas de Hacienda, sujetándose al dictamen de su asesor


en los asuntos contenciosos.

7. En cada departamento habrá un agente fiscal con quien de entenderán las instancias en que
se interese el Erario público: tambien será de su resorte el promover la prosperidad y aumento
de este ramo, y vigilar sobre la conducta de los empleados, entablar acciones contra ellos en
caso necesario, é informar sobre las medidas que convenga tomar para el aumento y
conservación de la riqueza pública.
8. De las sentencias pronunciadas por los presidentes de los departamentos en los asuntos
contenciosos de Hacienda, habrá un grado de apelación al tribunal que se indicará luego.

9. En las causas civiles y criminales entre partes del fuero comun, se observarán sin alteración
las leyes y ordenanzas del Perú, con la sola diferencia de que los recursos que ántes se
dirigian á los llamados intendentes y subdelegados, se harán en lo sucesivo á los presidentes
de los departamentos y gobernadores de los partidos.

10. Se establecerá una Cámara de Apelaciones en el departamento de Trujillo, compuesta de


un presidente, dos vocales y un fiscal, que permanecerán en sus destinos miéntras duren sus
buenos servicios: en los actos oficiales tendrá el tratamiento de Excelencia.

102
11. Luego que se instale este tribunal, formará el reglamento para su método interior, que me
remitirá para su aprobación, y propondrá los demas empleados subalternos que considere
absolutamente necesarios para la expedición de los negocios.

12. Sus atribuciones serán las siguientes: Conocerá en todas las causas y casos que ántes
conocian las denominadas audiencias, con la sola restriccion de no entender en las causas de
mayor cuantia, reputándose por tal la que pase del valor de quince mil pesos, cuyo
conocimiento se reserva á los tribunales que establezca el gobierno central que se forme en el
Perú.

13. Las alzadas en las causas de Hacienda se llevarán de todos los departamentos á la junta
superior de Hacienda, compuesta de la Cámara de Apelaciones, y dos ministros del Tesoro
público: el fiscal de la cámara llenará las mismas funciones que hasta aqui.

14. Los recursos conocidos en el derecho por de injusticia notoria, se interpondrán á la


Capitania general, en atención á las circunstancias, y se decidirán por las leyes existentes con
dictámen del auditor general.

15. Por regla general se establece que miéntras duren las actuales circunstancias, todas las
causas de infidencia, traición, espionaje, o atentando contra el órden autoridades constituidas,
serán ptivativamente del conocimiento de la Capitania General, á cuya disposición deberán
remitirse los reos, con las correspondientes sumarias formadas por el juez del distrito para su
decisión, conforme á las leyes.

16. El derecho del patronato queda reasumido en la Capitania general, y el de vice-patronato


en los presidentes de los departamentos.

17. La jurisdiccion eclesiástica se administrará como hasta aqui, con estricta sujecion al
derecho comun canónico.

18. Todas las leyes, ordenanzas y reglamentos que no estén en oposicion con los principios de
libertad é independencia proclamados, con los decretos expedidos desde el 8 de Setiembre
anterior, y con lo establecido en el presente, quedan en su fuerza y vigor, miéntras no sean
derogados, ó abrogados por autoridad competente.

19. Todos los funcionarios públicos serán responsables á un juicio de residencia, que se
seguirá por una comision especial nombrada al efecto por la Capitania general en los casos de
gravedad y trascendencia.

20. Por un decreto particular se establecerán los sueldos que deban gozar todos los empleados
de nueva creacion, y los distintivos correspondientes al rango de los magistrados de un pueblo
libre.

103
Dado en el cuartel general de Huaura á 12 de Febrero de 1821.- 2o. de la libertad del Perú, y
4o. aniversario de la batalla de Chacabuco. JOSE DE SAN MARTÍN.- BERNARDO
MONTEAGUDO, secretario de Guerra y Marina.- JUAN GARCÍA DEL RÍO, secretario de
Gobierno y Hacienda.

104
3-A

Estatuto Provisional de
1821
(8 de Octubre de 1821)

Dado por el Protector de la Libertad del Perú, para el mejor régimen de los departamentos
libres, interín se establece la Constitución permanente del Estado. Al reasumir en mí el mando
supremo bajo el título de Protector del Perú, mi pensamiento ha sido dejar puestas las bases
sobre qué deben edificar los que sean llamados al sublime destino de hacer felices a los
pueblos. Me he encargado de toda la autoridad para responder de ella a la Nación entera, he
declarado con franqueza mis designios, para que se juzgue de ellos según los resultados: y de
los campos de batalla donde he buscado la gloria de destruir la opresión, unido a mis
compañeros de armas, he venido a ponerme al frente de una administración difícil y de vasta
responsabilidad. En el fondo de mi conciencia están escritos los motivos de la resolución que
adopté el 4 de agosto, y el Estatuto que voy a jurar en este día, los explica y sanciona a un
mismo tiempo.

Yo habría podido encarecer la liberalidad de mis principios en el Estatuto Provisorio, haciendo


magníficas declaraciones sobre los derechos del pueblo, y aumentando la lista de los
funcionarios públicos para dar un aparato de mayor popularidad a las formas actuales. Pero
convencido de que la sobreabundancia de máxima laudable, no es la principio el mejor medio
para establecerlas, me he limitado a las ideas prácticas que pueden y deben realizarse.

Mientras existan enemigos en el país, y hasta que el pueblo forme las primeras nociones del
gobierno de sí mismo, yo administraré el Poder directivo del Estado, cuyas atribuciones, sin ser
las mismas, son análogas a las del Poder Legislativo y Ejecutivo. Pero me abstendré de
mezclarme jamás en el solemne ejercicio de las funciones judiciarias, porque su independencia
es la única y verdadera salvaguardia de la libertad del pueblo; y nada importa que se ostenten
máximas exquisitamente filantrópicas cuando el que hace la ley o la ejecuta, es también el que
la aplica.

Antes de exigir de los pueblos el juramento de obediencia, yo voy a hacer a la faz de todos el
de observar y cumplir el Estatuto que doy por garante de mis intenciones. Los que con la

105
experiencia de lo pasado mediten sobre la situación presente, y estén más en el hábito de
analizar el influjo de las medidas administrativas, encontrarán en la sencillez de los principios
que he adoptado, la prueba de que yo no ofrezco más de lo que juzgo conveniente cumplir; que
mi objeto es hacer el bien y no frustrarlo, y que conociendo en fin la extensión de mi
responsabilidad, he procurado nivelar mis deberes por la ley de las circunstancias, para no
exponerme a faltar a ellos.

Con tales sentimientos, y fiado en la eficaz cooperación de todos mis conciudadanos, me


atrevo a esperar que podré en tiempo devolver el depósito, de que me he encargado, con la
conciencia de haberlo mantenido fielmente. Si después de liberar al Perú de sus opresores,
puedo dejarlo en la posesión de su destino, yo iré a buscar en la vida privada mi última
felicidad, y consagraré el resto de mis días a contemplar la beneficencia del grande Hacedor
del universo, y renovar mis votos por la continuación de su propio influjo sobre la suerte de las
generaciones venideras.

SECCIÓN PRIMERA
Art. 1o.- La Religión Católica, Apostólica, Romana, es la Religión del Estado: El Gobierno
reconoce como uno de sus primeros deberes el mantenerla y conservarla por todos los medios
que estén al alcance de la prudencia humana. Cualquiera que ataque en público o
privadamente sus dogmas y principios, será castigado con severidad a proporción del
escándalo que hubiese dado. Art. 2o.- Los demás que profesen la Religión Cristiana, y
disientan en algunos principios de la Religión del Estado, podrán obtener permiso del Gobierno
con consulta de su Consejo de Estado, para usar el derecho que les compete, siempre que su
conducta no sea trascendental al orden público.

Art. 3o.- Nadie podrá ser funcionario público ni no profesa la Religión del Estado.

SECCIÓN SEGUNDA
Art. 1o.- La suprema potestad directiva de los departamentos libres del Estado del Perú, reside
ahora en el Protector; sus facultades emanan del imperio de la necesidad, de la fuerza de la
razón y de la exigencia del bien público.

Art. 2o.- El Protector del Perú es el Generalísimo de las fuerzas de mar y tierra, y siendo su
principal deber libertar a todos los pueblos que son parte integrante del territorio del Estado, él
podrá aumentar o disminuir la fuerza armada como juzgue conveniente.

Art. 3o.- Podrá imponer contribuciones, establecer derechos y exigir empréstitos para subvenir
a los gastos públicos con consulta de su Consejo de Estado.

Art. 4o.- Formará reglamentos para el mejor servicio y organización de las fuerzas navales y
terrestres, comprendiendo en ellos la milicia del Estado.

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Art. 5o.- Arreglará el comercio interior y exterior conforme a los principios liberales de que
esencialmente depende la prosperidad del país.

Art. 6o.- Hará las reformas que juzgue necesarias en todos los departamentos de la
administración pública, aboliendo los empleos que existían en el régimen antiguo, o creando
otros nuevos.

Art. 7o.- Establecerá el cuño provisional del Estado, pero no alterará el peso y ley, que ha
tenido hasta el presente la moneda del Perú.

Art. 8o.- Nombrará los enviados y cónsules cerca de las cortes extranjeras y promoverá el
reconocimiento de la independencia del Perú, ajustando tratados diplomáticos o comerciales
que sean conformes a los intereses del país, todo con consulta de su Consejo de estado.

Art. 9o.- Tendrá el tratamiento de Excelencia, el que no podrá darse a ningún otro individuo o
corporación, exceptuando lo que se indicará luego, por exigirlo así la dignidad del gobierno.
Todos los que antes tenían el tratamiento de Excelencia, tendrán en adelante el de Usía
Ilustrísima.

SECCIÓN TERCERA
Art. 1o.- Los Ministros de Estado son los jefes inmediatos en su respectivo departamento, de
todas las autoridades que dependen de cada uno de ellos.

Art. 2o.- Expedirán todas las órdenes y dirigirán las comunicaciones oficiales a nombre del
Protector, dentro y fuera del territorio del Estado bajo su responsabilidad y única firma,
debiendo quedar rubricado el acuerdo de unas y otras por el Protector, en el libro
correspondiente a cada Ministerio.

Art. 3o.- Las órdenes y reglamentos que diese el Protector para la reforma de la
administración, irán firmadas por él, y por el ministerio a quien corresponda.

Art. 4o.- En las comunicaciones con los gobiernos extranjeros se dirigirán al ministerio a quien
competan, guardando la misma regla respecto del que la remita.

Art. 5o.- Todas comunicaciones oficiales se harán directamente a los Ministros, observando la
clasificación de los negocios sobre los que se versan.

Art. 6o.- El tratamiento de los Ministros será el de la Usía Ilustrísima, con el dictado de
Ilustrísimo señor.

SECCIÓN CUARTA
Art. 1o.- Habrá un Consejo de Estado compuesto de doce individuos a saber: Los tres

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Ministros de Estado, el Presidente de la Alta Cámara de Justicia, el General en Jefe del Ejército
unido, el jefe del E.M.G. del Perú, el Teniente General Conde de Valle- Oselle, el Dean de esta
Santa Iglesia, el Mariscal de campo Marqués de Torre-Tagle, el Conde de la Vega y el Conde
de Torre-Velarde. La vacante que queda se llenará en lo sucesivo.

Art. 2o.- sus funciones serán las siguientes: dar su dictamen al Gobierno en los casos de difícil
deliberación, examinar los grandes planes de reforma que tuviese en contemplación el
Protector, hacer sobre ellos las observaciones que mejor consulten el bien público, y proponer
las observaciones que mejor consulten el bien público, y proponer los que sean ventajosos a la
prosperidad del país.

Art. 3o.- El Consejo de Estado tendrá sus sesiones en Palacio: a ellas asistirá, cuando
convenga, el Protector para resolver, después de consultar y discutir sobre las arduas
deliberaciones.

Art. 4o.- El Consejo de Estado nombrará un secretario sin voto, quien extenderá las actas que
celebre, y se encargará de redactar los proyectos que forme según el artículo 2o.

Art. 5o.- El Consejo se reunirá siempre que la necesidad lo exija, y la urgencia de los negocios
será la regla que siga para aumentar o disminuir sus sesiones.

Art. 6o.- El Consejo de Estado tendrá el tratamiento de Excelencia.

SECCIÓN QUINTA
Art. 1o.- Los Presidentes de los departamentos son los ejecutores inmediatos de las órdenes
del Gobierno en cada uno de ellos.

Art. 2o.- Sus atribuciones especiales son: administrar el gobierno económico del
departamento, y aumentar la milicia en caso de necesidad hasta donde lo juzgue conveniente,
con anuencia del inspector general de cívicos; promover la prosperidad de la hacienda del
Estado, celando escrupulosamente la conducta de los empleados en este importante ramo, y
proponiendo al Gobierno mejoras o reformas de que él sean susceptible según las
circunstancias locales de cada departamento. Cuidar que la justicia se administre
imparcialmente, y que todos los funcionarios públicos inferiores a ellos, cumplan los deberes de
que se hallen encargados, corrigiendo a los infractores, y dando cuenta de ello al Gobierno.

Art. 3o.- Los Presidentes son los jueces de policía en los departamentos, y como tales velarán
sobre la observancia de la moral pública, sobre los establecimientos de primeras letras y su
progreso, y sobre todo lo que tenga relación con el adelantamiento de los pueblos y sanidad de
sus habitantes.

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Art. 4o.- Quedan sancionados los artículos 5, 6 y 9 del Reglamento Provisional de Huaura del
12 de febrero de este año, relativos a las facultades de los Presidentes de los departamentos.

SECCIÓN SEXTA
Art. 1o.- Las Municipalidades subsistirán en las mismas formas que hasta aquí, y serán
presididas por el Presidente del departamento.

Art. 2o.- Las elecciones de los miembros del cuerpo municipal desde el año venidero, se harán
popularmente, conforme al Reglamento que se dará por separado.

Art. 3o.- El tratamiento de la Municipalidad de la capital será el de V.S.I., y el de todas las


demás del Estado el de V.E.

SECCIÓN SÉPTIMA
Art. 1o.- El Poder Judiciario se administrará por la Alta Cámara de Justicia, y demás juzgados
subalternos que por ahora existen o que en lo sucesivo se establezcan.

Art. 2o.- A la Alta Cámara de Justicia corresponden las mismas atribuciones que antes tenían
las denominadas Audiencias, y a más conocerá por ahora de las causas civiles y criminales de
los cónsules y enviados extranjeros, y de los funcionarios públicos que delincan en el ejercicio
de su autoridad. También se extiende por ahora su jurisdicción a conocer sobre las presas que
se hicieren por los buques de guerra del estado, o por los que obtuvieren patentes de corso,
conforme a la ley de las naciones. Las funciones del Tribunal de Minería quedan del mismo
modo reasumidas en la Alta Cámara.

Art. 3o.- La Alta Cámara nombrará una comisión compuesta de individuos de su propio seno, y
de otros jurisconsultos que se distingan por su probidad y luces, para formar inmediatamente
un reglamento de administración de Justicia que simplifique la de todos los juzgados inferiores,
que tenga por base la igualdad ante la ley de que gozan todos los ciudadanos, la abolición de
los derechos que percibían los jueces y que desde ahora quedan terminantemente prohibidos.
La misma comisión presentará un reglamento para la sustanciación del juicio de presas. Art.
4o.- Los miembros de la Alta Cámara permanecerán en sus destinos mientras dure su buena
conducta. El tratamiento de la Cámara será el de V.S.I.

SECCIÓN OCTAVA
Art. 1o.- Todo ciudadano tiene igual derecho a conservar y defender su honor, su libertad, su
seguridad, su propiedad y su existencia y no podrá ser privado de ninguno de estos derechos,
sino por el pronunciamiento de la autoridad competente, dado conforme a las leyes. El que
fuese defraudado en ellos injustamente, podrá reclamar ante el Gobierno de esta infracción, y
publicar libremente por la imprenta el procedimiento que dé lugar a su queja.

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Art. 2o.- La casa de un ciudadano es un sagrado, que nadie podrá allanar sin una orden
expresa del Gobierno, dada con conocimiento de causa. Cuando falte aquella condición, la
resistencia es un derecho que legítima los actos que emanen de ella. En los demás
departamentos, será privativo a los Presidentes el dar los allanamientos indicados; y solo en
los casos de traición o subversión del orden, podrá darlo los Gobernadores y Tenientes
Gobernadores.

Art. 3o.- Por traición se entiende toda maquinación en favor de los enemigos de la
independencia del Perú: el crimen de sedición sólo consiste en reunir fuerza armada en
cualquier número que sean para resistir las órdenes del Gobierno, en conmover un pueblo o
parte de él con el mismo fin, y en formar asociaciones secretas contra las autoridades
legítimas: nadie será juzgado como sedicioso por las opiniones que tenga en materia política, si
no ocurre alguna de las circunstancias referidas.

Art. 4o.- Queda sancionada la libertad de imprenta bajo las reglas que se prescribirán por
separado.

SECCIÓN NOVENA
Art. 1o.- Son ciudadanos del Perú los que hayan nacido o nacerán en cualquiera de los
estados de Américas que hayan jurado la independencia de España.

Art. 2o.- Los demás extranjeros podrán ser naturalizados en el país, pero no obtendrán carta
de ciudadanos, sino en los casos que se prescriben en el Reglamento publicado el 4 del
presente, que desde luego se sanciona.

SECCIÓN ULTIMA
Art. 1o.- Quedan en su fuerza y vigor todas las leyes que regían en el Gobierno antiguo,
siempre que no estén en oposición con la independencia del país, con las formas adoptadas
por este Estatuto, y con los decretos o declaraciones que s expidan por el actual Gobierno.

Art. 2o.- El presente Estatuto regirá hasta que se declare la independencia en todo el territorio
del Perú, en cuyo caso se convocará inmediatamente un Congreso general que establezca la
Constitución permanente y forma de Gobierno que regirá en el Estado.

ARTÍCULOS ADICIONALES
Art. 1o.- Animado el Gobierno de un sentimiento de justicia y equidad, reconoce todas las
deudas del Gobierno Español que no hayan sido contraídas para mantener la esclavitud del
Perú, y hostilizar a los demás pueblos independientes de América.

Art. 2o.- El presente Estatuto será jurado por el Protector como la base fundamental de sus
deberes, y como una garantía que da a los pueblos libres del Perú, de la franqueza de sus
miras, y en seguida todas las autoridades constituidas y ciudadanos del Estado jurarán por su

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parte obedecer al Gobierno y cumplir el estatuto Provisional del Perú. En los demás
departamentos los Presidentes jurarán ante las Municipalidades, y ante ellos lo harán todos los
empleados y demás ciudadanos. La fórmula de los juramentos que deben prestar, es la que
sigue:

JURAMENTO DEL PROTECTOR


Juro a Dios y a la Patria, y empeño mi honor, que cumpliré fielmente el Estatuto Provisional
dado por mí para el mejor régimen y dirección de los departamentos libres del Perú, ínterin se
establece la Constitución permanente del Estado, que defenderé su independencia y libertad, y
promoveré su felicidad por cuantos medios estén a mi alcance.

JURAMENTO DE LOS MINISTROS DE ESTADO


Juramos cumplir y hacer cumplir el estatuto Provisional del Perú, y desempeñar con todo el
celo y rectitud que exige el servicio público, los deberes que nos imponen el Ministerio de que
nos hallamos encargados.

JURAMENTO DE LOS FUNCIONARIOS PÚBLICOS Y DEMÁS CIUDADANOS


Juro a dios y a la Patria reconocer y obedecer en todo al Gobierno Protectoral, cumplir y hacer
cumplir en la parte que me toca el Estatuto Provisional de los departamentos libres del Perú,
defender su independencia y promover con celo su prosperidad.

Dado en el Palacio Protectoral de Lima, a 8 de octubre de 1821. José de San Martín.- Juan
García del Río.- Bernardo Monteagudo.-Hipólito Unanue.

111
A-4

PRIMER CONGRESO CONSTITUYENTE DEL PERÚ

112
CONGRESO DE LA REPÚBLICA DEL PERÚ

LUIS ANTONIO EGUIGUREN, PRIMER PRESIDENTE DEL CONGRESO


CONSTITUYENTE DE 1931.

113
INTEGRÓ EL PRIMER CONGRESO CONSTITUYENTE. FUE MINISTRO DE
RELACIONES EXTERIORES Y PRESIDENTE DE LA CORTE SUPREMA,
ENTRE OTROS CARGOS.

JOSÉ BERNARDO DE TAGLE.

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