El sacristn... debe disponer con toda diligencia los libros para la proclamacin de la Palabra de Dios y para las oraciones que hay que decir, las vestiduras y todas las dems cosas necesarias para la celebracin. Debe vigilar los toques de las campanas para las sagradas celebraciones. Cuide que se guarde silencio y modestia en la sacrista... Las cosas necesarias para la liturgia recibidas del pasado no deben ser descuidadas sino conservadas en condiciones ptimas. Lo nuevo que se deba adquirir, que sea elegido segn los preceptos del arte contemporneo, dejando de lado el puro afn de novedad. Por lo que toca al ornato del lugar de las celebraciones sagradas hay que cuidar ante todo que haya un perfecta limpieza del piso, paredes y todas las imgenes y dems objetos que se usan o se exponen. Evtense los extremos de suntuosidad o tacaera en el ornato; por el contrario, sganse las leyes de una noble sencillez, urbanidad y el verdadero arte. En las cosas que se van a usar y en el modo de disponerlas sganse el ingenio popular y la tradicin local, con tal que contribuyan a la debida reverencia y al debido honor de los edificios y ritos sagrados (SC 123). El ornato de la Iglesia sea de tal modo que exprese el amor y la reverencia a Dios, y al pueblo de Dios le sugiera el sentido propio de las fiestas y la alegra y piedad del corazn (Ceremonial de obispos 37-38).