Una vez,

Un arnés,
Una lagrima derramada,
Una idea trastornada,
Una idea creciente,
Una vida decadente,
Una señal amorosa,
Un coartada penosa,
Diversión sin pasión,
Mata y mata, mata, mata,
Lentamente al corazón,
Caza y caza, caza, caza,
Sentimientos Impuros,
Vergüenza y vergüenza, vergüenza,
Para sentirnos más humanos,
Olvidar el paso de los daños,
Y perdonar el recuento de los años,
¿Cómo pensar que esta bien?
¿Cómo saber que esta bien?
Si, miserablemente podemos alcanzar el falaz “bien”
Sin alianzas,
Sin despertar venganza,
Sin pretender alabanzas,
Sin renunciar a todas las propiedades,
A ellos no les corresponde las ciudades,
Muéranse así de burdos,
No serán mas que bultos,
Cosas obscuras,
En pensamientos adultos,
Que rozan el absurdo,
Por que juzgar a los romanos,
Gobernadores de tantos años,
Si nosotros somos más villanos,
Con mas que criaturas raras creando estupros caros,
No hay nada de radical en ellas, las palabras toman ser
Yo soy intermedio
De las cosas muertas que tienen otra vez habla
La cosa que vive del rocío,
La cosa que extingue al mirlo,
Y de absurdas marcas,
Que en este cuerpo me demuestran que se acabaron las esperanzas.