CUADO LAS LETRAS SE LEE JUTAS

LLUS RODA
Oriana Fallaci. La fuerza de la razn. Traduccin de
Jos Manuel Vidal. La Esfera de los Libros. Madrid,
2004. 314 pp. 18
Hay libros que, como ste, se tiene el deber de leer, aunque slo
sea para no decir tonteras. Sufri Europa por hacerse la sorda:
Salvemini que el 7 de mayo de 1933 habla [...] contra Hitler y
Mussolini. Iluminado por el amor a la libertad se desgaita ante
un pblico que no lo comprende (pero lo comprender en 1941
[...] Si os quedis inertes, si no nos echis una mano, antes o
despus os atacarn tambin a vosotros, deca l y lo recuerda
Fallaci, tomando en serio la yihad, en su convulsivo ensayo La
rabia y el orgullo, antes del 11M. Contra la amnesia, nos recuerda
la historia del Islam (o lo que es lo mismo, y lo razona, la del
islamismo). No se oyen voces dentro del Islam contra el
integrismo. Tampoco contra sus prcticas primitivas y salvajes:
amputacin del cltoris, lapidaciones... Hay un alumno
musulmn que se niega a hablar con su maestra porque es una
mujer. Ya no es ancdota. Como buena periodista (la verdad
siempre ha sido sacrlega y hereje y atacada por los
correligionarios), Fallaci recopila datos, hechos, documentos
objetivos a la razn y a la inteligencia. Contra la actual visin
idealizadora (romntica y decimonnica) de un islamismo extico
y inocuo. Es de mojigatos camuflar de multiculturalismo ciertos
retrocesos de la civilizacin: Golpearla slo en el cuerpo, en las
manos, en los pies. +unca en la cara, porque se ven las cicatrices
y los hematomas. Recordar que los golpes deben hacer sufrir
psicolgicamente, no slo fsicamente Y el imn de Valencia [...]
comenta: [...] es islmicamente correcto. Pegar a la mujer es un
recurso. El imn de Barcelona [...] aade: [...] se limita a
referir lo que est escrito en el Corn. Si no lo hiciese, sera un
hereje. Gracias Oriana. Tu alegato contra la barbarie admite
poca discusin. Ya no es exgena.