Sei sulla pagina 1di 15
ANALES DE DERECHO. Universidad de Murcia. Nimero 16, 1998. Pégs. 235-249 LA IGLESIA ANTE LOS CONFLICTOS MATRIMONIALES Awronto Martinez BLanco SUMARIO: |. FI conflicto y la ruptura matrimonial: 1, Su posibilidad y causes 2. Las soluciones del Derecho: separaciva, nuda y divorco. 3. Estos remedios jurigicos no resuelven totalmente el problema de las rupturas matrimoniales. 4 La indisolubilidad del matrimonio candnico § su revisién.— Il, Los divorciados casados de nuevo: |, La frecuencia de esta situacivin. 2. Consideracin sobre el divorcio civil. 3, Conseeuencias juridico canénicss para los divorciados casados de nuevo. 4, Los divorciados easados de nuevo necesitan una salidajusta en el seno de Ia Iglesia III. EI matrimonio eanénieo de los bautizados que han petdido la fe: 1, Planteamiento: «La inencidn de hacer loque hace la Iglesia», 2 Su eriticu: la necesidad de fe para los sacraments. 3. La préetica negacién del derecho humtano al matrimonio, Pasibles soluciones.— IV, EI matrimonio civil de jos bautizados: |. La realidad del matrimonio civil de los bautizados. 2 La consideracion de! matrimonio eivil de los bautizados ante fa Iglesia, Evolu- cin. 3, Las soluciones juridicas: su insuficiencia 4. Solucién teoligica: separar ‘contrat y sacramento. — V. La familia de hecho: I. Su concepto, Difereacia con Ja unign libre y con la pareja homosexual, 2. Su condena por la Iglesia. 3. Su relacin con e! matrimonio, No supone atague al mismo. 4, La repulacisn jurgiea staal de las parejas de hecho.— VI, Bvolucién en la pastoral de la Iglesia hacia las situaciones «irregulares». Disociacién de teorfa y prictica eclesiales— VI. Conclusin: renovacién ytradicion en la iglesia: «Beclesia semper reformanda, La renovacion del derecho matrimonial canénico, I. EL CONFLICTO Y LA RUPTURA MATRIMONIAL ‘Su POSIBILIDAD ¥ CAUSAS Toda relacién juridica entre los hombres, toda empresa humana esté sujeta al conflicto y a la ruptura porque el hombre es un ser complejo y desfalleciente, imperfecto, como obra nunca acabada del todo. Y si esto es asf, no es de extrafiar que surjan conflictos y rupturas en esa empresa y aventura que hombre y mujer acometen juntos cuando contraen matrimonio o inician una vida de pareja El amor y la inclinacién sexual llevan a hombre y mujer al matrimonio con animo de permanencia porque han comprobado la afinidad de sus ideas y caracteres Anales de Deresho, 16, 1998 236 ANTONIOMARTINEZ BLANCO ¥ que son capaces de complementarse para fundar una familia. Pero no pierden por ello su propia identidad, su propio caréeter, sus propias aficiones y pequefias ‘manias, y la vida en comiin, compartiéndolo todo a través de los aftos hace que necesariamente nazcan conflictos y roces, que si existe un verdadero amor y tole- raneia serdn resneltos fécilmente y la nave del matrimonio seguiré avanzando por el Proveloso mar de la vida Pero en otras ocasiones el conflicto es grave hasta el extremo de hacer imposible ka continuacién de la vida en comin y se impone como mal menor el que cada conytuge tome un rumbo distinto aunque ello resulte doloroso para uno 0 ambos cényuges y tenga repercusiones negativas en Tos hijas, No nos vamos a detener en el examen de las causas de estas nupturas irrever bles de bastantes matrimonio: hemos hecho referencia a la dificultad que en entraiia la vida conyugal: pero hay otras causas exteriores a la misma como pueden ser: la escasa preparacién humana y religiosa con que a veces se accede al matrimo- nio: la influencia de un ambiente divorcista, aireado cuando se trata de personas famosas, por los medios de comunicacién; nuestra sociedad edonista, consumista y permisiva que busca el placer ya ante toclo y rehusa todo sacrificio; causas econé- micas como el paro y las retribuciones insuficientes; la drogadiccién, etc. 2. LAS SOLUCIONES DEL DERECHO: SEPARACION, NULIDAD ¥ PIVORCIO Ante estas situaciones ,qué soluciones. qué satidas oftece el derecho? Ante todo hay que precisar que el ciudadano que por el bautismo ha entrado a formar parte de la Iglesia catdlica y se llama fiel esta sujeto a dos ordenamientos juridicos distintos, que son: e1 Derecho del Estado, fundamentalrente el Cédigo civil que es de 1888, en su modificacién de! matrimonio por Ley de 1981 que introdujo el divorcio civil: y por otro lado el Derecho de a Iglesia constituido por el Cédigo de 1983, redactado como consecuencia del Concilio Vaticano II (1962-1965). Ambos ordenamientos estén conexionados entre sf a través de un Acuerdo del Estado espaiiol con la Santa Sede, que es de 1979, en cuyo articulo V1 «el Estado reconoce los efectos civiles al matrimo- no celebrado segiin las normas del Derecho candnico». Y {cules son las soluciones jurfdicas que ofrecen ambos Derechos a las situa ciones de ruptura 0 conflicto matrimonial? Son la separacién, 1a nulidad y el divorcio o disolucién, aunque este ultimo con posibilidades muy’ fimitadas en el Derecho de la Iglesia. Y es importante saber distinguir estas tres figuras, fa separacidn supone la interrupeisn, temporal o perpetua, de la vida en comiin pero permaneciendo el vinculo mattimonial. La nulidad constata la inexistencia inicial del matrimonio, es decir, que este no existié desde el principio por falta de capacidad psicolégica para consentir 0 concurri6 un impedimento no dispensado, por vicio del consen- timiento (error, dolo, violencia 0 miedo); © por un defecto de forma, En este supuesto se declara que el vinculo matrimonial no lleg6 a surgir. En el divorcio Anales de Dececho. n° 16, 1998 LLAIIGLESIA ANTE LOS CONFLICTOS MATRIMONIALES 2x7 © disolucién hay una ruptura del vinculo que fue vilido al principio, y cesan todos los efectos del matrimonio pudiendo los cényuges, como en el caso de la nultidad, pasar a nuevas nupeias. Hay que advertir, sin embargo, que asf como el Estado espatiol admite el divorcio de todo matrimonio, el Derecho Canénico no Jo admite para el matrimonio que se llama rato y consumado, es decir, sacramental y consumado, La Iglesia parte, pues, de la indisolubilidad de! matrimonio. 3. ESTOS REMEDIOS JURIDICOS NO RESUELVEN TOTALMENTE FL PROBLEMA DE LAS RUPTU= RAS MATRIMONIALES, Para la pareja que ha visto navfragar sin retorno su matrimonio, la separacién no resuelve su problema porque le obliga a permanecer indefinidamente en esta situacién de separacién sin posibilidad de contraer nuevo matrimonio. Por el contrario, fa declaracién de nulidad, cuando es posible, por existir una causa de nulidad, sf resuelve el problema porque permite a las partes pasar a un segundo matrimonio. A estos efectos hay que decir gue son bastantes las declaraciones de rulidad que dictan los Tribunales diocesanos aunque no se trate de personajes famosos, Pero en la mayoria de las nupturas matrimoniales, de hecho nos encontramos con que el matrimonio fue valido desde el principio y no hay posibilidad alguna de declarar su nulidad, Por lo que se refiere al divorcio, si bien el Cédigo civil lo admite sea cual Fuere la forma de celebracién (canénica o civil) con relatividad facilidad para todos los supuestos (cf. art. 85 EC) por el mero cese efectivo de la convivencia conyugal durante al menos un aio ininterrumpido (art. 86, 1 C.C.), en cambio el Derecho canénico s6lo admite la disolucién del matrimonio no sacramental, o celebrado entre infieles, en virtud de los llamados privilegios paulino! y privilegio petrino®; 0 del matrimonio no consumado entre bautizados, por dispensa del Romano Pontifi Fuera de estos casos «el matrimonio rato y consumado no puede ser disuelto por ningtin poder humano, ni por ninguna causa fuera de la muerte» (c. 1141 CIC), | Privilegio paulino: E| matrimonio contra entre dos personas bautizadas se disuelve por el privilegio paulino en favor de la fe de la parte que ha recibido el bautismo por el mero hecho de que sta contraiga un nuevo matrimonio, con tal de que la parte no bautzada no quiera cohabitar pacificamente con la parte bautizada (ef. ¢. 1,143 CIC), 2 Privilegio petrino: al recibir el bautismo en la Iglesia catsliea un no bautizado que tenga simulténeamente varias mujeres tampoco bautizadas, ile resulta duro permanecer con la primera de ellas. acde quedarse con una de las otras, apartando de sf a las dems (¢. 1148); 0 también el no bbautizado, a quign una ver recibido ef hautismo, no le es posible restablecer la cohabitacién con el cconyuge por razdin de cautvidad o persecucion puede contraer nuevo matrimonio (C, 1149), 3 Disolucién de! matrimonio rato v no consumado: El matrimonio no consumado eotse bauti2a dos o entre parte hautizada y parte no bautizada puede ser disuelto con causa justa por el Ri Ponttice. a peticiéa de ambas partes © de una de elas, aunque Ia otra se oponga (¢. 1142 CIO, Anas de Derecho 0° 15, 1998 238 ANTONUO MARTINEZ BLANCO 4. La INDISOLUBILIDAD DEL MATRIMONIO CANONICO Y SU REVISION Para el Derecho y doctrina de la Iglesia, fijadas ya a partir del siglo XII, el matrimonio, todo matrimonio es indisoluble por Derecho natural: pero en el matri- monio cristiano esta propiedad de la indisolubilidad auguiere una especial firmeza por razén del sacramento (cf. ¢, 1056 CIC). Indisolubilidad como propiedad esencial de todo matrimonio que se proyecta en dos direcciones: 1) indisolubilidad intrinseca, que significa Ia imposibitidad de que las partes puedan poner fin a} vinculo matrimonial, ni de comiin acuerdo, ni por decisién unifateral; se trata de un principio de Derecho natural primario y por lo tanto inderogable; 2) indisolubilidad extrinseca, que excluye la existencia de autoridad que pueda disolver el matrimonio: es principio de Derecho natural secundario, por cuya razén puede ser dispensado por justa causa en los casos que hemos examinado, Esta indisolubilidad de todo matrimonio adquiere una especial firmeza entre cristianos por raz6n del sacramento, y la razén de ello es que ta unin de los esposos simboliza la unién de Cristo con la Iglesia, que es indestructible. EI fundamento de Ia indisolubilidad de todo matrirronio puede encontrarse en el texto evangélico de Mateo (19, 3-9) cuando los fariseos se acercan para pregun- tarle «Es licito repudiar a la mujer por cualquier causa» (Mat. 19, 3) y Jestis aprovecha la oportunidad para derogar la ley del repudio establecida por Moisés «a causa de la dureza del corazén» de los israelitas, y restablecer el matrimonio a st primitive modelo: «Por tanto. lo que Dios ha unido no lo separe el hombre» (Mat 19, 6) y «Yo os digo que quien repudia a su mujer, salvo caso de adulterio’, y se casa con otra, adiltera» (Mat. 19, 9), Los partidarios de la disolucién o divorcio del matrimonio candnico (atin rato y consumado) aducen las siguientes argumentaciones principales. J. Siet matrimonio, todo matrimonio es indisoluble por Derecho natural y las excepciones admitidas por la Iglesia para el matrimonio no sacramental 0 no consumado se fundamentan en la potestad extraordinaria del Romano Ponti- fice de ser —aparte de Jefe de la Iglesia— Vicario de Dios en la tierra para ejercer en su nombre la autoridad que Dios posee sobre todos los hombres. estén 0 no bautizados, {por qué no extender este poder vicario también al matrimonio rato y consumado, ya que ese poder de las Haves det Romano Pontifice no tiene limites en la disolucién del matrimonio, y a través de Ja historia se han ido introduciendo las excepciones que antes hemos sefialado? 4 Bs lacelebre excepcidn de Mateo que Ia Iglesia interpreta como «salvg el caso de matrimonio entre parientess, porque este es ilegitimo y no existe. pero que sii de base a una amplia discusiOn en la Iglesia primitiva, ya que se admitiria el divorcio por adulterio de la mujer en algunos eonciios provinciales, algunos Santos Padres y en la Iglesia otodoxa griega, donde subsiste en la actualidad, Anas de Derecho, a 16, 1998 LA IGLESIA ANTE LOS CONFLICTOS MATRIMONIALES 239 2 Hemos visto que el Papa puede disolver el matrimonio rato y consumado, es, decir, un verdadero matrimonio sacramental. Por lo tanto eae por su base el argumento de la sacramentalidad para hacer indisoluble el matrimonio. A ello se contraarguye que e! matrimonio sacramental no consumado simboliza la unién de Cristo con la Iglesia en el espiritu y que el matrimonio consuma- do representa la unin fisica de Cristo con la Iglesia. Pero la verdad es que no se aprecia la diferencia a estos efectos entre matrimonio no consumado y consumado, pues zqué afiade la consumacién, acto fisiolégico, al matrimo- nio sacramental para que sea absolutamente indisoluble? Por qué no podria el Papa disolver el matrimonio rato y consumado en virtud de su potestad 3. En cuanto al texto evangélico de que «no separe ef hombre te que Dios ha unido> (y prescindiendo de la excepcién mateana o «salvo en caso de admitir adulterio) no se trata de un precepto juridico (el Evangelio no es un Cédigo de Derecho Canénico, sino una doctrina moral de perfeccién), sino de un ideal ético, un ideal de perfeccién nunca alcanzable por el hombre, como la invitacién a «ser perfectos como vuestro Padre celestial es perfecto». El ‘matrimonio, todo matrimonio es tendencialmente indisoluble, porque el amor tiende a ser permanente, pero el hombre y la mujer. que son desfallecientes, fallan en el amor, fallan de hecho en esa empresa diffcil que es el matrimo- nio, {Qué hacer? {No habré que buscar una salida humana y juridica a las parejas rotas de creyentes que encuentran la oportunidad de rehacer sus vidas con otra persona, al par que proporcionan padre o madre a sus hijos si el otro cényuge se desenticnde de ellos? II, LOS DIVORCIADOS CASADOS DE NUEVO, 1. LA FRECUENCIA DE ESTA SITUACION Esta falta de salida para los cényuges bautizados que han visto naufragar su matrimonio de modo irreversible puesto que no se admite en la Iglesia la disolu- cién del matrimonio consumado hace que aquellos busquen, muy a pesar suyo si los dos o uno son buenos creyentes, la salida gue les brinda el Derecho del Estado espafiol, cuyo Cédigo civil admite la disoluci6n de matrimonio por divorcio «sea cual fuere la forma de celebracién» (art, 85 C.c.). es decir, tanto si se trata de ‘matrimonio canénico como del civil. De este modo el divorcio civil viene a paliar en la préctica los graves efectos de su falta en el Derecho Matrimonial Canénico. Pensemos que los dos 0 uno de tos ‘cOnyuges pueden ser inocentes de esa ruptura, que se produce a veces por causas objetivas como la incompatibilidad de caracteres, el paro, la pobreza, etc. Anales de Derecho,» 16,1998 240 ANTONIO MARTINEZ BLANCO Pero podemos encontramos que una de las dos partes sea la responsable de esa Tuptura (infidelidad, drogadiccién, embriaguez, malos tratos, egofsmo, etc.) y la otra resulte inocente, que soporte todas las injusticias y violencias causadas por su compart. Pensemos que se trata de una pareja joven o de edad media cuyas partes o una de ellas atin tienen la posibilidad de rehacer su vida con otra persona, encontrando la paz familiar que sur corazdn necesita, y quiz4s una ayuda econémica para su subsistencia y la de sus hijos, asi como un segundo padre para éstos, si el primero no quiere seguir ejerciendo sus funciones (c. 1055 CIC). Lo que importa ahora, de acuerdo con el principio personalista de primacia de ta persona, es el bien de los cényuges, a cuyo servicio debe estar la institucién y no la persona al servicio de la instituciGn. Porque no se hizo la persona para sabado, sino el sabado para la persona. Es hora ya, pasado mas de 30 aftos desde el Concilio Vaticano II, que se saquen todas las conclusiones implicitas en el mismo. Si se ha dicho que la Iglesia «semper reformanda», siempre esta en trance de reforma, hoy mas que nunca parece llegado el momento de una profunda reforma de su Derecho Matrimonial Canénico. ‘Anales de Detecho.o° 16,1998

Potrebbero piacerti anche