Filosofia: razon
y violencia
XVI Congreso internacional de filosoffa
‘Asociacidn Filosofica de México, AC.
Universidad Auténoma del Estado de México (UAEMex)
24al 28 de octubre, 2011
Fecuitad de Humanidades, Gudad Universtaa Toluca, Estado ce México
Galvan Salgado, Marieruz, (2011). “Interpretar ontologico: convergencia de tradiciones”, XVI
Congreso Internacional de filosofia, 824-838. Asociacién Filosofica de México.
www.afm.org.mx
J) Asociacién Filosofica de MéxicoInterpretar ontolégic
convergencia de tradiciones
Maricruz Galvan Salgado
Instituto de Investigaciones Filoséficas-Universidad Nacional Autonoma de México
La tesis central de este trabajo afirma que existe una proximidad entre la
fenomenologia hermenéutica de M. Heidegger y la filosofia de la ciencia de N. R
Hanson, ambas propuestas consideran a la interpretacién como una estructura
organizativa que se abstrae de procederes lgico-racionales. La ontologizacién de
la interpretacién realizada por Heidegger -que muestra la dimensin
hermenéutica de su fenomenologia-, encuentra su anéloga en la interpretacién
como fenémeno indiscernible de todo ver desarrollada en el planteamiento de
Hanson; este giro ontologico nos permite afirmar que la propuesta del filésofo
anglosajén se desenvuelve en una dimensién de naturaleza hermenéutica,
mostrando con ello, una convergencia de tradiciones
INTRODUCCION
En general, las tradiciones filos6ficas anglosajona y continental han desarrollado sus
planteamientos desde posiciones distintas e incluso consideradas contrapuestas; su
cada
transitar se ha realizado por rutas paralelas, permaneciendo ino aislado, sin
puentes de comunicacién, privandose de esta manera del enriquecimiento que todo
didlogo conflictivo entre tradiciones puede implicar. A pesar de este desarrollo casi
independiente, encontramos propuestas que convergen en algunos de sus
planteamientos centrales, tal es el caso de la fenomenologia hermenéutica de M.
Heidegger y la filosofia de la ciencia de N. R. Hanson. En este trabajo se sostiene que
existe una proximidad entre las propuestas citadas y que el micleo explicativo de tal
acercamiento se ubica en la nocién del interpretar como estructura organizativa que
tiene toda visi6r’. El interpretar como estructura de la visién es aquel que posibilita que
Hanson se nutre de la propuesta que en el apartado XI de las Investigaciones Filoséficas, Wittgenstein
desarrolla respecto a la nocién del ver como interpretacién. En la pégina 451 de la obra citada, se puede
leer: “De repente veo la solucién de un acertijo grafico. Donde estaban antes unas ramas est ahora una
forma humana. Mi impresién visual ha cambiado y me doy cuenta de que no sélo tiene color y forma, sino
‘organizacién’ muy determinada.-Mi impresion visual ha cambiado;-écomo era antes; cmo
lo represento mediante una copia exacta -éy acaso no es esto una buena representacién?-no
se ve ningtin cambio", es decir, Wittgenstein propone que la interpretacién como organizaci6n que
estructura a la vision puede variar aunque Ia afectacién que se tenga en Ta retina del ojo sea la misma. La
propuesta hansoniana abreva de la de Wittgenstein, de modo que la convergencia entre el interpretar
hheideggeriano y el interpretar hansoniano, tiene como origen la propuesta del Wittgenstein de las
Investigaciones Filosdficas. La convergencia Wittgenstein-Heidegger respecto al interpretar ontol6gico es
desarrollada por la autora en un escrito préximo a publicar
825algo aparezea como algo, sin él, lo que nos afecta del mundo seria un caos ininteligible;
su desenvolvimiento se realiza en una dimensién ontolégica y constituye el suelo
originario desde el cual se gesta toda clase de saber; la interpretacién intelectiva resulta
un momento derivado de este interpre
ar ontoldgico. En el presente escrito se afirma
que las propuestas de Hanson y Heidegger convergen al proponer dos tipos de
interpretacién, uno originario y de naturaleza ontologica y otro derivado, de corte
epistemolégico. El primero constituye un elemento inherente a la vision y se describe
como un tipo de estructuracién que posibilita la emergencia de los fenémenos, dicha
estructura organizativa es implementada por el que observa; este interpretar no
constituye un agregado a la vision, mas bien es parte constitutiva de la misma, de modo
que cualquier postulacién de objetos autoidentificantes queda negada y con ello también
toda epistemologia derivada del planteamiento moderno. La importancia de esta
convergencia y el impacto que en los desarrollos de ambas propuestas puede implicar no
ha sido considerada debido a la ausencia de un didlogo intertradicional. El presente
trabajo pretende aportar elementos que fomenten un acercamiento entre tradiciones. El
escrito se ha dividido en tres apartados, en el primero, se desarrolla la propuesta de
Hanson referida a la naturaleza de la observacién cientifica, en el segundo, se analiza el
paragrafo 32 de Ser y Tiempo para tematizar al interpretar como categoria ontologica y
finalmente, en las conclusiones se desbrozan los nicleos de convergencias para afirmar
que un didlogo irremediablemente tenso entre tradiciones puede ofrecer importantes
aportaciones para los desarrollos de la filosofia actual.
I
En Patrones de Descubrimiento, Hanson sostiene de manera explicita que el interpretar
constituye un fendmeno inseparable del ver; la interpretacién “se encuentra ‘alli’ en la
visién” [1977:87], y por tanto, ver e interpretar no constituyen momentos separados
como la tradicién epistemolégica ha sostenido, sino que se trata de uno y el mismo
fenomeno. La radicalidad de esta tesis se manifiesta a través de las derivaciones
epistemolégicas y ontolégicas que de ella se pueden colegir.
La vision nos dice Hanson, no representa tan s6lo un estado fisico, una excitacién
fotoquimica, como es el caso de la reaccién en la retina del ojo o la imagen que puede
826captar la lente de una cémara fotogréfica; la visién es una experiencia, son las personas
las que ven, los globos de los ojos y la lente de una c4mara no pueden ver. Para ver se
necesita algo ms que la mera recepcién en los globos oculares, para que algo aparezea
como algo debe organizarse de cierta manera, Hanson denomina a esta estructuraci6n
organizativa: interpretacién. Si no se logra estructurar de algtin modo lo que impacta a
nuestros sentidos, entonces estaremos ante una situacién ininteligible. Sélo podemos ver
Jo que se organiza a través de la interpretaci6n, por ello, ver-interpretar constituye uno y
el mismo momento. Esta afirmacién hansoniana climina la posibilidad de que el
interpretar represente una accién separada del ver; sostener una separacién entre ver €
interpretar -nos dice el autor-, ha imposibilitado que la filosofia de la ciencia acceda de
manera correcta a la naturaleza de la observacién cientifica y al mismo tiempo, ha
continuado la tradicién epistemoldgica que postula la existencia de objetos
intrinsecamente significantes para defender un realismo de corte metafisico. Si la
interpretacién es inherente a la visién y si las visiones que dos 0 mas observadores
tienen de un mismo objeto, pueden organizarse interpretativamente de modo distinto,
entonces, la afirmacién de objetos autoidentificantes resulta insostenible junto con
cualquier postulacién de un mundo independiente de la conciencia. Epistemologia y
ontologia dejan de constituir dimensiones separadas para conformar una unidad que se
define por efectos reciprocos. Conciencia y mundo no se presentan desgajados la una del
otro. He aqui uno de los micleos de la propuesta hansoniana que muestra una clara
ruptura con la tradicién epistemolégica de raigambre moderna y una proximidad a la
fenomenologia hermenéutica heideggeriana
Hanson sefiala que debemos cuidarnos de no confundir a la interpretacién que es
inherente a la vision con aquella “interpretacién” que se realiza bajo el deliberado
anilisis y discernimiento de la funci6n intelectiva, en este escrito utilizaremos el recurso
de las comillas para diferenciar a la “interpretacién” que podemos considerar derivada
de aquélla que es intrinseca al ver, el mismo Hanson distingue -aunque no siempre-
mediante comillas a una interpretacién (la epistemologica) de Ja otra: “en ningtin
sentido ordinario de la palabra ‘interpretar’ yo interpreto a la figura 1 [cubo de Necker]
de modo diferente cuando su perspectiva se invierte para mi” [1977:87]. En la
interpretacin inmanente a Ja visién uno no hace nada mas que ver: “uno no hace nada
827aparte de mirar y ver cuando esquiva bicicletas, mira a un amigo o nos damos cuenta de
3 de
que ha entrado un gato al jardin” [Hanson, 1977:94], casos paradigmatic
interpretacién no derivada lo constituyen ver qué hora es, saber en qué clave esta escrita
una pieza musical, distinguir cudndo un instrumento est desafinado, ete., sin este tipo
de interpretacién ni siquiera nos podriamos mover por el mundo, por ejemplo, si al
atravesar la calle vemos venir hacia nosotros un trailer a toda velocidad, la
interpretacién ontolégica nos obliga a saltar o a correr, pero si en lugar de ello nos
detuviéramos para deliberar de manera intelectiva si eso que viene ahi es o no un trailer,
i
muy probablemente seria la iiltima ‘interpretacién’ que podrfamos hacer que la
concluimos-.
En la “interpretacién” que se realiza ex post facto la visién, se llevan a cabo
operaciones intelectivas-argumentativas. La falta de distincién entre estos dos sentidos
del fenémeno del interpretar ha ocasionado un grave error en la historia de la filosofia:
“Bl hecho de insistir en que las diferentes reacciones ante la figura 1 (cubo de Necker]
deben descansar sobre interpretaciones hechas a partir de una experiencia visual
comuin es justamente reiterar (sin razones) que la visién de x debe ser la misma para
todos los observadores que estén mirando a x” (Hanson, 1977:87]. Es evidente que
considerar a la “interpretacién” como una accién que se realiza después de la vision y
reiterar que éste es el tinico significado de la palabra, implica asumir que en el proceso
de la observacién deben existir dos momentos separados, el primero, en donde nuestros
sentidos son afectados por los datos de la experiencia y el segundo, cuando estos datos
son interpretados de manera intelectiva. Sin embargo, “cuando la escalera se ‘invierte’ lo
hace espontaneamente. Uno no piensa en algo especial; no se piensa en absoluto. No
interpreta. Simplemente se ve ahora una escalera vista desde arriba, ahora una escalera
vista desde abajo” [Hanson, 1977:88], es decir, en la interpretacién inherente a la vision
no se piensa, no se razona, no se deduce, no se infiere, simplemente se ve, este tipo de
interpretacién nos libra de tener que identificar explicitamente cada objeto con el que
nos topamos en nuestro andar por el mundo; sin este tipo de interpretacién tal vez ni
siquiera podriamos movernos; es esta interpretacién la que nos permite caminar, correr,
besar, bailar, jugar, ete., sin la implementacién de ninguna reflexién teorética.
828Ahora bien, hemos dicho que la visién constituye una experiencia y con ello se
quiere decir que quien ve participa de alguna manera en este proceso, éacaso esta
participacién no es intelectiva? Hanson propone una segunda tesis que no es
desarrollo de la primera. Las preguntas que nos servirdn de guia para la explicitacién de
esta segunda tesis son: €Cémo se organizan las experiencias visuales? éDe dénde surge la
estructura que permite que algo aparezca como algo? La respuesta que Hanson otorga a
es
interrogantes tiene su nticleo explicativo en el conocimiento previo que quien
observa tiene sobre lo observado; la organizacién interpretativa que se realiza cuando se
ve algo, depende de las teorfas previas que el observador posee, de tal modo que la
organizacién de la visién puede ser muy distinta aun cuando se esté frente a un mismo
objeto, debido a que el conocimiento que sobre dicho objeto tienen las personas que lo
observan puede diferir de manera importante; Tycho Brahe y Johannes Kepler, por
ejemplo, ven cosas distintas a pesar de encontrarse frente al mismo amanecer, el
primero ve que el Sol inicia su ascenso diario mientras que el segundo ve que el
horizonte desciende, esta diferencia se debe a que Brahe organiza su campo visual
mediante una concepcién heliodinémica y geoestatiea y Kepler estructura su vision
desde una teoria geodindmica y helioestatica; a pesar de que las retinas de sus ojos
puedan registrar la misma imagen, lo que ellos observan son fendmenos distintos puesto
que mientras uno ve que el Sol gira alrededor de la Tierra, el otro ve que la Tierra gira
alrededor del Sol. En este ejemplo se muestra que el observar se encuentra estructurado
por el “ver que...”, éste representa la conexién entre la visién de xy los conocimientos 0
teorias previas que quien observa tiene acerca de x; para que el fenémeno aparezca, es
decir, para que lo observado tenga sentido, la visién debe ser coherente con la base de un
cuerpo de conocimientos previamente establecido y asimilado por el observador.
Tenemos entonces que la relacién entre visién y conocimiento previo se
manifiesta a través del ‘ver que...'; es precisamente este conjunto de teorfas, experiencias
y conocimientos previos lo que permite que el observador interprete de una forma y no
de otra. Por tanto, 1a visién es mas de lo que puede apreciar la retina del ojo, ver es
interpretar desde experiencias y conocimientos previamente asimilados; por eso, el
fendémeno de la interpretacién inherente a la vision no se muestra a través de una
‘idad intelectual dirigida,
acti
ino de un simple ver que se organiza interpretativamente
829desde los pre-supuestos que nos conforman ontolégicamente y que a su vez, otorgan
sentido a lo que vemos; el conocimiento previo que se tiene sobre x funciona como una
especie de contexto desde el cual se puede articular el sentido para que algo aparezca
como algo, sin este conocimiento previo, sélo se presentarfa confusién e incoherencia;
por otra parte, ver un objeto como x es ver que dicho objeto puede comportarse como
sabemos se comportan los objetos x, si no es el caso, entonces no podemos seguir viendo
al objeto como un x; ello implica que la interpretacién es corregible y por tanto,
historica.
Recapitulando lo hasta aqui escrito, tenemos que: la visién-interpretacién se
explica mediante el conocimiento y las teorias previas que se tengan sobre lo observado;
el “ver que...” permite estructurar y dar sentido a la vision, pero este “ver que...” no
constituye un agregado que se tenga que sobreponer a la visién, representa un elemento
constitutivo de la visién misma, de tal modo que visién, interpretacién y conocimiento
previo se relacionan de manera inextricable en uno y el mismo fenémeno. En otras
palabras, un objeto no se percibe de manera auténoma, siempre se ve desde un
entramado de interrelaciones conceptuales previas que estructuran y por tanto, dan
sentido a los fenémenos; teoria y observacién se encuentran imbricadas de tal modo,
que pretender una observacién pura de objetos autoidentificantes significa no haber
entendido la naturaleza propia de toda observacién cientifica, La interpretacion que se
encuentra en la visién, esto es, la estructura que se articula desde lo que ya conocemos,
posibilita que algo tenga significacién, algo es significante si se puede interrelacionar de
algiin modo con el conjunto de conocimiento que ya poseemos, si no logramos realizar
es
conexién, la visién simplemente no se da 0 se da de manera borrosa. Es imposible
ver antilopes en un dibujo si nunca se ha visto uno; un nifio de cinco afios que entra a un
laboratorio de fisica no verd lo mismo que el fisico especialista; alguien que desconoce el
japonés no podrd entender lo que determinado signo de ese idioma significa; el bebé que
juega con un reloj no puede ver qué hora es; en todos estos casos, el conocimiento previo
es lo que permite la emergencia de los fenémenos.
Las ideas y concepciones previas han sido asimiladas de tal manera por el observador
que éste las aplica sin ni siquiera pensarlas, ve al mundo a tra
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's de lo previamenteasimilado y lo hace sin aplicar procesos intelectivos-racionales, s6lo ve. Esto sugiere que
la interpretacién organizativa de la visién se desarrolla en un plano ontolégico, el ser
humano con sélo ver esta interpretando, es lo que hacemos cuando esquivamos una
bicicleta o apreciamos que un cantante desafind. No se piensa, pero entendemos del
caso. Este entender del caso que se da cuando una enfermera ve que una herida esta
infectada, se mira el reloj y se sabe qué hora es, se detiene el auto ante una luz roja, etc.,
constituye el origen o suelo desde el cual se construye toda clase de “interpretacién”
te6rico-reflexiva propia de actos intelectivos. No existe entonces ruptura entre
interpretacién e “interpretacién”, mas bien la interpretacién constituye una condicién
de posibilidad de la “interpretacién” ya que todo conocer se gesta desde los saberes
previos que constituyen al ser humano. Conocer y ser no representan dos esferas
separadas que después haya que unir mediante algin artificio. Tenemos entonces que
antes de cualquier deliberacién 0 conducta teorética, el cientifico desarrolla su actividad
desde saberes previos, desde la tradicién cientifica en la que se ha formado, por tanto, es
la tradicién lo que permite un cierto modo de interpretar al mundo, entendiendo
interpretacién como ese momento organizacional constitutivo que tiene toda vision. La
relacién con el saber tradicional muestra una inclusién en ambos sentidos, por una
parte, la tradicién permite configurar, dar sentido a lo que se ve y por otra, el observador
puede corregir, transformar, reinterpretar a la tradicién. Esta noci6n de pertenencia o de
inclusién doble constituye el niicleo relacional de quien observa con el mundo observado
que permite desmarcar la propuesta de Hanson de la relacién dicotémica moderna
sujeto/objeto para describir una unidad relacional de efectos reefprocos. El mundo no se
ve objetivamente, sino que se ve desde lo que somos, seres histéricos, conformados
ontolégicamente por conocimientos previos. La pertenencia a una tradicién permite
abrir una nocién de conocimiento basada no ya en procesos subjetivos de inteleccién
sino en la naturaleza ontologica que describe a la interpretacién por la pertenencia que
tiene el intérprete a su tradicion.
Todas estas consideraciones sobre la interpretacién intrin:
pretenden negar que una de las caracteristicas de la actividad cientifica sea la
“interpretacién” intelectiva, deliberada, teorética, racional, que permite extraer
conclusiones y derivar implicaciones de los fenémenos; sin embargo, estas
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