16El hombre que comete injusticias conmigo y con tu mujer es nuestro enemigo
precisamente. Si coges a la sirvienta que va al mercado y os sirve a vosotros y las
torturas, pregunt todas estas cosas, que no solo corrompiste a tu mujer, sino a otras muchas. Tiene este arte. 17Diciendo estas cosas, seores del jurado, aquella se alej, yo al momento, me qued aturdido. Y todas estas cosas a m me vinieron a la mente, y me llen de sospechas, pensaba que me haba quedado cerrado en la habitacin, recordando que aquella noche hizo ruido la puerta del patio y de la entrada, lo que nunca haba sucedido, a m me pareci que llevaba la cara pintada. Estas cosas a m me vinieron a la mente, y me llen de supersticiones. 18 Llegando a casa y ordenando a la sirvienta que me acompaara al gora, y conducindola a donde uno de los vecinos le dije que yo estaba enterado todo lo sucedido en la casa, dije: es posible decidir para ti cul de estas dos cosas quieres: o tras haber sido azotada acaba en el molino y nunca dejar de estar junto a estos males, o confesando todas estas cosas sin padecer este mal, sino obtener junto a m el perdn de las cosas que han sido hechas mal. No digas ninguna mentira, sino di toda la verdad. 19 Y aquella, en principio, lo negaba, y le anim a hacer lo que quisiera, que no saba nada. Pero cuando le record a ella a Eratstenes, y dije que este era el que frecuentaba a mi mujer, se asust pensando que yo conoca todos los detalles, completamente, y entonces ya cay sobre mis rodillas. 20 teniendo confianza en m, en primer lugar, confes que se acerc a esta despus del entierro, despus esta fue a avisarle tras terminar y de qu modo iba a las entradas, que aquella haba persuadido con el tiempo y que en las Tesmoforias acompa al templo a la madre de aquel, mientras estaba yo en el campo, pero me cont todas estas cosas con exactitud, una vez que todo esto fue dicho por ella.