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Botones obedientes. El ritmo lento de la cremallera. Caricias que no piden permiso. Cierro los ojos. La mente en blanco. En rojo.

No, mejor en negro. Puedo sentir cada centmetro de mi cuerpo. Un susurro al odo. Un beso en el cuello. Mi piel se pone en guardia. Un dedo repasa mis labios. Mi lengua investiga. Lo saborea. Zigzagea hmedo hacia mis pezones. Los bordea. Los pellizca con suavidad. Adivino unos labios bajando mi vientre. Despacio. Recrendose en mi obligo. Posndose dulcemente sobre mis braguitas. Millones de partculas bullen dentro de m. Un suave roce avanza por el interior de mis muslos. Cmplice de mis deseos se cuela entre mis piernas. Me acaricia. Me hace estremecer. Mi excitacin se desborda. Muerdo mi labio inferior. Mis manos apresan las sbanas. Aprieto las nalgas. Suspiro entrecortada. Me entrego a la ms bella agona. Siento que voy a explotar... El blanco lo inunda todo. Slo escucho un lejano tic-tac. Estoy flotando... Cunto tiempo llevo aqu? Veo una puerta. Se abre. Siento un hormigueo. Algo me empuja hacia ella. Es el latido de mi corazn. Ven aqu. Abrzame. "Al alcanzar un orgasmo algunas mujeres pierden la conciencia durante unos segun dos. Sufren una pequea muerte o petite mort."

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