viaje & turismo

NÍGER
T ierra de Touaregs
Niamey se abre ante nuestros ojos como La noche nos acoge en la pequeña

L a llegada al aeropuerto
de Niamey es una
experiencia en sí misma,
una típica ciudad de África occidental,
bulliciosa, llena de vida, con el siempre
presente ir y venir de sus gentes a lo
aldea Peul, en pleno centro de Sahel, y
en un abrir y cerrar de ojos montamos
nuestras tiendas de campaña por debajo
p
ne
d
largo y ancho de todas sus calles y de un inquietante cielo rojizo que acabó nó
una aglomeración de gente avenidas. estallando en una enorme tormenta, vi
esperando la llegada A bordo de un 4x4 emprendemos barriendo con todas las tiendas y con su
nuestro camino, alejándonos cada vez todo lo que había en su interior.
de las maletas, inmersa más del mundanal ruido producido por Con las primeras luces del amanecer, ce
en un caos enorme entre la capital hasta llegar a sumergirnos nuestras cosas habían desaparecido de se
de lleno en un África rural, intensa; en nuestra vista, pero las encontramos algo
astutos maleteros que están donde la gente llena los caminos inmersa más tarde, a un centenar de metros de
a la caza de cualquiera en sus quehaceres diarios. donde las habíamos dejado la última vez.
que desee contratar sus
·
servicios. Una desordenada
fila humana avanza poco
a poco, cada vez más
compacta, perdiendo
al final todo tipo de orden
y con el único objetivo
de poder estampar un sello
en el pasaporte. Adelante,
los impasibles policías, para
los que el tiempo no tiene
ningún tipo de valor.

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