LA DOCTRINA DE LA IGLESIA SOBRE LA CONCIENCIA ERRNEA.

Primera Corintios, captulo 8 (de la carne inmolada a los dolos) Vaticano II, Gaudium et Spes 16. Catecismo de la Iglesia Catlica: 1790-1794 Veritatis Splendor: 62: Referencia a la GS 16. La conciencia puede equivocarse, conservando su dignidad. 63: (1) La dignidad de la conciencia deriva siempre de la verdad *objetiva, acogida por la persona. *subjetiva, lo que la persona considera subjetivamente verdadero; lo que ella cree que hay que hacer (2) No se pueden equiparar estas dos formas de acoger la verdad: la conciencia recta y verdadera con la conciencia errnea. En primer lugar porque aunque el error no es imputable subjetivamente no deja de ser objetivamente un mal, un desorden respecto a la verdad sobre el bien. En segundo lugar, porque el actuar con conciencia errnea no contribuye al crecimiento moral de la persona que lo hace. Y por ltimo, porque podemos sentirnos fcilmente justificados. Hay culpas que no logramos ver y que sin embargo con culpas. (3) La Conciencia errnea no es vinculante para los dems, slo para el sujeto. (4) La conciencia errnea no tiene carcter de definitividad como la C. verdadera. (5) La conciencia Compromete su dignidad cuando es culpablemente errnea. Cuando, como dice la GS 16, el hombre no trata de buscar la verdad y el bien, y cuando, de esta manera, la conciencia se hace casi ciega como consecuencia de su hbito al pecado. 64: Formar la conciencia, hacindola objeto de continua conversin. Hasta lograr una especie de connaturalidad entre la persona y el verdadero bien Para ello tenemos la ayuda del Magisterio. La Iglesia como madre acompaa y orienta con juicios autorizados sobre lo que concuerda con o aparta de la fe. Es fuerte esta afirmacin de San Ignacio de Loyola: debemos siempre tener que lo blanco que yo veo, creer que es negro, si la iglesia jerrquica as lo determina.