Sei sulla pagina 1di 4

Eurípides, Medea, vv 1020 ss

El TEATRO GRIEGO

Al parecer, el teatro griego se originó al aire libre (orchestra), donde se ejecutaban


unas danzas. Un lugar de tierra lisa y compacta dispuesto para la representación
de cantos corales, una de cuyas variedades, el llamado ditirambo, fue de acuerdo
con la tradición, el progenitor de la tragedia ática. Todos los grandes teatros se
construyeron a cielo abierto.

El teatro griego tuvo sus orígenes en el siglo VI A.C en las fiestas dionisíacas que
se celebraban en honor a dios Dionisio.

Estas fiestas religiosas se efectuaban en la ciudad alrededor


de la segunda semana de marzo y en las afueras, (las
Dionisíacas de los Campos ) hacia septiembre. Duraban cinco
días, el primero dedicado a la procesión, el 2º a la
representación de cinco comedias y los tres últimos se
dedicaban a una competición de tragedias. Cada día un
escritor representaba tres tragedias previamente
seleccionadas por altos funcionarios.

Las obras eran seleccionadas por un jurado en concurso


público; los poetas debían presentar tres tragedias y un
drama. El vencedor recibía como premio una corona de oro y
laureles.

Los actores entraban a escena, como se menciona más


arriba, por la izquierda, si el personaje llegaba del campo y
por la derecha si deseaban que llegara de la ciudad.

.La vestimenta variaba de acuerdo al personaje: así un rey


vestía con hermosas túnicas rojas mientras que un
protagonista desdichado y perseguido se lo reconocía por sus
ropas oscuras.

El traje principal era el quitón o “traje de representación”, un


ropaje largo hasta los pies, apretado por un cinturón a la
altura del pecho. Se utilizaba además la clamide, una capa
corta que se cerraba con una hebilla sobre la espalda y el
himation, una capa larga, amplia y suelta, complementado
con unos botines para los pies y también la máscara que
representaba al personaje encarnado por el actor; los
componentes del coro, unas doce personas, también llevaban
máscaras.

LA TRAGEDIA
Es una forma dramática cuyos personajes protagonistas se
ven enfrentados de manera misteriosa, inexpugnable e
inevitable contra el universo o los dioses, moviéndose
siempre hacia un desenlace fatal por una fuerza ciega, la
fatalidad, el sino, el hado o fatum; las tragedias han de
acabar generalmente en muerte o en la destrucción física,
social, intelectual o moral del personaje principal, que es
sacrificado así a esa fuerza que se le impone y contra la que
se rebela con orgullo insolente o hybris. También existen las
tragedias de sublimación en la que el personaje principal es
mostrado como un héroe que ante las adversidades se
sobrepone por la fuerza de sus virtudes y el espectador
termina admirándolo

EURÍPIDES: ( 480 a 406 a. C) Fue un poeta culto que mantuvo amistad con
los filósofos Anaxagoras y Sócrates.

Profundamente realista, sus obras se caracterizan por los


complicados enredos, creando verdaderos dramas de intriga.
De las 88 obras que escribió nos llegaron dieciocho, entre las
que destacan Alcestis, Medea, Hécuba, Andrómaca,
Troyanas, Ifigenia en Táuride o Las Bacantes.

Aumentó considerablemente el número de actores.

TEMA, RESUMEN Y ESTRUCTURA DEL TEXTO

Tema: Medea se lamenta por el acto tan terrible que debe


protagonizar al tomar la decisión de matar a sus hijos.

Resumen: Medea, cegada por los celos y la rabia, decide


vengarse de Jasón atacando moralmente su corazón. Decide
matar a los dos hijos que concibió cuando estaba con él,
derramando así la sangre de éste por medio de otros.

Estructura: en la introducción del texto, Medea se queda sola


con sus hijos y les habla, entristecida por la decisión tomada
de matarlos. Comienza a imaginar su futuro y el de sus hijos
si no los matara.

En el nudo, Medea se tambalea ante su decisión, deliberando


entre si el sentimiento de venganza es más fuerte para ella
que ver sonreír a sus hijos vivos.

Sin embargo, el texto finaliza con la decisión firme de Medea


de matarlos, pues se despide de ellos, deseándoles una vida
feliz en el Hades.
COMENTARIO DEL TEXTO

CONTEXTO: Jasón acordó con el rey Creonte abandonar a


Medea, a la que el Rey pretendía expulsar de Corinto, para
unirse a su hija la princesa Glauca. Medea entonces,
arrastrada por los celos, envió a Glauca como regalo de bodas
un manto de irresistible belleza. Cuando Glauca lo recibió de
manos de la sirvienta de Medea se lo puso de inmediato,
liberando la magia contenida en él que la convirtió en una tea
llameante. Las llamas la consumieron totalmente a ella y a
Creonte, que se abalanzó sobre ella con intención de salvarla.
A continuación, según la versión que nos ha llegado y para
hacer el máximo daño a Jasón, mató a los dos hijos que
habían tenido en común. Otra versión afirma que Jasón había
dejado a Medea por Creúsa, que parece ser la propia Glauca,
a la que Medea regaló un vestido que al ponérselo se le
pegaría al cuerpo y la mataría.

ANÁLISIS: Medea, totalmente enloquecida, se deja llevar por


los celos que siente hacia Jasón, pues la ha abandonado,
apuñalándole donde más le duele, sus hijos. En su interior
protagoniza un gran conflicto, entre su mente y su
corazón. Al comienzo del texto, Medea imagina la vida de sus
hijos si estos vivieran: ":in duda que, infeliz, puse muchas
esperanzas en vosotros y que me sostendríais en la vejez que,
una vez muerta, me enterraríais piadosamente con vuestras
manos, suerte envidiada por los hombres". Sin embargo,
puede verse claramente que el orgullo es lo más importante
para ella, por encima de todo, incluso si preservar su
dignidad significa derramar la sangre de sus propios hijos.

En el segundo párrafo, podemos ver cómo tras estos


pensamientos anteriores, sus decisiones comienzan a
tambalear. Al ver en sus pensamientos cómo se van apagando
las sonrisas de sus hijos si ésta los llegara a matar, Medea,
presa del pánico lucha contra sus intenciones ; "¿Qué hacer?
El corazón se paraliza, mujer, cuando veo la radiante mirada
de mis hijos. No podría; adiós decisiones anteriores."

Sin embargo, a partir del tercer párrafo, Medea se corrige a sí


misma : " Pero, ¿qué sentimientos son estos? ¿quiero ser
objeto de risa, dejando a mis enemigos sin castigo? ¡ Ah, cuan
cobarde soy, por haber acogido blandos pensamientos en mi
mente!".

Finalmente, en los últimos párrafos, Medea se despide de sus


hijos, tomando la decisíón definitiva de matarlos, pues sólo
con pensar que crecerían con sus enemigos le produce un
ardor terrible. Así pues, con estas palabras, decide mandarlos
al Hades, deseándoles una vida feliz allí ; "¡ oh, mano
queridísima, boca muy amada, figura y nobles rasgos de mis
hijos! Sed felices, pero allá; vuestro padre os ha arrebatado
las alegrías de aquí".

COMENTARIO CRÍTICO

Todas las mujeres han experimentado alguna vez un


desengaño amoroso, unos más fuertes que otros, y algunas
más afectadas que otras. El dolor que se siente es a veces
superior a nuestras fuerzas interiores y a menudo tendemos a
cometer locuras. Sin embargo, el 80% de las mujeres que
sufren una separación, ven en sus hijos la esperanza
personificada, un sentimiento mucho mas fuerte que el dolor,
nada incomparable, alguien que hace que mires hacia delante
y no hacia atrás.

El caso de Medea es totalmente diferente a los demás. Su


sufrimiento es tan grande que ha enloquecido, convirtiéndola
en un ser malévolo presa del sentimiento de venganza. Cree
que la mejor de las venganzas sería atacar el corazón de
Jasón, acabando con la vida de sus hijos. Esto demuestra, que
para Medea, sus hijos son la mejor arma para devolver el
golpe recibido, pues la venganza puede más que el amor de
una madre por sus hijos.

Potrebbero piacerti anche