Acerca De La Verdad: Series Acerca de

Todos los derechos reservados. Ninguna parte de esta publicación puede reproducirse, almacenarse o introducirse en un sistema de recuperación, ni transmitirse, de ninguna forma ni por ningún medio (electrónico, mecánico, fotocopia, grabación u otro) sin la previa autorización escrita de parte de ambos propietario, el autor y el editor de este libro.

Esta es una obra de ficción. Los nombres, personajes, lugares, marcas, medios e incidentes son producto de la imaginación del autor o se usan de manera ficticia. Cualquier parecido con una persona real, vivo o muerto, eventos o lugares es completamente fortuito. El autor reconoce el estado de marca registrada y los propietarios de marca de varios productos mencionados en esta obra de ficción, que han sido utilizados sin permiso. La publicación / uso de estas marcas comerciales no está autorizada, asociada ni patrocinada por los propietarios de la marca comercial.

Todos los derechos reservados.

Copyright 2017 by Lexy Timms

Portada por: Book Cover by Design

Fotógrafo: Dave Kelley

Modelos: Lance Jones &

Jami Watts

About Truth Blurb

¿Qué podría ser más sexy que un ardiente hombre ruso fuerte como una casa de ladrillos? Uno que está tan enamorado de ti....

––––––––

Perdida en una relación amorosa ardiente y romántica, la joven y bella Kallie Margolis tiene todo, casi. Ella tiene una hermosa casa, todo el dinero que necesita y la atención total del hombre más magnífico que pueda imaginar. Solo que ella no tiene que imaginarlo porque Sasha Petrov es maravilloso, más grande que nadie, increíble en la cama, y ​​muy real.

Sasha es también el que inconscientemente ayudó a arruinar todo lo que Kallie una vez tuvo, y aun así ella se enamoró de él. Se gana la vida en los barrios bajos de Baltimore de una manera que Kallie no quiere saber. Ella vuelve la cabeza a pesar de que una vez fue víctima de sus fechorías. Pero la necesidad animal que tienen uno del otro les hace volar más allá de todo eso, y pasan el mejor momento de sus vidas, ya que Sasha lo hace todo por ella...

Justo cuando el mundo no puede volverse más rosa, su pasión está más descontrolada, el fondo amenaza con desaparecer. ¿Sasha ha estado jugando a Kallie? ¿Él va a llevarla a dar otra vuelta? ¿O puede Kallie confiar en el chico malo y sensual cuando dice que es el amor por ella, no por una vida delictiva, lo que lo impulsa?

Series Acerca de:

Acerca Del Amor

Acerca De La Verdad

Acerca Del Para Siempre

Series Acerca de

Acerca del Amor

Libro 1

Acerca de la Verdad

Libro 2

Acerca Del Para Siempre

Libro 3

Encuentra a Lexy Timms:

Lexy Timms Novedades: 

http://eepurl.com/9i0vD

Lexy Timms Facebook:

https://www.facebook.com/SavingForever

Lexy Timms Website:

http://www.lexytimms.com

¿Quieres leer más...

GRATIS?

Suscríbete para conocer las novedades en Lexy Timms’ newsletter

Y ella te enviará

¡Una lectura de forma GRATUITA!

¡Suscríbete para novedades y actualizaciones!

http://eepurl.com/9i0vD

Contenido:

About Truth Blurb

Series Acerca de

Encuentra a Lexy Timms:

Capítulo Uno

Capítulo Dos

Capítulo Tres

Capítulo Cuatro

Capítulo Cinco

Capítulo Seis

Capítulo Siete

Capítulo Ocho

Capítulo Nueve

Capítulo Diez

Capítulo Once

Capítulo Doce

Acerca Del Para Siempre Publicidad

Más de Lexy Timms:

Find Lexy Timms:

Capítulo Uno

Kallie estaba siendo seguida.

No es que eso la preocupara mucho. Bajo brillante sol de la mañana, cuando el mundo era despertando, incluso un malo vecindario se veía bien. Kallie trotó sobre la acera torcida que se desplegaba ante ella, frente a casas antiguas en una parte de la ciudad que había visto días mejores. Pero los jubilados que trabajaban en sus jardines la saludaron alegremente al pasar, acostumbrados a sus trotes matutinos. Algunos la recibieron con una sonrisa y la llamaron por su nombre. Verdaderamente el vecindario se estaba haciendo familiar.

Casa.

Nadie parecía estar demasiado preocupado por el automóvil que se arrastraba a su paso.

Escondió una sonrisa, manteniendo el ritmo estable, negándose a mirar hacia atrás.

Su trenza golpeó contra su espalda mientras corría. Era una sensación reconfortante, su gran peso era un placer que todavía saboreaba después de demasiados años de usarlo corto. Una cosa más para darle satisfacción.

¿Es esto lo que se siente sentirse.... normal?

Era una pregunta que se había hecho a sí misma con frecuencia últimamente. Una cosa que se preguntaba junto a la otra.... en la que ella se negaba a pensar incluso mientras él se arrastraba detrás de ella.

Afortunadamente ella ya había hecho su ronda, una ruta de casi tres millas, y estaba en su camino de regreso a su casa cuando él apareció. Como si no hubiera notado el auto solitario, un largo y antiguo auto, de color índigo, cuando rugió a lo largo de la amplia calle. Morado. Él en realidad tenía un Mustang morado. Debería haber una ley contra los vehículos que parecían caramelos de uva. Por otro lado, encajaba con el estilo, ¿quién era ella para criticar?

Echó un vistazo detrás de ella y luego volvió a mirar hacia adelante, escondiendo una sonrisa, decidida a trotar en los últimos bloques.

¿Será esto amor? Esa fue su segunda pregunta, la de la respuesta que la asustó de muerte.

Sus pies golpeaban la acera mientras pensaba en esto. Le dio un tipo de sensación nerviosa, sabiendo que estaba detrás de ella. Sasha Petrov era tan llamativo como su coche. Parecía un cliché usar palabras como 'precioso' cuando lo describía, cuando 'semi-dios' podría haber sido más preciso. Ella había estado perdida por él un tiempo, y el hecho de saber que sus ojos estaban puestos en ella mientras corría ya había enviado un calor húmedo en su interior. Sin rodeos, se sintió como un animal en celo en su presencia, un sentimiento que era completamente nuevo para ella de muchas maneras.

Ella reconoció la mirada de una madre empujando una carriola en la dirección opuesta. Los ojos de la mujer brillaron con especulación mientras miraba alternando entre Kallie y el coche que la seguía, una sonrisa indulgente e incluso maternal al pasar. Este era el vecindario de Petrov; no había un alma aquí que no lo conociera, que no supiera que estaba viviendo en su casa en la siguiente cuadra. No es que estuviera viviendo con él. Esa distinción probablemente se perdió entre los lugareños, especialmente teniendo en cuenta la frecuencia con la que venía últimamente a altas horas de la noche.

La pregunta era ¿quería ella que hubiera algo más... permanente entre ellos?

Llegó a la última calle. Podía ver el techo de la casa a través de los árboles. El sudor goteaba entre sus pechos y su respiración se hizo más corta. Sus pensamientos la habían enviado corriendo más rápido de lo normal. ¿O simplemente estaba tan ansiosa por llegar a casa?

Se dejó caer, echando un vistazo atrás para ver mejor el auto. Tenía varios vehículos en su colección, y este era algo que no había visto antes, aunque sabía que era él cuando rugió detrás de ella. El robusto auto era tan distintamente suyo que había tenido perfecto sentido desde el momento en que lo había visto. Tenía que ser más viejo que ella, probablemente construido en la década de 1960, aunque ella no era experta. A su padre le gustaban los autos viejos, había conseguido un calendario todos los años de autos antiguos que había colgado en el garaje junto a su mesa de trabajo. El Mustang era seductor, elegante y sexy. Pero, entonces, cualquier cosa que Sasha tocara o con la que estuviese conectada tendría ese efecto en ella. La química entre los dos era poderosa.

Y atemorizante

¿Cómo se explica cómo dos personas tan tremendamente diferentes podrían ser tan compatibles? Debería haberse sentido como demasiado, demasiado pronto; no había pasado tanto tiempo desde que se conocieron. Demasiado pronto para mudarse a su casa de esta manera. Demasiado pronto para ser.... apoyada.... por él. No completamente. Solo.... lo suficiente, se recordó a sí misma. Ella podría irse en cualquier momento.

No es que ella quisiera. Tan complicado como eran las cosas, ella estaba bien con el arreglo. Deja que los vecinos piensen lo que quieran. Ella y Sasha estaban tan enganchados que era como si el destino se hubiera apoderado de ellos y los hubiera unido.

Las casas junto a la suya tenían una sensación distintiva para ellos. Estos vecinos eran rusos multigeneracionales como Sasha, aunque completa y totalmente estadounidenses, y tenían muchas costumbres y lenguaje del Viejo Mundo. Su decoración refleja eso, dando a esta sección del vecindario una sensación algo europea. La observaban, ella lo sabía. Todos y cada uno de ellos conocía y adoraba a Sasha como si fuera su hijo, y lo protegían. La habían mirado con recelo cuando ella había llegado por primera vez. Ahora la saludaban y le hablaban, aparentemente felices de verla.  

Eso fue obra de Sasha. Él sabía cómo manejar a estas personas, cómo ser respetuoso con ellas. Él era su cuidador no oficial y ayudaba a mucha gente en el vecindario. Su inclinación para hacer esto era por lo que él y Kallie se unieron.

***

Las personas mayores especialmente pensaban en él como un buen hombre. Si supieran, pensó Kallie. Ella lo había visto una vez cuando la viuda de al lado tomó la hermosa y vibrante cara de Sasha en sus viejas manos, le tiró de las mejillas como si fuera un niño, y le besó la frente. Si supieran que Sasha Petrov se gana la vida haciendo cosas que definitivamente no debería. Cosas de las que no podía hablar, ni siquiera con Kallie.

Iba a toda velocidad por la acera, no dejaba de molestarlo mientras él se movía detrás de ella, el motor del coche ronroneando como un gato grande. Era media mañana, a plena luz del día, y la calle frente a ella estaba misericordiosamente vacía. Se sentía como si ella y Sasha fueran las únicas dos personas en el planeta.

Mantuvo el auto a una distancia suficiente detrás de ella, para poder ver su trasero. Kallie con mucho gusto lo movió para él. Ella sabía que él tenía algo con su cabello, alegando que el rubio le recordó a una cascada de nieve o hielo, así que lo acomodó por él. Luego le lanzó una mirada ardiente. Nadie podría verse más perfecto en el asiento del conductor que él. Su cabello color miel era largo, recto, pero con cuerpo suficiente para caer en forma perfecta, como si lo hubiera cepillado. Su espesa barba era una sombra perpetua a las cinco en punto, aunque sabía a ciencia cierta que se afeitaba todos los días.

Pero amaba la aspereza de su piel cuando frotaba su rostro contra ella. Solo pensarlo era suficiente para aumentar su temperatura un grado o dos, de una forma que no tenía nada que ver con el ejercicio. Desde allí fue un salto corto al recuerdo de cómo su enorme cuerpo estaba tan perfectamente en forma y cómo se sentía contra el de ella. Otra mirada hacia atrás le mostró su enorme bíceps, exhibido tan perfectamente cuando colocó su brazo a lo largo de la ventana abierta. Vio la manga de lo que sabía que era una camiseta suave y desteñida. Aunque no era ridículamente apretado, no ocultaría nada del corte de sus músculos. Kallie sonrió, volviéndose de nuevo con un movimiento de su trasero, burlándose de él.

–  Estoy a punto de agarrar eso. –  juguetonamente amenazó.

Ella juguetonamente lo interrumpió –  ¡Cuidado con tu lenguaje! –  Le advirtió –  Las abuelas están escuchando.

– Iba a decir 'cabello'– respondió inocentemente.

Era un juego erótico que jugaban. Dirigió el automóvil sin prestar mucha atención a la carretera. Cada vez que ella lo miraba, tenía los ojos entrecerrados. Kallie lanzó un pequeño movimiento adicional en su caminar.

– Maldita sea.... eres la perfección – Su voz era un gruñido bajo, apenas escuchado por el rugido del motor –  Creo que puedes terminar tu entrenamiento. No hay forma de que puedas mejorar eso.

Tal vez fue un poco sexista, pero su cumplido hizo que sus entrañas brillaran.

Una sonrisa se extendió de oreja a oreja. Por nueva que fuera su relación, lo único que Kallie sabía con absoluta certeza era que Sasha no era un hombre que dudara en buscar lo que quería –  Me haces sonrojar – declaró.

–  ¿Dónde? – Preguntó – Ven, muéstrame – Ven y sube a mi auto – dijo la araña a la mosca.

Los ojos de Kallie se agrandaron cuando consideró todos los significados posibles de esa declaración –  Dios mío – dijo ella –  ¿Vas a atarme y succionarme la vida?

–  No en las habrá muchas cuerdas, bebé –

Lo que significaba, por supuesto, que lo había intentado en algún momento. Eso trajo una gran cantidad de ideas que la hicieron arder de nuevo.

–  Pero creo que te verías dulce con un listón.

Eso fue aún mejor.... más romántico. Más sexy. Por un momento no pudo respirar y se quedó balanceándose en la acera –  Dime algo en ruso – suplicó ella, queriendo manejar la fantasía.

Sasha nunca había estado en su país ancestral, pero habiendo crecido en la comunidad unida, podía hablar su lengua materna con fluidez. Soltaba una frase de vez en cuando, y volvía loca a Kallie. Se mordió el labio y esperó con esperanza.

–  No. Solo las mujeres que suben al auto me escuchan hablar en ruso –  Se cruzó de brazos, esperándola a que